Puebla del Príncipe - Ciudad Real

Lababadero mentecato:
Tu modus operandi me ha decepcionado.

-Apareces: remueves la mierda.
-Sigues apareciendo: como nadie te contesta te creces y sigues removiendo la mierda.
-Continúas apareciendo: te sigues viniendo arriba y con una ambigüedad mal llevada (si yo hablase, pero no quiero, ya veríais, madre mía si yo hablase…) haces el ridículo.
-Sigues extendiéndote: ahora viene el cinismo, “dar la cara si sois valientes”(mil veces repetido) con el descaro y la desfachatez, de no hacerlo tú.
-Tú a tu rollo: pero ahora la culpa de la muerte de Kennedy la tiene ISR, “nadie te quiere desaparece del foro” pero ¿Quién eres tú para opinar por los demás? Yo sí que quiero a ISR, a su hermana Juana.a, a la madre que los pario, al padre que les hizo las orejas y a su abuelo ese luchador indestructible.
- Prolongas el absurdo: dices ser socialista, pero no pasas la prueba del algodón, al pasarlo por tu conciencia sale sucio, deshonesto, indecente, lo cual no cuadra con nuestra honestidad y decencia.

Y por último me citas, me reclamas, me requieres: tienes la mala suerte de que acudo y te cagas. Te vuelvo a desafiar y te sigues cagando, cuando entro en disputa más caquita. Esto me lleva a una conclusión, te llamas lababadero de tantas veces que debes utilizarlo lavando calzoncillos cagaditos.
Un poquito escatológico, lo sé. Pero cierta gente es lo que se merece.

¿He utilizado muchas palabras malsonantes? ¿Me aconsejas como cuando hablo de sexo, que me vaya a uno de esos modernos confesionarios que utilizan tus amigos de la Conferencia Episcopal? O ¿tú mismo me absuelves?