TESTIMONIO MI FAMILIA NO ME ACEPTA. Una de las primeras consecuencias que sufre un ludópata son los problemas familiares. Si es varón, su mujer piensa inicialmente que la engaña con otra. Como ella sabe lo que gana, no se explica, ni recibe una explicación satisfactoria de donde mete el dinero, y cuando descubre el problema, suele negarlo por lo grave que lo considera. A partir de ahí, cuando lo reconoce se siente deprimida y no comprende lo que ocurre. El jugador en esta fase ya esta en una situación critica y precisa mas ayuda que nunca para remontar su hundimiento progresivo. En poco tiempo, las conductas de juego destruyen la familia, que debe conocer este hecho para hacerle frente al problema, ayudarse a si mismo e intentar ayudar al ludópata. LOS HIJOS. Los hijos de los ludópata sufren los excesos de sus padres. Pronto se dan cuenta de que viven en un ambiente extraño. A veces, cuando el jugador gana, reciben regalos exagerados y otras pasan privaciones e incluso hambre cuando no hay dinero. Esta inconsistencia se ve reflejada en un descanso en su rendimiento escolar. Igualmente, cara al futuro, su proceso de socialización es inadecuado, sobre todo al no adquirir las habilidades de manejo de dinero y de organización de presupuestos. En la vida adulta muchos de los hijos de ludópata van a sufrir distintos problemas psicopatológicos cuyos antecedentes están en esa vida desordenada de cuando eran niños. |