Puebla del Príncipe - Ciudad Real

Pa mear y no echar gota, ahora la derechita se hace la asombrada porque un independentista proponga la independencia. Teniendo en cuenta el escaso apoyo popular que tiene el independentismo en Euskadi , la propuesta de Otegui es bastante razonable. En lugar de una independencia por la via militar que la gente no quiere y que nunca llegará, parece que se conformaría con que quedara una puerta política abierta para intentar convencer de sus ideas a los vascos, como todo movimiento político democrático. Este tipo de declaraciones me convencen cada vez más de que el gobierno no se equivocó cuando decidió negociar con ETA, porque no faltaba gente en los dos bandos dispuesta a acabar con todo esto de una vez.
Hoy, la derechita, tiene uno de esos días frenéticos hablando de Otegui, ante la decisión de la justicia ( ¿HE DICHO DECISIÓN DE LA JUSTICIA?) de permitirle seguir en libertad. Hoy, la derechita sigue con sus comentarios habituales y han procedido a proclamar la victoria total y absoluta del terrorismo y el fin del mundo tal como lo conocemos.
Entre el nutrido número de estupideces, la más grave es decir que a Otegui se le deja en libertad en contra de la ley y que el gobierno tiene absolutamente la culpa de la decisión de los jueces.

Si se cree realmente en el estado de derecho, las leyes están para ser cumplidas sin excepciones, siendo el nombre, afiliación o crimen del preso algo irrelevante. Si se quiere actuar siguiendo una aplicación creativa y arbitraria de la ley para atacar a quien se ve como enemigo de España, ya no hablamos de estado de derecho, hablamos de tribunales de excepción.
Esta obsesiva exigencia de retorcer la justicia para el preso malvado representa negar a Otegui lo que presúntamente estamos defendiendo como un absoluto, básicamente dándole la razón.

El estado de derecho es para todos, no sólo para quienes nos caen bien. Si a alguno no le gusta la idea, lo siento, pero es hora que deje de proclamar su liberalismo.

Increíble la hipocresía.

Salud para todos.

T´estimo.