los partidos politicos no son morosos Claman contra los desahucios, pero nunca se enfrentarán a ellos. Vocean por todas partes que el demonizado sector financiero es el máximo culpable de la crisis que atraviesa este país, pero han sido los más claros beneficiarios, por encima del resto de los mortales, de las benevolencia con que les han tratado las cajas de ahorros. Cualquier ciudadano o empresario con un nivel de morosidad similar al que ha tenido Izquierda Unida en los últimos años las pasaría canutas. Pero un partido político puede tener la llave de una votación. Y no es lo mismo reclamar un impago a un desempleado que a quien, como ahora le ocurre a la coalición de izquierdas, maneja una buena parte del BOJA. Eso explica que Unicaja y Cajasol hayan estado «perdonando» durante años a la coalición de izquierdas una deuda imponente. Según los últimos informes de gobierno corporativo de las dos entidades, correspondientes a diciembre del año pasado, IU de Andalucía tenía vencidos nada menos que 2,5 millones de euros de los 5,9 millones suscritos en créditos con estas dos entidades andaluzas. Unos impagos que en el caso de la deuda con la caja malagueña vienen sucediéndose y ampliándose desde el año 2005 y que, según reconoce la propia dirección de la formación no han conseguido regularizarse hasta este mismo año, en el que se ha producido su entrada en el Gobierno andaluz de coalición formado por el socialista José Antonio Griñán. |