Leccion de sabiduria..... Un hombre estaba harto de tener que ir a trabajar todos los días y que su >esposa se pudiera quedar en casa. Quería que ella viera por lo que >él pasaba todos los días, así que rezó: > "Señor: Yo voy a trabajar cada día, durante 8 horas mientras mi esposa >se queda en la casa tranquilamente. Quiero que ella sepa por lo que >tengo que pasar todos los días, entonces permíteme cambiar de cuerpo con >ella por un día. Amén". > > Dios, en su infinita sabiduría le concedió el deseo al hombre. > A la mañana siguiente, se despertó como mujer. > Se levantó, hizo el desayuno para su cónyuge, despertó a los niños, >sacó su ropa para ir al colegio, les dió desayuno, empacó los almuerzos, >los llevó al colegio, volvió a casa, recogió >la ropa para la lavandería y la llevó. En el camino paró en el banco a >hacer un retiro y fue al supermercado a comprar víveres. > Entonces regresó a casa, guardó los víveres, hizo los cheques para >pagar las cuentas y cuadró la cuenta del banco. > Limpió la caja del gato y bañó al perro. > Para entonces ya era la 1 P.M. y corrió a hacer las camas >, puso la ropa sucia en la lavadora, sacudió, aspiró, lavó el >baño, barrió y trapeó el piso de la cocina. . > Salió coriendo a recoger a sus hijos en el colegio, y tuvo una discusión >con ellos de vuelta a casa. > Sacó leche y galletas para los niños y los organizó para que hicieran >las tareas. > Puso la tabla de planchar y se puso a >planchar mientras veía televisión. > A las 4:30 empezó a pelar papas, lavar las verduras para la >ensalada, adobó la carne, y puso el arroz a cocinar. Cuando su >cónyuge llegó preguntando por la comida, ésta ya estaba lista y servida. >Después de comida, limpió la cocina, lavó los platos sucios, sacó la >ropa de la lavadora y la puso a secar. Bañó a los niños y los acostó. > A las 9 P.M. estaba exhausto aunque no había terminado >todavía sus quehaceres, se fue a la cama donde estaban esperándolo >para hacer el amor, lo cual logró hacer sin quejarse. > > A la mañana siguiente se despertó e inmediatamente se arrodilló al lado >de la cama y dijo, "Señor, yo no sé yo qué estaba pensando. Estaba >equivocado al envidiar a mi esposa por poder quedarse en casa todo el día. >Por favor Señor, por favor, vuélvenos a cambiar". > > El Señor, en su infinita sabiduría, contestó, "Hijo mío, creo que >has aprendido la lección y será un placer para mí volver las cosas a >como estaban antes. Sin embargo, vas a tener que esperar nueve meses. >Anoche quedaste embarazado". |