Otra anecdota.
Cuando éramos unos crios los chicos de mi generación y generaciones anteriores y algunas después, fuimos bastante salvajes y no le teníamos miedo a ningún bicho, lo mismo cazábamos lagartos, que culebras o pajarillos, recuerdo que íbamos al calar a cazar “Alcuceros” (arañas gordas que viven en agujeros que construyen en el suelo) nos meabamos en el agujero y metíamos una paja lo suficiente de larga y cantábamos.-Alcucero, Alcucero agárrate a los güevos de mi agüelo, y le veíamos salir con sus ocho patas y brillándole los ojos, y cuando estaba fuera le echábamos un canuto encima y ya lo teníamos.
Pues bien, yo a mis hijos, y aun mas a mi hija, desde pequeñitos les he enseñado a coger toda clase de insectos y otros animales (saltamontes, escarabajos, lagartijas, salamanquesas..etc.) y a no tenerles miedo, y recuerdo que un día siendo mi hija muy pequeña (2 ó 3 años) cogí una langosta de estas grandotas y agarrándola por las patas traseras se la di y le dije ve y dásela a mamá, ella fue con su langosta a dársela a mi mujer y cuando la vio empezó a gritar, y como veía que se asustaba, ella mas aposta iba a darle la langota y no os podéis imaginar la escena, la niña con la langosta en la mano, y la madre dando gritos y subiéndose en las sillas y en la mesa, y yo meándome de risa.
Saludos JOSA.