Nazis https://ww.elperiodico.com/es/noticias/opinion/nazis-por-marc-vidal-2367882 El 5 de agosto de 1940 Janusz Korczak se levantó de la litera que presidía la sala principal del Orfanato de la calle Krochmalba de Varsovia. Sembró su cara de proyectos con el agua de seda que tapizaba el suelo de verde viejo. Poco después fue arrestado. Aquel médico polaco, conocido por sus cuentos infantiles, y director del centro para huérfanos, fue deportado junto a 196 niños a Treblinka. Cuentan que ningún niño lloró. Ninguno trató de huir. Tragando su dolor se aferraron a su maestro y un testigo describió el paso. Desfilaron despacio como en procesión, tan lenta y silenciosamente que fracturaba el alma. Korczak marchó al frente de todos ellos. Los nazis no eran afectados por la hipoteca, ni directivos de alguna compañía aérea, ni periodistas críticos con un gobierno, ni tan siquiera eran demócratas venidos a menos. Nunca hablaban de manifestantes contrarios ejerciendo sus derechos, ni de rodear congresos fura más o menos razonable, ni de manifestarse frente a la vivienda de alguien aunque pueda parecer incómodo. No obligaban a saber catalán, ni castellano, ni les iba o venía ninguna de las cosas que ahora se dicen. Hoy no puedo hablar de empresa, ni de sueños, ni de nada. Empieza a ser ridículo por no decir cosas peores que cada matinal, al mirar la prensa española (y otras) desde la lejanía anglosajona como la clase política ibérica se ha vuelto esquizofrénica. Lo peor es que parece que actuar en esa constancia dialéctica de bar tiene seguidores. ¿Cómo puede una dirigente política decir que en España hay actitudes “nazis” y que no se levante el auditorio de inmediato y la dejen con esas cinco letras tatuadas en su boca? Será porque lo ven crudo y la mayoría de esos aplausos son bonos en la cola del paro inmediato. Los nazis no eran nadie de los que ahora son tachados de serlo. Lo que la historia nos recuerda es que los nazis enviaban, a diario, centenares de seres humanos a las cámaras de gas. Diseñaron métodos para matar personas en serie del modo más productivo posible. Con el gas Zyklon-B perfeccionaron el sistema de eliminar razas, pensamientos y opciones sexuales. Con el fin de fundamentar terroríficas teorías raciales, científicos psicópatas en nombre del nacionalsocialismo, inyectaban cloroformo en el corazón de personas de diferentes razas para comprobar los efectos en los órganos una vez muertos. |