Fernán-Núñez - Cordoba

¡Otro nuevo espectáculo! Esta vez ha ocurrido este fin de semana en Montalbán. Y cómo no, otra vez los mismos implicados. El entrenador del equipo prebenjamín. Yo no es que quiera echar tierra encima de nadie, pero da la casualidad que no es la primera vez que la lia éste señor en ésta temporada. Lo que va sembrando luego va recogiendo. Claro si aquí en el pueblo tratas mal al personal, luego cuando vas a su campo pasa lo que pasa: insultos, peleas entre entrenadores y aficiones. Y todo eso ante la mirada atónita de los niños que ven cómo los mayores se dicen de todo menos bonito y llegan casi a las manos. ¡Bonito ejemplo!
Ante ésto veo una ABSOLUTA PASIVIDAD de los directivos que no ponen coto a éstas situaciones y quién sale mal parado es el pueblo de Fernan Nuñez, pues lo que queda es que el equipo de Fernán Núñez por donde va forma el espectáculo, y no deportivo precisamente.LAMENTABLE que éste tipo de señores estén al cargo de nuestros menores.Y luego queremos que sean buenos deportistas y respeten al arbitro y los contrarios.O ponemos coto al tema o nadie va a querer llevar a sus hijos a que jueguen al fútbol. Tiempo al tiempo.

Lo que pasa es que, los padres y madres quieren que sus hijos sean como Cristiano Ronaldo, a toda costa, valga el niño o no valgo... cuando la realidad se impone, demostrando que el deporte es sólo una afición que, el que la lleva dentro la disfruta sin esperar nada a cambio... pues mucho y muchas se frustran y lo pagan con el árbitro, el entrenador contrario o con los mismos jugadores, que en definitiva, son niños que se deben estar formando en Valores y Deportividad, cuando lo que sacan es un complejo de agresíones y mala educación, que sirve a muchos "frustrados" que van al fútbol a descargar sus coplejos y "frustraciones personales" por no haber llegado a nada en la vida deportiva... y muy posiblemente en la social.

Perdón, quiero decir algunos padres y madres, no generalizo, porque hay muchos otros a los que les gusta el deporte como AFICIÓN no como PROFESIÓN, que si se tienen aptitudes se llega y si no.. pues como la mayoría.... a disfrutar... con eso estamos pagados.

Perdona, pero no comparto tu opinión, no se si estabas presente el pasado domingo en el encuentro que citas, disputado entre Montalbán y Stadium, pero te puedo asegurar, yo que si estaba presente, que lo único que protesto el entrenador, y a mi parecer con toda la razón, es que nuestros niños estaban recibiendo todo tipo de faltas, entradas fuertes, patadas, empujones, ...., y creo que es justo que reclamara al arbitro que no permitiera ese tipo de cosas.

Tienes derecho a no compartir las opiniones de los demás, pero la realidad es ésta:

HA MUERTO UN AFICIONADO FRANCES, CREO QUE DEL OLYMPIQUE DE MARSELLA, A PATADAS POR UN GRUPO DE SALVAJES AFICIONADOS, CABREADOS CON EL ÁRBITRO O PORQUE HABÍAN PERDIDO. ¿ESTO VALE LA PENA DE PERDER VIDAS HUMANAS? VAMOS... hay deportes menos agresivos que el fútbol: Tenis, Baloncesto, Atletismo, Voley-Bol,.... lo que pasa es que la gente va al fútbol a DESCARGAR SUS FRUSTRACIONES PERSONALES, CONTRA LOS JUGADORES, ARBITROS, ESPECTADORESO... O CUALQUIER BICHO VIVIENTE QUE SE PONGA DELANTE...Y la culpa la tienen los medios de comunicación que fomentan estas actitudes agresivas con los piques entre aficiones..... El fútbol es un gran deporte, de estrategia, pero el "baboseo" a que está sometido el ser humano actual lo convierte en "descafeinado"... Ah! y cuando nosstros entrenábamos de pequeños o adolescentes y jugábamos partidos, nuestros padres, normalmente no iban a vernos, a no ser alguna vez que otra, no nos sometían a un CONTROL Y SEGUIMIENTO OBSESIONADO COMO LOS DE AHORA, a mi nunca fue mi padre ni mi madre a recogerme de la escuela, desde que tenía 5 años... aprendiamos sólos nuestras habilidades... lo que hacen muchos padres con sus hijos hoy en día es convertirlos en MONOS AMAESTRADOS... incapaces de dar un paso sin la supervisión del adulto.... esto me parece perjudicial para el desarrollo de los chavales, a los que... muchas veces, son los propios padres los que les obligan a apuntarse a 40 actividades que sólo consiguen agotar el físico y las mentes de nuestro pequeños infantes.