Se desarmó el Belem. Después del evangelio de San Judas, el resto de evangelios apócrifos, y otras cuantas referencias de tradición oral, ahora viene el papa y nos desmonta el Belem. Ahora resulta que posiblemente no era nazareno, ni nació en Belem, ni en el año que se referencia, ni en la fecha que se celebra (cosa que ya se sabía), ni había establo, ni pesebre, mucho menos una vaca y por supuesto ninguna mula. Y ¿qué hacemos con la “estrella de oriente”?. Es difícil sustituir la imagen de un cometa por la de una supernova, ¿cómo la representaremos?. Los Reyes Magos se han quedado sin guía, no tendrán nada de magos y resultarán tres chamanes. Y ante tantas variaciones alguno habrá que mande todas las figuritas a la basura y se enganche a Papa Noel o Santa Claus. Cualquier día nos aclararán que San José era viudo, de color oscuro tostado y vaya Vd. a saber si además era fontanero en vez de carpintero. Algo se veía venir, en todos los “chinos” y tiendas de ¿0.60? las imágenes ya estaban cambiando. Sres. Dejémonos de mitos y vayamos a la filosofía del mensaje. |