A Villaescusa de Haro.
Hay un lugar de La Mancha
que merece ser citado.
Es Villaescusa de Haro
Cuna de obispos de raza.
Fue don Fadrique, el infante,
quien de Haro la separó
y en consecuencia le dio
su terreno circundante.
Villa de obispos la llaman.
En la calle de San Pedro,
siete de ellos nacieron.
Sus gentes así lo claman.
El monumento importante
es su iglesia parroquial.
Y el consejero real,
de ella quiso formar parte:
construyendo una capilla
llamada de La Asunción
joya de veneración
y espléndida maravilla.
Su palacio, sus conventos,
sus lavaderos y fuente...
la calidez de su gente,
intensa en sus sentimientos...
Llegando a este punto paro,
pues podría decir tanto
de la belleza y encanto
de Villaescusa de Haro...
Autora: Carmen Martínez Falla
(Amiga de Angelines Rabadán y Fátima Díaz)
Enviado por: Ancarfama | Ultima modificacion:03-05-2007 20:53