Pedroche - Cordoba

El mensaje más inquietante para la cúpula popular –teniendo en cuenta el pacto conseguido por el Gobierno con los sindicatos y la CEOE- fue el que transmitió ayer a la opinión pública Francisco González, presidente del BBVA. González llegó a la presidencia del BBVA, la segunda potencia bancaria española, tras el Banco de Santander, gracias en buena parte al impulso de José María Aznar, siendo éste presidente del Ejecutivo.

“Se ve, por primera vez en tres años, luz al final del túnel”, sentenció González. Y agregó que el actual Gobierno, presidido por José Luis Rodríguez Zapatero, “va en la buena dirección” y que lo peor ya había pasado. Ello no impidió, sin embargo, que el presidente del BBVA introdujera entre sus reflexiones alguna que otra advertencia al Gobierno, mezclada con ciertas críticas puntuales.

Los que niegan la evidencia
Zapatero circula, pues, según este banquero –tan cercano al PP-, en la “buena dirección.” No es, por consiguiente, Zapatero ni un fulero o un charlatán de feria ni un “tonto solemne”, conforme dijera hace algún tiempo Mariano Rajoy. Y es que las cosas –por mucho que los voceros de la derecha se empeñen en negar la evidencia- han empezado a cambiar de forma paulatina.

La luz y el túnel
Si se confirma que ya se otea, como ha señalado González, la luz al final del túnel de la crisis, una buena parte de la estrategia genovesa desaparecerá y con estruendo. Aunque el incremento del paro continúa desarrollándose sin frenos suficientes para desgracia de millones de personas, y esto favorece obviamente a los conservadores, no conviene en absoluto silenciar que también en este aspecto decisivo pueden generarse alternativas en positivo. No será fácil. Pero no será imposible, siempre que las coordenadas expuestas por el presidente del BBVA no se difuminen o se trastoquen negativamente.

Les salió rana
Rajoy y su hasta ahora feliz muchachada puede ser que estén a punto de tocar techo. Creyeron que no iba a producirse en modo alguno un acuerdo como el sellado ayer en la Moncloa con una merecida foto de familia. Pero a los agoreros populares les ha salido rana su vaticinio. Zapatero no está en términos políticos ni moribundo ni menos aún muerto. Tal vez acabará –a finales de 2011, según él mismo ha reiterado- no presentándose a las elecciones generales de marzo de 2012. Pero intentará salir –si es que sale- por la puerta grande y no por la trasera como le ocurrió a Aznar. ¿Logrará Zapatero el objetivo? De momento, ha logrado un pacto que nadie o apenas nadie pensaba que iba a conseguirse.

Otro error de bulto
Ayer el PP de Rajoy cometió otro error de bulto esquivando la foto moncloita. Esteban González Pons se desgañitó toda la mañana procurando justificar lo injustificable. Sus esfuerzos fueron en vano. Los integrantes de la CEOE –mayoritariamente- no son por cierto simpatizantes del socialismo y tampoco lo son de Zapatero. Y, no obstante, su pragmatismo les ha conducido a un pacto que consideran adecuado en las presentes circunstancias.

Los dioses de la antigua Grecia
¿Por qué se evaporó Rajoy –después de su patinazo en la televisión de El Mundo- y no fue capaz de presentarse en la Moncloa? Perdió una vez más la oportunidad de proyectar una imagen de estadista. Y es que los dioses -como en la antigua Grecia- ciegan a quienes quieren perder. Lo sentimos, don Mariano. Es usted incorregible y puede todavía ser derrotado en las urnas. Tiempo al tiempo.

elplural.com 03/02/2011