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Los países del norte de África gastaron 10 billones de dólares en armas en 2009

Marruecos y Argelia son los países africanos que más han aumentado su gasto en armamento durante la última década. La carrera armamentista hace a muchos temer un nuevo conflicto sobre Sáhara Occidental. Según los nuevos datos facilitados a 'Afrol News' por el Stockholm International Peace Research Institute (SIPRI), un 'think tank' que reúne datos sobre transferencias internacionales de armas, el gasto militar total en África en 2009 fue de 27.400 millones de dólares. Tan sólo el norte de África gastó 10 billones de dólares en armas el año pasado.

El gasto militar ha ido en aumento en toda África durante la última década. De hecho, en 2009, el gasto había aumentado en un 62 por ciento respecto al año 2000, a escala continental. Sin embargo, este incremento es relativamente bajo, en comparación con todas las demás regiones de Europa.

En el contexto africano, el Norte de África se encuentra a la cabeza, junto a otras naciones productoras de petróleo. En la última década, el gasto militar aumentó en un 107 por ciento en el Norte de África, en comparación con un 42 por ciento en el África Subsahariana, según revelan las cifras de SIPRI.

Los productores africanos de petróleo representan la mayor parte en el aumento del gasto militar en el continente durante la última década. Además, Chad, nuevo productor de petróleo, ha aumentado su gasto en armamento en un increíble 663 por ciento. En el África Subsahariana, los productores de petróleo como Nigeria (101 por ciento de aumento) y Angola (40 por ciento) siguen siendo los mayores consumidores de armas, junto a Sudáfrica.

En el Norte, dos países destacan como los más gastadores en armamento, con unos presupuestos de defensa en rápido crecimiento. Marruecos incrementó su gasto militar un 127 por ciento entre 2000 y 2009, según el SIPRI. Su vecina y rival Argelia, al mismo tiempo, registraba un aumento de gasto de un 105 por ciento.

Argelia y Marruecos, incluso antes de que el gasto se incrementase durante la última década, ya se encontraban entre los tres países de África que más gastaban en equipamiento militar. El consiguiente incremento, de este modo, sólo refuerza la carrera armamentística entre los dos países vecinos.

Este aceleramiento en la carrera armamentística se produjo durante una década, cuando el conflicto de Marruecos y el Sáhara Occidental ocupado se estaba profundizando. Mientras las ofertas anteriores de paz se derrumbaban y las nuevas negociaciones llegaban a un punto muerto, el gobierno exiliado saharaui - con sede en Argelia - amenazaba cada vez más con suspender el alto el fuego y el retorno a la guerra.

Mientras que los saharauis, ya desde el alto el fuego de 1991, se están quedando muy atrás en la carrera armamentística en comparación con los marroquíes, Argelia ha logrado renovar sus ya de por sí bien equipado ejército. La carrera armamentística entre Marruecos y Argelia indica que tanto los gobiernos de Rabat como Argel no excluyen un futuro conflicto armado entre los dos países sobre la cuestión del Sáhara Occidental.

Tal y como ya informó anteriormente afrol News, Marruecos duplicó en 2009 su presupuesto de defensa en términos reales, alcanzando el 16 por ciento del gasto total del Estado. La prensa marroquí había calculado el presupuesto de defensa de Marruecos para el año 2009 llegaría a 34.000 millones de dirham (unos 3.500 millones de dólares), o lo que es lo mismo, tres veces el presupuesto de 2005.

Este incremento en el gasto en armamento, principalmente en Marruecos es una reacción a los elevados gastos de Argelia en defensa en las últimas décadas. Argelia cuenta con el 89 por ciento de las importaciones totales de armas en la región del Norte de África (excepto Egipto) en el período 2005-2009 y, por lo tanto, un fuerte incremento de su ventaja militar frente a Marruecos, según el SIPRI.

El informe de SIPRI, que hace referencia al artículo de afrol News, habla de una "carrera armamentista" argelina-marroquí, y mientras el análisis del SIPRI expresa su preocupación por la creciente escalada militar en el Magreb, se concluye que "la probabilidad de un conflicto interestatal entre Argelia y Marruecos es baja". No obstante, SIPRI sostiene que "estas adquisiciones no contribuyen a una mejora de las relaciones entre Argelia y Marruecos".

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