21-02-12 07:00 | #9653448 -> 9653446 |
Por:juanjo92 ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: A los pardillos que despotrican de los malvados banqueros... Después de la transición política, las cajas andaluzas quedaron muy pronto sometidas al poder del PSOE a pesar de los intentos de la UCD por respetar un carácter profesional y una cierta autonomía al margen de la política que luego añorarían los editorialistas de El País. Mucho ha llovido desde la primera medida del Partido Socialista Obrero Español de Andalucía contra la autonomía de las Cajas de Ahorros. Ocurrió en 1983 y se perpetró a partir del decreto 25/1983 de 9 de febrero, que puede examinarse en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía número 13, de 15 de febrero de 1983. En él, la Junta de Andalucía ya presidida por el PSOE a través de la figura de Rafael Escuredo, decretaba que podía ejercer el derecho de veto sobre los nombramientos de Director General y asimilados, que podía impedir o aprobar la expansión de las Cajas según conviniera; que podía suspender los acuerdos de los Consejos de Administración y que tenía que conocer cualquier nombramiento que se hiciera en la esfera ejecutiva. Nada menos. Sólo habían transcurrido unos meses desde su victoria electoral y, como saben, el dinero de las Cajas ni era ni es de la Junta ni era ni es del PSOE. El dinero de las Cajas era y es de los impositores andaluces, de los ciudadanos y, según los casos, de los fundadores privados o públicos. Pero dicho resultado se obtuvo haciendo trampas. La referencia al Real Decreto 2290/77 de la época Suárez es significativa. Una lectura atenta de aquel texto legal muestra cómo se retorció dicho decreto para dar el poder en las Cajas a la Junta de Andalucía. De hecho y por ejemplo, en dicho decreto era el director general de las Cajas, de cada una de ellas, quien podía suspender la ejecutividad de los acuerdos del Consejo de Administración, pero en el decreto de la Junta, tal facultad ya forma parte de las atribuciones de la Junta de Andalucía eliminando al director general sin haberse cambiado la ley. Es decir, que no se transpuso meramente el Decreto, sino que se alteró sustancialmente. El segundo paso debía ser ya la penetración masiva del PSOE en los órganos de dirección de las Cajas andaluzas. Esta segunda ofensiva se dio en 1986. A nivel nacional, y como bien analizó El País, el PSOE se sabía con un gran poder municipal. Ese poder, en Andalucía, era casi omnímodo. Los resultados de las elecciones de 1979 y 1983 habían dejado una inmensa mayoría de Ayuntamientos andaluces en manos de la izquierda, sobre todo socialista desde 1983. Se trataba de promover la transferencia del poder de las cajas desde sus legítimos detentadores - que deberían haber sido y deben ser mayoritariamente los impositores, casi siempre los pequeños ahorradores del pueblo andaluz, los trabajadores autónomos y asalariados, junto con los fundadores -, hacia los partidos políticos, sobre todo hacia el partido ganador de las elecciones de 1982 y de 1983, pervirtiendo así una de las reglas de la representación democrática. ¿Por qué habrían de ser los representantes políticos los que gestionasen en gran parte los dineros privados de los impositores y fundadores y no los propios impositores y fundadores? ¿Por qué regla de tres democrática se concluyó que era más democrático el control político municipal, provincial o autonómico que el control de quienes tenían sus propios dineros en dichas instituciones? Los cambios que introduce la Ley de Órganos Rectores de las Cajas de Ahorros (LORCA) de 1985 y la penetración socialista La aplicación de la LORCA de 1985, que daba carta de naturaleza a la presencia política municipal en las Cajas, tuvo como consecuencia la irrupción masiva de militantes del PSOE y de otros partidos en las Cajas de Ahorros en el conjunto de España. Muy especialmente, la presencia socialista fue decisiva en Andalucía porque fue el PSOE el que ganó abrumadoramente las elecciones municipales de mayo de 1983. Es decir, el PSOE arrasó en las elecciones municipales de 1983 en Andalucía y avanzó mucho en España. Era el momento, pues, de utilizar el poder municipal para producir el asalto a las Cajas de Ahorro en toda España y, muy especialmente, en Andalucía. Por eso, la LORCA se elaboró en 1985. El PSOE afirmó entonces, y sigue afirmando ahora, que aquella ley era necesaria para democratizar las Cajas de Ahorro, muy especialmente dando paso a los Ayuntamientos en el gobierno de las mismas. En nuestra interpretación, lo que hizo el PSOE, singular y sistemáticamente en Andalucía, fue utilizar la “excusa municipal” para proceder al control de todas las Cajas de Ahorro andaluzas, con la excepción de la Caja de la Iglesia en Córdoba porque no pudo. La prueba de la justicia de nuestra afirmación es que los Ayuntamientos jamás fueron considerados por el PSOE como piezas claves de la democracia autonómica. Al contrario, aún en nuestros días, los ha mantenido en una posición subordinada negándose siempre a poner en marcha la descentralización de competencias y aportar los dineros necesarios para su autonomía. | |
Puntos: |
21-02-12 07:07 | #9653449 -> 9653446 |
Por:juanjo92 ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: A los pardillos que despotrican de los malvados banqueros... La Ley de 1999 Hasta el momento, la Junta de Andalucía como tal no tenía presencia decisiva en las Cajas. Los actores de las asambleas y los órganos rectores eran los Ayuntamientos, los impositores, los fundadores y los trabajadores. Pero Chaves nunca fue municipalista, ni siquiera hipócritamente. Fue siempre un centralista. De hecho acudió a Andalucía como “candidato a palos” para acabar con las veleidades “autonomistas” de José Rodríguez de la Borbolla y devolver el granero andaluz al control de Felipe González y Alfonso Guerra. 22 Desde 1999, la Junta de Andalucía penetró en las Cajas andaluzas y, en general, en las actividades de todas las cajas que operan en Andalucía. El artículo decisivo que lo confirma es el 4: “Artículo 4. Protectorado y principios inspiradores. La Consejería de Economía y Hacienda, conforme a lo previsto en la normativa que resulte de aplicación, ejercerá el protectorado y control público de las Cajas de Ahorros de acuerdo con los siguientes principios: La mejora del nivel socioeconómico de Andalucía, estimulando las acciones de las Cajas de Ahorros dirigidas a este fin. El cumplimiento de la función económico-social de las Cajas de Ahorros, y de la realización por éstas de una adecuada política de administración y de inversión del ahorro. La cooperación entre las Cajas de Ahorros domiciliadas en Andalucía. La garantía de los principios de democratización, independencia, eficacia y transparencia en la configuración y funcionamiento de sus órganos de gobierno. La protección de la independencia, solvencia, estabilidad y prestigio de las Cajas de Ahorros. La defensa de los derechos e intereses legítimos de sus clientes. La vigilancia del cumplimiento por las Cajas de Ahorros de las normas de ordenación y disciplina de las entidades de crédito.” En realidad, como se verá a lo largo de las páginas de este libro, lo que se estaba promoviendo era la sumisión total de las Cajas a las políticas emanadas del gobierno de Manuel Chaves. Desde este momento, todo tenía que pasar por la Junta de Andalucía. Desde la fundación de nuevas cajas, cosa que nunca más tuvo lugar, a las normas de elección de sus órganos rectores. Por poner un ejemplo notorio, desde la aprobación de esta Ley se pidió el cese o dimisión del cura Castillejo en Caja Córdoba, la única caja andaluza no controlada directa y esencialmente por el PSOE. Ciertamente, Manuel Chaves, y sobre todo su consejera Magdalena Álvarez, deseaban matar dos pájaros de un tiro. Cargarse la influencia de la Iglesia en las Cajas y dar a luz el proyecto de caja única que haría imparable el poder socialista en las Cajas y, por ende, en la economía andaluza. El fracaso posterior de la Caja única y el pacto de marcha lenta en Caja Córdoba, que terminó en desastre, hicieron decir a El País que Chaves había fracasado 23 . El poder interno en cada Caja de Ahorro quedaba legislado de la siguiente manera. “La Asamblea General estará integrada por los Consejeros Generales designados o elegidos por cada uno de los siguientes grupos, en la proporción que se indica a continuación: a. Las Corporaciones Municipales en cuyo término tenga oficina abierta la Caja de Ahorros: 22%. b. Los impositores de la Caja de Ahorros: 27%. c. La Junta de Andalucía: 15%. d. Las personas o entidades fundadoras de la Caja de Ahorros: 13%. e. Los empleados de la Caja de Ahorros: 15%. f. Otras organizaciones: 8%.” Obsérvese que entre Junta y Ayuntamientos ya podían controlar el 37 por ciento de la asamblea. Llegar al 51 por ciento sólo era cosa de obtener un 14% entre impositores aislados, entre fundadores y empleados u otros. Nada imposible. En la dirección, la proporción favorable al PSOE era aún mayor. La Ley atribuyó a las corporaciones locales el 35% de los representantes en los órganos de dirección y un 21% al Gobierno autonómico, por encima del 51 por ciento de máximo que el Tribunal Constitucional había admitido como presencia de las instituciones públicas en las Cajas. Para el PSOE nunca resultó difícil maniobrar para conseguir la hegemonía, incluidas las presidencias, de las Cajas andaluzas porque su dominio de las Corporaciones Municipales, el hecho de que muchos Fundadores de Cajas fueran organismos públicos como las Diputaciones y la realidad sindical, la presencia de UGT y CC.OO., cada vez más sumisas, entre los representantes de los trabajadores, le aseguraban casi siempre la mayoría. Ahora, la presencia de la mayoría socialista en la Junta apuntalaba tal dominio. Respecto a los impositores, debido a la inexperiencia y a la desorganización de estos, era fácil que los propios presidentes en funciones de las Cajas y/o los partidos y sindicatos maniobraran en la oscuridad para conseguir sus apoyos. 24 De hecho, y por ejemplo, en los procesos de renovación de las asambleas de las Cajas sevillanas, El Monte y Caja San Fernando, los compromisarios por los impositores, elegidos legalmente por sorteo ante notario, se organizaron en una Candidatura Progresista de Compromisarios al servicio del PSOE que, según sus propios datos, controlaba el 40 por ciento de sus componentes. La realidad de lo que se avecinaba fue visto con claridad por empresarios e incluso por algún presidente de Caja como Isidoro Beneroso que propuso la participación en las Cajas de las pequeñas y medianas empresas. No fue posible. El entonces representante de la CEA, Manuel Martín, consideró que el texto de esta de Ley de Cajas consagraba "un intervencionismo público agobiante" y llegó a decir que con ella las cajas andaluzas se convertirán en "empresas públicas" de la Junta. En una fiebre casi incontrolada de poder, los representantes de Comisiones Obreras, que mandaban mucho y con claridad en El Monte, llegaron a exigir el incremento del poder sindical en detrimento de los impositores mientras que, por una vez, la organización de los empresarios andaluces (CEA), ligada al PSOE por mil y un favores, subvenciones y negocios, pedía que las Cajas fueran controladas por los impositores. A pesar del autoritarismo y la prepotencia con que Chaves y su consejera plantearon las fusiones y el conjunto del texto de la Ley, hubo rebeliones internas. La decisión de las asambleas de cuatro cajas de ahorros (El Monte, San Fernando, Caja de Jaén y La General de Granada) de no adaptar sus estatutos a la ley de Cajas en el plazo marcado por la nueva Ley fue un bombazo político y económico. En estas cajas andaluzas los Consejos de Administración no lograron conseguir el respaldo necesario de dos tercios de los consejeros delegados. Una decisión que suponía, de hecho, la no aceptación de la nueva norma autonómica. El “savonarola” oficial del régimen, Javier Pérez Royo, consideró esta rebelión una maniobra para provocar la dimisión de Manuel Chaves por incapacidad para hacer cumplir la ley de Cajas en Andalucía y pidió la cabeza de los “tránsfugas” tildando todo lo ocurrido de “juego sucio” del PP, un partido al que las reglas del juego instituidas por Chaves y su gobierno apenas le permitían tocar bola en las Cajas andaluzas desde la victoria del PSOE en 1982. | |
Puntos: |
21-02-12 07:10 | #9653450 -> 9653446 |
Por:juanjo92 ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: A los pardillos que despotrican de los malvados banqueros... La persecución de los disidentes Mucho antes de la rebelión de las Cajas, los socialistas ya dieron muestras de “talante”. Por ejemplo, Braulio Medel purgó sin contemplaciones a todo un alcalde socialista de Ronda, Julián de Zulueta, y le impidió estar presente en la Caja de Ronda. Como declararía el propio Zulueta, “La lectura de los hechos es bien clara: la Caja de Ahorros de Ronda vetó al alcalde de la ciudad el acceso al Consejo de Administración y a la asamblea general de la caja, saltándose la legislación a la torera. Después, sin saltársela, ha conseguido vetar su candidatura a la alcaldía de Ronda". Zulueta añadió que Braulio Medel, el nuevo presidente socialista de la Caja había pactado con la vieja dirección franquista de la Caja. Dulce venganza. Igualmente hizo con Charo Muelas, vinculada al CDS, destituida cuando se reincorporó a su puesto tras la campaña electoral en 1986. En este caso, la despedida logró llegar a un acuerdo con Medel negando que hubiesen existido “motivos políticos” en su destitución. Pero naturalmente, las grandes persecuciones tuvieron lugar tras la puesta en marcha de la Ley de 1999. Cinco fueron las cajas que no aceptaron las órdenes de Magdalena Álvarez y Manuel Chaves sobre el proceso de renovación y sus deseos sobre la forja de una Caja Única con Unicaja como eje vertebral: Caja Córdoba, El Monte, Caja San Fernando, Caja de Jaén y La General de Granada. En todas ellas comenzó, simultáneamente al proceso de renovación, la más despiadada persecución de los disidentes, muchos de ellos destacados militantes socialistas. | |
Puntos: |
21-02-12 14:24 | #9654980 -> 9653450 |
Por:socialista y ole ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: A los pardillos que despotrican de los malvados banqueros... Me gustaba más tu cuento sobre el 11 - M. | |
Puntos: |
21-02-12 22:23 | #9658002 -> 9653450 |
Por:Catalan2007 ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: A los pardillos que despotrican de los malvados banqueros... juanjo se ve que eres el mas fcha el mas fascista el mas ultraderechista que esiste en iznalloz no te importa la democracia solo piensas en ordeno y mando veo que eres un gentuzo | |
Puntos: |
22-02-12 07:31 | #9659184 -> 9658002 |
Por:juanjo92 ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: A los pardillos que despotrican de los malvados banqueros... Buenos argumentos tenéis para desviar la atención, pero no cuela,... LAS CAJAS ANDALUZAS ESTÁN DIRIGIDAS POR EL PSOE Las cajas que deshaucian a los trabajadores en paro están dirigidas por socialistas y sindicalistas. Las cajas que se han jugado todos los ingresos de sus impositores promoviendo una burbuja inmobiliaria sin control están dirigidas por socialistas y sindicalistas. Las enormes remuneraciones de los miembros de los consejos de administración de las cajas andaluzas han sido aprobadas y trincadas por socialistas y sindicalistas. | |
Puntos: |
Tema (Autor) | Ultimo Mensaje | Resp | |
Esos malvados empresarios... sindicales Por: juanjo92 | 20-02-12 22:33 cazabrujas | 8 |
![]() | ![]() | ![]() |