26-06-10 18:27 | #5627491 -> 5626756 |
Por:el_tio_del_pifani ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Luis Alfredo no estaba loco, pero lo encerraron en un psiquiátrico por un complot que tejieron sus familiares, pues el tío Genaro, que se fue a América del Sur en los años '50, lo hizo heredero universal de la fortuna que hizo en el nuevo continente. El dinero era lo de menos, lo más preciado de la herencia era un tesoro de la alta edad media que el tío compró a un anticuario de Toledo. Entre otras joyas y alhajas destacaban unas trébedes de oro macizo con incrustaciones de rubíes y un botijo que se cree que era propiedad del rey Alarico, una pieza inimitable, de arcilla roja y con dos pitorros. | |
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27-06-10 01:01 | #5629172 -> 5627491 |
Por:velacoracho ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Lo habia conseguido, evidentemente no estaba loco, pero gracias a sus extravagancias y sus fingidas visiones consiguió alojamiento y manutención gratuita cerca del lugar que llevaba buscando hace años. Ese lugar, en otros tiempos fue la capital del pueblo visigodo, y actualmete se ha convertido en un paraje inhospito y maloliente conocido como La Serna. Al descifrar el antiguo pergamino que encontró en un huevo Kinder, cometió un error, confundió La Serna con el Pozo de La Serna ese desliz en la interpretación hizo que fingiera estar loco para ser huesped provisional del unico hotel o residencia que existía en El Pozo(así llamaremos desde ahora al Pozo de La Serna) y que no era otro que una clinica para megalómanos. Desde pequeño Luis Alfredo demostró tener unas dotes innatas para la musica de viento, hizo sus primeros pinitos con un sorbito fabricado con el hueso de un albaricoque, posteriormente compuso una sinfonia incompleta haciendo musica con una trompetilla hecha con un canutillo y un papel de fumar, luego tocó la flauta, luego soplaba vasijas como cantaros, vasos y botellas. De estos recipientes consiguió extraer notas musicales tan perfectas que amansaba a las fieras, amaestraba cucarachas, enamoraba a hombres y mujeres y convertía en democratas a los obispos, dictadores y tiranos. Cansado de vasos y cantaros un dia caluroso de verano conoció el botijo, despues de beberse dos litros y medio de agua, soplo por el culo del botijo y el aire de sus pulmones se transformó en el mas bello sonido que jamas escuchó el oido humano. | |
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27-06-10 11:58 | #5630045 -> 5629172 |
Por:el_tio_del_pifani ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Tras conseguir recuperar las trébedes de oro repujado con incrustaciones de diamante y el botijo visigodo (Velacoracho os explicará como lo hizo) decidió que el mejor sitio para ponerlos a buen recaudo era la casa del tío Acisclo, nadie sospecharía que estaban allí. El tío Acisclo se conservaba bien a pesar de sus 101 años, vivía solo y decía que su buena salud se debía a que se comía cada día unas gachas, algunos días dos, que se bebía litro y medio de vino y que nunca había conocido mujer. Su casa era antigua y tenía más de 1000m cuadrados, toda la parte de arriba eran cámaras donde guardaba los viejos trastos de labranza, capachos y demás. Accedió de buena gana a guardar el pequeño tesoro de Luis Alfredo, pero le dijo en tono enigmático: -Hace unos noches se sienten unos ruidos raros ahí arriba...y no son morcégalos... -Eso es que ya estás viejo y te imaginas cosas... -Na siquiera...sé que es algo raro...hace unos días que no baja por aquí el gato...y le tengo por ahí una cabeza de pescadilla, que es lo que más le gusta. Estaban en la cocina donde el tío echaba las lumbres, a los lados había dos poyos y en uno de ellos es donde dormía el viejo. Señaló una viédega y dijo: -Tengo eso pa defenderme por si los "vecinos de arriba" vien a molestame. -¿Me puedo quedar esta noche a dormir aquí para investigar los ruidos? -Sí, pero si subes vas a ir tú solo, no vayan a ser los defuntos con los que estoy en deuda y me reclamen cosas que no pueda darles, que la vida está mu mala. Anda, vamos a salir un rato al patio a echar un pito. El patio empedrado era muy grande y se veía la sierra del Cristo. El cielo estaba despejado y solo se veía una minúscula nube. -Es la nube del alcalde-dijo el viejo-. Hace unas semanas que tie una nube encima y no se la pué quitar ni a ostias, le pidió un cobete de esos que deshacen las nubes a uno que tié un majuelo en el reguerío pa tirásela, pero como la nube la tiene el alcalde verticalmente encima, tié que ser él el que lo tire, y como se enteren los del SEPRONA que un alcalde anda por ahí tirando cobetes... | |
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27-06-10 12:54 | #5630308 -> 5630045 |
Por:velacoracho ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Lo siento, no puedo continuar con la historia de Luis Alfredo,me han ofrecido un trabajo fijo a doble jornada en la clinica psiquitrica del Pozo La Serna y en base al secreto profesional no puedo hablar ni de los actuales internos ni de los turbios asuntos que se esconden detrás de la fuga del megalomano. | |
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27-06-10 23:04 | #5632795 -> 5630308 |
Por:el_tio_del_pifani ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Con lo complicado que está encontrar trabajo y a ti te dan jornada doble. No me extraña, con la crisis cada vez somos más los majaretos, puede que a mí me ingresen una temporada allí, que no hago más que ver brujas y hadas por todos los rincones. El libro lo retomamos más adelante, que tengo pensados unos asesinatos e intrigas muy chachi-pirulis. | |
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28-06-10 16:09 | #5635679 -> 5632795 |
Por:Al-Hakam ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo El botijo había llegado a las manos de nuestro paisano como diría don Quijote por arte de nigromantes. Él sacaba sones y hasta asomos de cantares de su pitorro. Los sonidos, al principio los hacía el paisano. Pero una noche, mientras él y el tio Acisclo dormían, empezaron a sonar una especie de murgas cansinas que provenían de la cámara donde guardaban el botijo. Nuestro compadre se había escapado de manicomios insondables, pero ahora no de darían el alta como explicara lo que veía. ¡El botijo tenía vida propia! Bajaba levitando y buscando agua fresquita de la madrugá, que ya apuntaba por el Herondo. No, no puede ser, este botijo es mágico. Y sin pérdida de tiempo fue a pedirle tres deseos. El botijo le contestó. ¡Pero tu que te has creído! Yo soy un botijo y no un genio. Trabajo a media jornada y el turno de noche se ha acabado. Y tengo una raja a medio hacer que lo mismo me doy de baja pa los restos. Hago música, no te creas que la hacías tu. Pero eso es parte de mi tiempo de Ocio. Lo que más me gustaba era cantar mayos a la mujer de Ataulfo(que en gloria esté)Hace unos años me saco el tío Acisclo al Balcón una Semana Santa, tarareé una saeta y casi me pega una pedrá un jarete que no hacía na más que darle la vara a sus padres en la procesión. El paisano no salía de su asombro, estaba hablando con un botijo. Pero lo más extraño es que éste le contestaba. No sabía que un botijo no puede tener alma, a lo mejor un cántaro, sí, pero un botijo como va a tener espíritu. Tras arduas investigaciones se dio cuenta que era el espíritu de un mayordomo godo que le hacía luz de gas al egregio Ataulfo con su mujer (de ahí los mayos) el que vivía en el botijo. Hasta aquí la historia que se conoce del botijo y sus avatares. Si tengo tiempo y ganas seguiremos informando. | |
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28-06-10 16:48 | #5635900 -> 5635679 |
Por:consenso ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Animo Al-Hakam que con el trabajo- explotación de velacoracho estaba el pobre tio_del_pifani entre las historia ficción y el botijo visigodo con las neuronas echando ascuas. | |
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28-06-10 19:45 | #5636987 -> 5635679 |
Por:Al-Hakam ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Las andanzas de Luis Alfredo, el tío Acisclo y el botijo estuvieron en lenguas durante unos días. Al final, el médico de urgencias, avisado por la policía fue a recoger a Luis Alfredo para internarlo de nuevo en un frenopático. Al tío Acisclo lo llevaron al Geriátrico, con lo que se despidió de la pensión y sus ahorros, que servirían para cuidarlo de por vida. El botijo quedó huérfano, no solo de sus dueños humanos, las trébedes fueron sustraídas por algún listo que se aprovechó de que el Azuer fluía por el Paso y se las llevó sin contemplaciones. Pero pronto del botijo se hizo una cuestión pública, cual si de la Piedra del Cuquillo se tratara. El Alcalde convocó un pleno extraordinario, con la asistencia de todos los concejales y de sus asesores. Era algo digno de ver, los ediles rodeando la vasija de torno como si fuera una aparición. ¡Orden, Orden! dijo el Alcalde tomando la palabra, pues todo el mundo susurraba como si se estuviera cotilleando en la puerta de su casa. -Vamos a ver, dijo el Alcalde, Orden del día, el botijo, a saber, sin sombrerete de punto y, al parecer visigodo, para más señas. -¡Visigodo! dijeron todos a una, sin saber muy bien que era eso, aunque sonaba a antiguo. -Bien dijo el alcalde, algo hay que hacer con el botijo y espero que sea en provecho nuestro, digo, del pueblo en general. Entonces el concejal de cultura aseveró: -Ya que estamos haciendo un museo en la Iglesia, porque no le pegamos un almadenazo, lo hacemos cisco y decimos que se ha hallado entre los demás restos de la excavación. -Eso, Eso, dijo la concejala de festejos, y decimos que es romano y así lo visita más gente. Un asesor algo avisado, ya puestos, dijo, decimos que viene del espacio exterior y así salimos en "cuarto milenio". -Pero vamos a ver dijo el Alcalde, donde has visto tú a un OVNI con agüerillas, además no nos conviene mucha publicidad que luego vienen los de la Junta y se lo llevan a un museo arqueológico y solo nos dejan una foto del botijo. Entonces entró el cura párroco, que, debido a que entraba en parte en lo del botijo lo llamaron. El espíritu del botijo los entreveía a ambos lados del pitorro y temía ser una víctima de la arqueología en su estado más surrealista. El sacerdote dijo que como iba a entrar en su museo un botijo visigodo, que prefería dar entrada a un sarcófago egipcio que tendría más éxito. Se enzarzaron en una discusión que rayaba lo abstracto, pero no en inteligencia precisamente. Que si los egipcios no eran del pueblo, que si los visigodos no sabían muy bien de donde eran pero que seguro que no habían nacido cerca. Que si la entrada para ver el botijo era la mitad para la iglesia, la cuarta parte a cáritas y la otra cuarta parte para obras pías. Que no que una parte para el ayuntamiento, otra para el legado bustillo y la última para subsanar el déficit. Entonces el botijo estalló y dio su opinión. -¡Basta!Dijo el espíritu de Sisebuto, que era su nombre en vida. Entonces el Alcalde le cambio la color de la cara. Los concejales se metieron debajo de las butacas y los asesores escaparon por las ventanas. ¿Quien ha hablado? dijo el munícipe que solo veía frente a sí el pitorro centelleante del botijo. Yo, he hablado, me marcho, no consentiré que me exploten. Bastante abusaron de mí cuando vivía, que echaba unas peonás, que trabajaba hasta por las noches (que la consorte de Ataulfo no me dejaba descansar). Me voy buscaros cualquier cosa para exponer. Y de pronto desapareció. Las actas de la reunión se escondieron en el archivo municipal. Y nadie habló del tema con nadie. Excepto con las mujeres, maridos, madres, padres, novios, novias y alguna vecina. Con lo que salió hasta en la Gaceta con el siguiente Titular: "Querían poner en valor el botijo, y nadie ha tenido noticias hasta ahora". Ahora todos desempolvaron sus botijos y algunos le quitaron el barro del tractor y todos pretendían tener un botijo visigodo. Creo que nadie se sabía ni la lista de los reyes Godos, ni los azares de la vida de Recaredo.Pero querían algo visigodo. Así que terció la Junta de Comunidades y declaró la comarca limpia de botijos visigodos, bajo multa de 5000 €uros. El botijo continúo su viaje, pero estaba más cerca de lo que pensábamos... | |
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28-06-10 19:58 | #5637063 -> 5635679 |
Por:el_tio_del_pifani ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Al-Hakam, soberbio, me quito el sombrero. Si puedes dedicarnos más tiempo, te lo agradeceremos, creo que hablo en nombre de todos los foreros. Es verdad lo que dice consenso, entre las historias del hada y del botijo visigodo, creo que he perdido unos cuantos miles de neuronas, supongo que pronto las expulsaré en forma de hemorragia nasal, jeje. | |
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28-06-10 21:01 | #5637425 -> 5635679 |
Por:Al-Hakam ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo No las merece, como decía mi abuela. Tengo acabados dos libros y empezados cinco o seis que lo mismo no los termino nunca, pero este como me de el gusanillo lo termino, claro que tengo que repasarme el principio que habéis hecho, que por lo visto el botijo tiene dos pitorros y yo le he adjudicado solo uno. Y agradeceros la idea de un botijo visigodo, que el no tiene mucho mérito escribir sobre ideas ajenas. Leeré con detenimiento el incio por cuestión de una poca más coherencia. Si es interactivo y más gente se añade mucho mejor, de todos modos seguiré aportando lo que pueda y mi trabajo me deje. | |
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28-06-10 22:04 | #5637760 -> 5635679 |
Por:vakaloka37 ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo muy bien al-hakam un aplauso para ti ![]() ![]() | |
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29-06-10 17:17 | #5641657 -> 5635679 |
Por:Al-Hakam ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Amanecía entre Alhambra y La Sierra, un poco más allá de los Silos y un espíritu rebelde encerrado en un botijo se desperezaba. Había huído, sí, pero despistando a sus perseguidores. Estaba en la misma Choza de Pablo. Entonces Sisebuto notó que la metamorfosis que nunca deseó se produjera estaba haciendose patente. Pasaba de ser un espíritu humano a ser el alma de un botijo, cosa que nunca se ha datado, ni en los visigodos ni en cultura antigua análoga. Perdía así la capacidad de levitar, de producir música por sí solo. Ahora sus facultades se reducían a dar el agua fresquita y a ser antiguo. Eso eran dos malas cosas, primero porque ahora hay fresqueras más modernas que hacen el apaño y lo antiguo en La Solana se respeta poco. Todavía pensaba en el almadenazo con que quería regalarlo el concejal de cultura. En estas que entre luz y noche, se oyó un tractor llegar al abrigo de la choza. Era un agricultor que venía a estallicar. El botijo, ahora integro y rígido botijo, pero con alma, escuchaba los cánticos del labriego, Hasta que se oyó un trueno, seguido de un chisporroteo de agua. El labrador, que tenía el tractor descapotable, se había dejado la cubierta en casa, pensando, con lo raso que estaba el cielo anoche quien iba a pensar. Y se refugió en la choza. Cuando pasó no lo reconoció, pero al primer relámpago le vio la cara el botijo al gañan. Era el asesor que quería catalogarlo como del espacio exterior. Pero al parecer éste no reconoció la antigualla visigoda. Lo levantó para ver si tenía agua, aunque hubiera agradecido que si hubiera sido así tuviera una goteja de anís, que refrescaba más y quitaba el sabor de la arcilla. Pasó la nube, que esta no era la del alcalde, sino la del asesor. Que no tenía dedicación exclusiva. Entonces puso el botijo en el alerón del tractor en el hueco que había a la sazón antes, y que, los fabricantes, por mor de la costumbre no habían eliminado. Pero antes tuvo que secar un poco el asiento que se había remojado con la nube. Al arrancar se produjo la tragedia, el tractor estaba atascao y por mucho que le daba a la reductora, no salía del barrizal. Pasaron por allí unos guardas que venían con el toterrreno del Legado Bustillo y le echaron una mano para salir de allí. Entonces uno de los guardas, en un despiste le mangó el botijo al asesor. Este no lo echó en falta y se fue con su tractor y dos fanegas de barro en las ruedas y en toa la carrocería. El guarda, guardó, valga la redundancia, el botijo en una cuadra de su suegro, que cualquier día la hundían y hacían unos pisos, pero la construcción ahora no daba para tanto. Entonces el botijo se dio cuenta de que tenía compañía, un cesto rosero, una orza de aceite con contenía un queso rancio de la época del Rey Carolo. Y también un lebrillo que parecía congeniar con el botijo pues eran del mismo color y material. Ahora descubrió el botijo que no podía hablar, pero podía comunicarse telepáticamente con los otros cachivaches. El lebrillo conectó con el botijo y le dijo que era de la época de las guerras carlistas. Luego habló el cesto rosero que decía que el era de la posguerra y finalmente la orza dijo que era, sin duda la más antigua, pues procedía de la época de Carlos III (El susodicho rey Carolo) El botijo no quería enmendarle la plana, pero le dijo que, con todos los respetos la época visigótica era con mucho la más antigua de las conocidas. Se enredó una discusión telepática que hasta las gallinas que tenía el suegro del guarda terciaron en ella. El queso no podía hablar su estado de mohosidad le impedía comunicarse incluso telepáticamente. Les preguntó el botijo, si había posibilidad de moverse siendo objetos, pues, con todos los respetos el era de mucho viajar y ya empezaba a aburrirse. El cesto rosero le dijo que para eso había un gato, llamado Persiles, que era medio brujo y podía devolverle la movilidad. Pero que era muy peligroso ser inerte y móvil a la vez, pues con la gente de ahora, la gente nueva, lo mismo te desgraciaban de un golpe. No descansó hasta que vio a Persiles y lo llamó. El gato le dijo que que le daba a cambio, que el no se lamía los bigotes y que le diera algo tangible. Tuvo que negociar con la Orza de aceite y dejar caer un poco de queso para que vinieron unos ratoncillos y sobornar cual político corrupto al minino. El gato lo dotó de movilidad, pero a la una menos cuarto de la noche tendría que estar en casa decente e inmóvil, pues si no podía reventar en el momento. El botijo podía moverse pero no levitar como antes sino teletransportarse de un lugar a otro predeterminado. Y memorizó la casa de una soltera que no estaba mal a ver si se podía teletransportar mientras esta se duchaba. Que aunque botijo, las hormonas humanas le tiraban todavía. Llegó a la casa en cuestión y vio a la moza acompañada, no salió de su asombro cuando quien la acompañaba era Luis Alfredo con barba postiza, eso o que no se había afeitado desde que se separó de él. Pero lo peor es que la zagala tenía novio… | |
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29-06-10 19:26 | #5642565 -> 5635679 |
Por:el_tio_del_pifani ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Corriendo riesgo de parecer un cansao y adulador (que no lo soy) Al-Hakam, te pregunto si has publicado esos libros que tienes terminados, me encantaría leerlos. Creo que tenemos el mejor foro de España, y no exagero, y entre los foreros extraordinarios que tenemos, es un lujo contar en el tema literario contigo y con galan100. Es un placer leeros. | |
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29-06-10 23:05 | #5643798 -> 5635679 |
Por:vakaloka37 ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Me parto que chasco se llevò el botijo jajaj vaya con la moza y luis Alfredo anda,anda jaja | |
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29-06-10 23:28 | #5644093 -> 5635679 |
Por:Al-Hakam ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo EL BOTIJO, LAS TRÉBEDES Y LA MOZA CASADERA El botijo no era de piedra (era de arcilla, roja para más señas) y el pitorro se le ponía enhiesto con las curvas de la moza y las cosas que hacía con ella Luis Alfredo. Quien por cierto no solo se dejó barba, sino que se hizo una rinoplastia (se arregló las narices vaya) ya que él era chatejo y se puso la nariz aguileña con una prótesis de cartílago de murciélago (digo yo que por que no se lo pusieron de águila) En fin dejémonos de disquisiciones. El encuentro de Luis Alfredo y el botijo parecía casual, pero había una tercera sorpresa. El padre de la zagala era el listo que distrajo las trébedes de oro y diamantes, y algo condujo al botijo (aparte de la muchacha) y a Luis Alfredo (que se aprovecho de que por medio estaba la chiquilla) a las trébedes. Luis Alfredo dejó exhausta a la ninfa y se fue a buscar las trébedes. Cuando vio el botijo se le iluminó el rostro y le brillaron los ojos, que ahora eran verdes y algo menos estrábicos debido a unas lentillas y otra operación estética. Había matado tres pájaros de un tiro, tenía el botijo, ahora iba a por las trébedes y se había calzado a la moza. Que por cierto tenía el arreglo de boda la semana siguiente. El novio un potentado agricultor con un toterreno de los altos, esperemos que tuviera el habitáculo alto también que falta le haría. El padre iba a aportar las trébedes a la dote, porque la chica era de bandera, pero de cuartos no andaban mu bien. Pero Luis Alfredo estuvo al quite y se iba a llevar las Trébedes y la chica ya había sido suya. Paso a la habitación donde dormían los padres de la princesa de las Trébedes que pronto ya no lo sería. Se coló en un armario que debió ser una Lacena antiguamente y allí estaban las trébedes. Se fue de puntillas con el Botijo en una merendera, las trébedes en una bolsa de pan y dejando a todos durmiendo. La casa del tío Acisclo estaba precintada. La habían expropiado y todos los aperos y antigüedades que poseía iban a pasar a ser un museo etnológico municipal. Pero Luis Alfredo se las arregló para entrar por una buhardilla que había en el tejado. Allí sacó las trébedes y el botijo y los unió. Se dio como un golpe de luz. Entonces el botijo se dio cuenta de que no se había convertido en el alma de un botijo, sino que su fuerza procedía de la potencia mágica de los diamantes y el metal noble de las Trébedes. Las había hechizado Gundemaro un hechicero medio visigodo, medio hispanorromano que en Toledo hacía de las suyas hace bastantes siglos. La Historia de la entrada del Espíritu de Sisebuto en el Botijo la referiré a continuación. Se hallaba solazándose con la consorte de Ataulfo, cuando este entró espada en mano, mancillado su honor solo podía limpiarlo con sangre y le hizo dos cortes a Sisebuto, el primero la decencia y el pudor me impide señalarlo, el segundo le segó la cabeza. Entonces el espíritu que no le dio tiempo a decidirse si se iba a cielo al infierno al purgatorio o el limbo. Le dio por tomar la senda Zen y reencarnarse en algo. Pero fue todo tan rápido que no pudieron buscar una garrapata, o una salamandra o a la señora que fregaba los suelos del Dormitorio de la mujer de Ataulfo que estaba presente. Fue a parar al botijo. Que era un regalo como se dijo del antepasado Alarico I, y tenía no uno sino dos pitorros, lo cabal pa ponerse perdío cuando bebes. Estuvo vagando por media Europa, hasta estuvo en las cruzadas y luego los normandos lo devolvieron con malas artes a Toledo, incluso con sus trébedes, pues los perseguía en sus peores sueños. El resto del Tesoro al que pertenecía el botijo, se lo llevó una buena parte el fisco, vulgo hacienda y la otra parte un sobrino del tío Acisclo que se había hecho de oro y retirado a tiempo del negocio inmobiliario. Toda su fortuna acabo en las Islas Caíman, hallándose repisos de que les hubiera echado el guante el erario público. Volvamos a Luis Alfredo. Solo le quedaba el botijo, una inteligencia unas décimas por encima de la media y una reputación de loco que le cerraba las puertas de progresar en la vida y le abría la de todos los manicomios. Se sentó un rato en la camareja que abrigaba la buhardilla y vio que habían limpiado los aperos para que los clasificara un pasante de arte que lo contrató a dedo el ayuntamiento, en vez de que lo hiciera un artista o alguien entendido en lo propio. Posiblemente pondrían los yunques con las trillas o algo así. Vamos que harían más o menos que lo que hizo el arquitecto (que no historiador del arte) con el Don Diego de pintarlo de Azul y la plaza totalmente policromada Pero el botijo no lo trincarían. Era la noche de San Juan, una noche mágica y se produjo una especie de interacción entre las trébedes el botijo y Luis Alfredo. Que provocó el botijo e inconscientemente Aceptó Luis Alfredo. Para hacer de tres cuerpos uno. Cosa que si en vez de ser personas hubieran sido santas personas se tomaría como dogma. Se fundieron, porque el botijo quería volver a tener cuerpo y un cuerpo que tuviera cabeza y… bueno lo que le cortaron a Sisebuto. La nueva persona se llamó Sisefredo Botija Trebedes. Cual de si una fusión bancaria se tratara. Se aprovechó que ese día había ganado la selección española y entre la confusión, sacó el Dyan Seis viejo del tío Acisclo rompiendo el precinto y cogió las del portillejo, por caminos, pero en dirección a Montiel. Donde casi nadie lo conocía… | |
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30-06-10 12:57 | #5646311 -> 5635679 |
Por:popol ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Suscribo lo que dicen otros foreros sobre las cualidades literarias de Al-Hakam y galan100, da gusto leeros; pero, el_tío_del_pífani, no te hagas el remolón y no te dediques solo a leer y a decir lo bien que lo hacen los demás, escribe que tú tampoco lo haces nada mal. | |
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30-06-10 13:20 | #5646438 -> 5635679 |
Por:Al-Hakam ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Y seguimos regalando. Vamos a dejarnos de echar flores unos a otros y vamos al hato. Creo que voy a ir numerando los capítulos, aparte de titularlos, porque veo que esto va para largo. POR LOS CAMPOS DE MONTIEL Cuando el ser a que había dado lugar la metamorfosis se conducía con su cochambroso coche, vieron a su izquierda el Lord Carrington, la parte de Sisebuto recordaba los antiguos templos romanos que veía aún en pie en su época. La transformación hizo que se compensaran las tres o mejor cuatro naturalezas. Pararon cerca del pico del Juego de Bolos y Sisefredo se bajó a hacer sus necesidades menores. Se dio cuenta de varias cosas, su miembro viril era algo menos grande que antes, pues al integrarse las trébedes en sus piernas y ser la patas más pequeñas se redujo el tamaño de dicho apéndice. Cuando se fue a repeinar en el retrovisor del Dyan 6, vio que tenía los ojos raros se quitó las lentillas y no eran verdes sino azules (sin lentillas) y el pelo en lugar de ralo y castaño, era rubio y rizado. Esto era parte de la naturaleza de Sisebuto. Y el Botijo le dio un volumen al pecho que parecía un culturista mal proporcionado. En fin, la nariz no sufrió más variaciones y conservaba el seso extraviado de Luis Alfredo. Al pasar por Carrizosa una pareja de la Guardia Civil del Seprona les hizo variar el camino y meterse por caminos hasta Villahermosa. Luego, tras dar un rodeo se plantaron en Montiel. Se instalaron al raso, arriba, en las ruinas del Castillo de la Estrella. Y bajaron al pueblo a confundirse con los paisanos. Como veis hablo en plural, pues aunque eran un cuerpo eran tres naturalezas en una, bueno cuatro con el espíritu de Sisebuto. Pero en cualquier momento se podían separar. Encontraron al tío Clavijo, un señor de los de antes con boina y blusa que se refrescaba al abrigo del parquecillo de al lado de la Iglesia. Hablaron con él, llevando la voz cantante Luis Alfredo que para eso ponía el grueso del cuerpo. Pero consultaba al botijo y a las trébedes, a Sisebuto a veces lo escuchaba, a veces no, porque tenía muy poco seso. Seguiré en singular que la presunta esquizofrenia de Sisefredo parece estar contagiándoseme. Hablo el tío Clavijo le dijo que era pariente de José Mota, pero la familia no se hablaba por asunto de unas lindes que no estaban muy claras. Pero como él era famoso pues le dieron la razón. Quería el alcalde hasta hacer una glorieta con la escultura del tío de la Vara. Les preguntó que de donde era, el le dijo que de Terrinches, y entonces sospechó pues tenía parientes allí y su acento no era el mismo. Les siguió la corriente y él se retiró a comer algo. Había sacado de debajo de una baldosa del tío Acisclo el numerario suficiente para sobrevivir sin trabajar una temporada. Cometió el segundo error, en el bar donde comieron un ajo arriero les preguntaron y dijeron que eran de Santa Cruz de Mudela. Un guarda que tenía conexión con la Guardia Civil de Infantes, hizo sus pesquisas y juntando y pegando, determinaron que este personaje era raro y mala gente. Cuando se echaba una siesta oyó como subía alguien a las ruinas del Castillo, era la Guardia Civil con el guarda que iban a su captura. Pero Sisefredo tenía recursos, poseía aún la posibilidad de teletransportarse. Se fueron a Fuenllana donde fue más cauto y más coherente en sus afirmaciones ante los paisanos. Allí descubrió que tenía un poder, fruto de la metamorfosis, podía doblar metales con la mente. Aún quedaban mucha sorpresas con esta criatura que surgió de las trébedes… | |
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30-06-10 14:42 | #5646885 -> 5635679 |
Por:Al-Hakam ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Esta mañana la he tenido medio libre y me ha dado tiempo a escribir dos pasajes, pero no os acostumbréis que lo mismo tengo hasta las noches ocupadas en cualquer momento CAPÍTULO VIII Faltos de persona que detener, la Guardia Civil se centró en el coche abandonado. Tras varias pesquisas dedujeron lo siguiente: Que llevaba quince años sin pasar la ITV, que el aceite había que cambiárselo. Que las ruedas eran de un dos caballos y estaban más bien gastadas y también hallaron un carnet de Loco perteneciente a Luís Alfredo, pero para preservar su verdadera identidad al ser un incapaz, solo tenía un número que le servía para tener descuento en todos los economatos de pirados de la Comunidad de Castilla-La Mancha y solo un juez podría identificarlo. Pero de todos modos aunque hubiera tenido foto, la apariencia de Sisefredo era totalmente distinta a la de Luís Alfredo. No hallaron otras huellas ni restos de ADN, cosa que hubiera sido también vana, pues ahora la criatura que supuestamente perseguían tenía ADN de un botijo, unas trébedes y de un tal Luís Alfredo. Los espíritus que se sepa no tienen ADN. Ya se habían conectado dando la alarma de la existencia de un Ladrón de Trébedes por parte de los cuarteles de La Solana y de Alhambra y lo malo es que el Ladrón no coincidía con la nueva anatomía de Sisefredo. Así no le darían caza. Pero era sospechoso por parte del Tío Clavijo, el guarda y la benemérita de Infantes. Decidió cambiar aún más, si cabe su fisonomía, se echó agua oxigenada en el pelo se le quedó pelirrojo. Se afeitó la barba y se puso gafas estilo Roy Orbison, sin graduar, pero con cristales. Con esto del tele transporte se ahorraba gasolina y no dejaba rastros por donde pasaba, excepto el Dyan 6, que, por otra parte tenía pocas evidencias. Pasaron dos meses y se integró en la vida de Fuenllana. Se hizo pasar por un médico del seguro y como allí les hacía falta algún médico no le pidieron ni el título. Pero en una localidad cercana saltaban las alarmas, una mujer que se había casado hacía un mes, estaba de dos meses embarazada. El marido decía que la había respetado hasta el matrimonio, por lo menos entre semana. Y el padre se lamentaba de haber tenido que vender el tractor de su abuelo para dar la dote en vez de unas trébedes de oro y diamantes y que ahora le vinieran con este disgusto. Las largos tentáculos y otros apéndices de Luís Alfredo (ahora Sisefredo) ¿Tendrían algo que ver? | |
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30-06-10 17:21 | #5647862 -> 5635679 |
Por:Al-Hakam ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Esta siesta los de la obra de al lao no han tenido otra que ponerse a taladrar y al desperezarme me ha dado por escribir otro poquejo, pero solo un poco, que con la calor que hace me voy a dar una ducha fría. Continuamos para bingo CAPÍTULO NONO (IX) REGULARIZACIÓN Sisefredo estaba contento, hacía doble jornada por la mañana hacía de médico del seguro y por la tarde cogía algunas igualas. Y ahora su preocupación era la de tener una nueva identidad. No tenían ningún papel y se las arregló el fin de semana para tele transportarse a Madrid, por la zona de Cascorro y allí visitó a un falsificador de papeles de los mejores del reino. Se hizo con un certificado de nacimiento, otro de empadronamiento, le hizo hasta las fotos del carnet y ya puestos le dio un título falsificado de médico, y otro de la especialidad que Sisefredo dijo que se la hiciera de ginecólogo. Ahora Sisefredo era Sisefredo Botija Trévelez, no quería ponerse Trébedes por si daba lugar a pistas para encontrarlo. No quería falsificarlo todo y se tele transportó a Valdepeñas para hacerse el carnet de identidad y el pasaporte en la Comisaría de la Policía Nacional. Pero se equivocó y se plantó en el antiguo edificio, y tuvo que rehacer el sortilegio e ir a la dirección nueva. Entró no sin cierto temor, pues presentarte con papeles falsos es arriesgado en cualquier sitio, pero en una comisaría, que queréis que os diga, es que se lo pones a huevo. Pero el falsificador era de los mejores y colaron los papeles. Eso sí no tenía tiempo de ponerse con la Autoescuela para lo del carnet de conducir y eso se lo hizo el falsificador entero. Hasta la revisión médica se la pasó el falsificador. No en vano presentó como credenciales a Sisefredo de que falsificó un certificado de autenticidad de una acuarela de Dalí que tampoco era de Dalí. En fin un lío de falso y auténtico que ya no sabemos que es lo cierto y lo enredao. Siguió de médico y descubrió nuevos poderes. Más que un médico parecía un curandero, pues con una simple imposición de manos, sanaba a los enfermos. Pero lo explotaba más en las igualas, que para eso cobraba más. Lo de doblar los metales hacía que muchas personas no tuvieran que ir a las ópticas de Infantes para arreglar las gafas metálicas, cual Uri Geller, enderezaba y enredaba los metales cosa mala. Fuenllana era un sitio tranquilo y se quedaría un par de meses más. Pero era un culillo de mal asiento y luego emigraría a algún sitio más importante. Barajaba entre Valdepeñas o Copenhague sin descartar ninguna de las urbes que hay entre dichos sitios, ya lo vería más adelante. | |
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30-06-10 18:20 | #5648266 -> 5635679 |
Por:consenso ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo A mi me pasa lo que a ti en la siesta y cojo y meto al del taladro en el botijo para un par de horitas.Por cierto ¿no insinuarás que Sisefredo es Velacoracho?;lo digo por lo de doblar la jornada | |
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30-06-10 18:35 | #5648353 -> 5635679 |
Por:Al-Hakam ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo No por Dios, caériamos en una especie de bucle en el que el creador del personaje es el mismo personaje. Lo de doblar la jornada es para hacer que el personaje parezca un médico de los de antes forrao pero que no paraba de trabajar con las igualas. | |
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30-06-10 19:04 | #5648547 -> 5635679 |
Por:Al-Hakam ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo No solo me gusta poner tontás, a veces me vuelvo serio y escribo historias con su moraleja, mirad, si es posible el hilo que hay de Historias de Amor que tiene muy pocas visitas (la verdad es que pegan más en San Valentin, que para mi son todos los días del año) | |
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01-07-10 11:50 | #5654411 -> 5635679 |
Por:Al-Hakam ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Ya la hemos fastidao, el trabajo me va a impedir entrar en el foro durante otro poco tiempo, espero que me cuidéis el botijo, si puedo escaparme lo mismo subo algo. | |
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01-07-10 17:56 | #5656403 -> 5635679 |
Por:vakaloka37 ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo tranquilo que te cuidaremos el botijo, a ver si vuelves pronto y oye lo de los medicos forraos con las igualas no es tan antiguo,y lo de los que doblan la jornada tampoco,pero bueno eso es otra historia que quizà diera para algun debate. | |
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15-07-10 16:22 | #5739361 -> 5635679 |
Por:Al-Hakam ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Al fin he podido retomar lo del botijo, me he tenido que situar un poco y a lo mejor este primer relato es un poco caótico. Pero espero, ahora que me llegan las vacaciones, seguir un poco más, pero trataré de darle fin al relato en cuatro o cinco exposiciones más, porque, aunque puede dar para más, se me ocurren otros relatos que empezar aquí que pueden dar más juego, y, si son interactivos mejor todavía. Al hato: Capítulo X: CAMBIANDO DE AIRES Y VOLVIENDO A LOS ORÍGENES Nuestro protagonista se decidió por la capital del Reino, la villa y Corte. Se fue de Fuenllana con nocturnidad y alevosía. No pagó la fianza y se fue sin pagar la parte de alquiler de ese mes. Huyó con lo puesto. Tampoco tenía grandes pertenencias y las que tenía estaban a buen recaudo en su banco. Viajó esta vez en autobús, porque parecía que sus poderes de teletransportarse se iban diluyendo. Tuvo que hacer autoestop hasta la estación de autobuses de Manzanares y, desde allí en la Sepulvedana se fue a Madrid. No era precisamente un hombre de mundo, un pillo en La Solana no es lo mismo que un pillo Solanero en Madrid. Lo primero que notó fue que su bolsillo iba más ligero, nada más que apearse en Méndez Álvaro, le quitaron la cartera. Luego lo paró la policía y, al no llevar documentación lo llevaron a comisaría, y como nadie podía responder por él. Pues lo tuvieron hasta que llamaron a la comisaría de Valdepeñas, donde se había sacado el carnet. Recuperó la documentación luego de que los cacos le dejaran la misma en un buzón de correos y le avisara la pasma que habían recuperado los papeles. Canceló todas sus tarjetas y anduvo más vivo en lo sucesivo. Luego cuando se alojó en una pensión y fue a comprar un poco de fiambre. No lo entendían en el local donde entró a comprar. Pedía cuarto y mitad y no lo entendían. Cuando quería media sandía no lo entendían muy bien. Y cuando fue a la farmacia y pidió carbonato, tampoco lo sabían despachar. Se sentía como un marciano. Poco a poco fue echando de menos su Mancha, Manchega y decidió volver. Esta vez en Tren desde Atocha a Manzanares donde cogió el autobús y se presentó en donde estaban los orígenes de sus dichas y sus penas. Descubrió que en La Solana estaban preparando la feria. Y se mezcló entre todo el bullicio que cada vez era menos porque una buena parte de los Solaneros hacían la feria por su cuenta en Benidorm y similares. Pero como en Sevilla, en La Solana hay gente pa tó. Estuvo un poco raro pues su naturaleza tripartita empezaba a querer desmembrarse. Por un lado le apretaban las trébedes, por otro el botijo estaba reivindicando su lugar y el espíritu de Sisebuto estaba un poco rebelde. Eso sí, con este lío de identidades el que estaba un poco anulado era Luis Alfredo. Decidió ir al psicólogo, pero todos los del pueblo estaban de vacaciones. Así que optó por darle la brasa a un amiguete que se echó en el psiquiátrico del Pozo de La Serna. Pero el tipo estaba tan loco, que después de hablar durante tres horas de no se sabe muy bien que, lo obsequió con otras cuatro horas de disparates al cubo. En fin que acabó peor de lo que estaba. Luego se cruzó con la moza que (presuntamente) había dejado embarazada. Ya había pasado un tiempo respetable e iba con un bebé que (presuntamente) podría ser su hijo. Pero legalmente y muy a su pesar era hijo del potentado agricultor que asumió los posibles errores de la ya su mujer. El niño le miró y se le quedaba mirando y Sisefredo huyó como si lo persiguiera una cosa mala. Bastante problemas tenía como para que le viniera ahora un mocoso con posibles (y presuntos) lazos familiares directos. Volvió a la casa del tío Acisclo, ahora era un edificio que habían remodelado, así como si quisieran que fuera antiguo pero que no lo parecía en absoluto. Era un museo con los aperos y artilugios que su tío, antes, poseía en propiedad. Entre ellos se exponía una trilla con sus pedernales encasquillados y entonces su naturaleza sufrío una especie de transformación de quita y pon. Despareció de su naturaleza el botijo y se incluyó la trilla, todo ello bajo la apariencia de Luis Alfredo, Rubio y con ojos claros y con una nueva capacidad: Ver a través de las paredes, hasta las de adobe. También, debido a los pedernales, podía hacer fuego con las manos. Cuando llegó el guardia de seguridad que era un sobrino de un concejal que colocaron allí debido a que su madre le dijo que si no le daban trabajo las próximas elecciones votaba a Izquierda Unida, y vio el botijo en vez de la trilla le dijo a la Policía Municipal que, una de dos o la trilla se había convertido en un botijo o le habían dado el cambiazo. Eso o que el carajillo de las diez de la mañana le hubiera sentado mal y hubiera confundido la trilla con un botijo. La policia Municipal le dijo que tenían cosas más importantes que resolver, que retuviera el botijo por si se escapaba y que en unas tres horas, cuando cambiaran de turno, se personarían allí. Que había mucho lío y poco personal para atender chorradas le vinieron a decir. El segurata miró al botijo y este, poco a poco, lo iba hipnotizando, entonces el botijo convirtió al guardia de seguridad en un candil que fue a sustituir al refrigerante artilugio. Y el botijo huyo ¡Era libre! Se transportó a unos almacenes municipales, que dado que nadie trabajaría esos días de feria allí podía estar tranquilo. Sisefredo Trillo Trévelez. Pues ahora se pasaría a llamar así para que nos entendamos. Que en el carnet seguía siendo Sisefredo Botija Trévelez. Vagaba por el parque, en medio del bullicio y al son del Concierto de Camela en el campo de Fútbol. Le compró unas berenjenas a un vendedor que las tenía allí al efecto y cuando fue a limpiarse en el trapo se lo pensó dos veces, pues tenía linaza para regalar. Luego se encontró con unas mozas que estaban pasándoselo de miedo tomándose unos vinos dulces. Y se integró con ellas, luego andando la noche intimó con una de ellas, que era una estudiante de magisterio en Ciudad Real, esta vez puso los medio para que no hubiera de nuevo, un Sisefredito entre los mortales. Y pasó una feria como no recordaba en años, subió a la noria, le echó a la tómbola y le tocó un jamón que tenía más mili que Espartero. Hasta se comió dos pollos juntos con la moza que no se sabe muy bien por qué, tenían entre los dos tres muslos nada más. Pero el botijo, en un oscuro y tétrico almacén empezaba a pensar por si mismo, pues aunque se había separado de ellos tenían la esencia de Luis Alfredo, Sisebuto y las Trébedes en su alma, que había creado con su combinación. | |
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16-07-10 15:33 | #5744541 -> 5635679 |
Por:Al-Hakam ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Esto parece que tiene poco éxito, pero yo las cosas que empiezo las acabo, aunque le daré carpetazo si no tiene muchas visitas en pocas entradas más. Claro si alguien con más "chispa" quiere continuarlo pues divinamente. Bueno de todos modos luego haré un pdf con toda la historia y lo mismo lo subo a la página de www.lasolana.es junto con la gaceta :-) Bien al Lío: CAPÍTULO XI La Policía Municipal llegó al Museo, el segurata había desparecido, que realmente era por lo que iban. Que hubiera una trilla o un botijo de más o de menos no parecía ser un problema de Orden Público. Eso sí fueron dos o tres días después para que los indicios fueran más “consistentes”. Empezaron a hacer el atestado: “Cuestión: Un botijo que no hay, un Candil que no había y una trilla en busca y captura. El botijo no se pone en busca y captura, porque no consta en el inventario del museo. Un segurata que nos llamó y no aparece (lo mismo se ha llevado el botijo subido en la trilla) Useasé que es el principal sospechoso. Hecho Segundo: No nos explicamos muy bien como nos aviso el principal sospechoso y luego se largo, claro que el chaval tampoco era muy espabilao. Mientras el trencilla redactaba su atestado uno que estaba visitando el museo dijo que ese candil no le sonaba. Lo inmovilizaron y lo interrogaron aplicándole el tercer grado, pues era un testigo de cargo. Siguió el atestado: Un fulano dice que el candil no estaba, eso ya lo sabíamos pero como autoridad competente no podemos ser juez y parte, y con su testimonio podemos andar mucho adelantado. Bueno el caso es que nos ha dicho, tras el persuasivo interrogatorio, que el otro día se llevó un kilo de azúcar de Mercadona sin pagar. Que no ha pagado el impuesto de Bienes Inmuebles y que su coche pasó la ITV por los pelos. Del candil poco, porque se ha puesto nervioso y casi confiesa que el fue quien mató a Kennedy. Conclusión: Estamos peor que cuando empezamos, vamos a decirle al Juez de paz que lo sobresean esto, que con este papel ya he trabajado para cinco meses, que trillas hay a manta, candiles uno más o menos da igual y del botijo prófugo como nadie lo ha visto pues lo declaramos en rebeldía invisible”. El botijo ajeno a todo el trasiego legal se había camuflado en el museo arqueológico de Ciudad Real. Entre una lápida romana y dos fíbulas visigodas que le daban categoría. Estaban todos un poco apelotonados y sin inventariar, con lo que pasaría desapercibido. Sisefredo, que a pesar de todo seguía siendo un culo en vilo. Se fue a Villarrubia de los Ojos. Allí paso un calor que para el se quedó. Decidió irse a la montaña adyacente, a una cueva fresquita, a meditar, que tenía la azotea muy, muy alborotada. En la cueva estaba solo y entonces, voluntariamente se desmembró. Se quedaron a un lado la trilla, al otro las trébedes, volando Sisebuto y Luis Alfredo por otra parte. El botijo se había autodeterminado, Sisebuto dijo que debía coger al botijo, si se convertía en un botijo animado él debería irse al Limbo. Y de ese sitio otros espíritus no le habían hablado muy bien. La trilla empezó a tararear la estrofa del “Sembrador” de la Rosa del Azafrán y los trébedes brillaban con un refulgir inusitado. Luis Alfredo debía ordenar sus pensamientos, nunca habían sido muy lúcidos. Aunque se fingió loco, quizá, con este lío de múltiple personalidad ahora estaba con problemas mentales. Digamos que los cinco personajes. El botijo por una parte, y los otros cuatro por otra se iban a tomar unas vacaciones. Pues estuvieron todo el mes de agosto sin hacerse notar. El Juez de Paz sobreseyó lo del museo. El candil despareció y apareció el segurata fuera del museo aturdido. Le dieron carpetazo y pusieron otra trilla para que la gente no hablara de más. El testigo que cogieron se fue a vivir a un balneario, porque no pudo aguantar la presión testifical y se dedicó a las obras pías y a no robar más azúcar. Fundo una ONG, “Testigos sin fronteras”. El concierto de Camela se saldó con cinco broncas menores con exhibición de navajas, pero nada más que exhibición. Y con siete comas etílicos, que se los adjudicaron al concierto pero algunos fueron fruto del garrafón de alguna discoteca. Las siguiente noticias de los protagonistas cuando baje un poco el calor… | |
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16-07-10 21:03 | #5746460 -> 5635679 |
Por:el_tio_del_pifani ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Al-Hakam, me descubro ante tu capacidad creadora, yo con estos calores no puedo pensar, el sol me achicharra la azotea y sólo pienso en hidratarme. Un saludo. | |
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18-07-10 18:06 | #5752605 -> 5635679 |
Por:vakaloka37 ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Al-Hakam para mi si es un èxito,mi aplauso como siempre para ti Pìfani en estos momentos la nube del señor alcalde te vendria de lujo,sacate el carnet màgico a ver si te la presta,que fresquita debe de tener la coronilla jaajaja | |
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18-07-10 22:17 | #5753697 -> 5635679 |
Por:Al-Hakam ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Un capítulo más, es que digo que no es un éxito, que a lo mejor lo es, porque aqui pone las respuestas, no las visitas, que quizá es lo que cuenta. CAPITULO XII EL GRAN CONSEJERO Sisefredo fue uno de nuevo, y se fue en busca del botijo. Pero su cerebro se había enmohecido con la humedad de la cueva, y por ende, se había ablandado un poco. También tener en cuenta el Solano que había en el ambiente que secaba las mentes. Le dio una especie de locura precatatónica y cuando volvió en sí se creía que era el Consejero de Administraciones Públicas de Castilla-La Mancha. Con el seso que le quedaba se metía en los cibercafés y hacía una lista de las obras en marcha en toda la región. Allí donde faltaba poco por terminar, se personaba y con unos cuantos metros de cinta y unas tijeras iba inaugurando, carreteras, auditorios, ciudades deportivas, polideportivos, centros de salud y geriátricos. En algún sitio lo confundían con el consejero de verdad e improvisaban un vino de honor al que acudían los gorrones de turno con presteza inusitada. Hasta que un día lo sorprendió la benemérita queriendo inaugurar un cuartel de la misma que, más que para inaugurar estaba para tirarlo. Lo detuvieron, pero él se escapó dando un puñetazo en la pared de la celda que cedió, tal era el estado de la construcción. Ahora era un fugitivo, loco, pero fugitivo al fin y al cabo. Huyendo por la campiña toledana que era donde cometió su despropósito, se topo con alguien que le echaba el alto, se creía que era su antesala de la cárcel de nuevo. Pero era un ermitaño que lo paró para que no lo molestara estaba meditando y le instó a que se quedara quieto. El obedeció a pies juntillas y estuvo cuatro horas hasta que el santón acabó de meditar. Estos señores que se dedican a la ermitañería, son muy dados a permanecer mucho tiempo, casi todo el tiempo, en silencio. Pero, cuando acabo de meditar y con Sisefredo que le dio confianza, empezó a largar por los veinte años que llevaba sin hablar. Tal confusión le metió en su ya dañado cerebro que Sisefredo estuvo tentado de pedirle que lo armara caballero. De lo que lo disuadió Porfirio que ese era el nombre del Santón, le dijo que se dedicara al mundo de las telecomunicaciones que era más rentable que la caballería andante. Pues el Santón hablar no hablaba, pero estaba al cabo de la calle. Sisefredo después de dos días enteros oyendo hablar al Ermitaño, se fue decidido a cambiar su vida y hacerse un magnate de la telefonía móvil. Entonces se cruzó en su camino algo que cambió su destino igualmente. En un cruce de caminos, encima de un manzano el botijo lo esperaba. Instintivamente la trilla abandonó su naturaleza y el botijo se volvió a integrar en él. Volvía a ser él, con toda su fuerza originaria. La naturaleza de Luis Alfredo cada vez era menos determinante, con lo que la mente calenturienta de Sisebuto tomo posesión preeminente de las cuatro naturalezas. Miedo me daba que un tipo que fue un mujeriego reconocido, golfo como él solo, gustoso de todo tipo de excesos, controlara a Sisefredo. Pero Luis Alfredo era muy débil y quedó en un segundo plano. Cuando Sisebuto se hizo con el mando cambiaron las cosas. Ahora no trabajarían, irían de fiesta en fiesta, tendrían una mujer en cada puerta, y no sería recatados a la hora de comer como marajás y beber como cosacos. La cosa no pintaba mal, disfrutarían hasta reventar. Lo único es que el que reventaría sería Luis Alfredo, pues Sisebuto ya no existía corpóreamente. Las trébedes saldrían despedidas en la explosión y el botijo era el que también más peligraba por su naturaleza arcillosa y frágil. No obstante les dieron la primera en la frente. Intentó empezar la juerga en un club de alterne en una carretera principal. No se acordaba que no había sacado suficiente para correrse la juerga plenamente. Se hizo con los servicios no de una prostituta sino de tres, corrió el champán y el cava. Cuando terminó con ellas y ellas con él, reconoció ante el proxeneta que no tenía dinero. La paliza que le pegaron fue antológica y lo dejaron abandonado en la cuneta. Lo recogió un conductor que iba a ver como iban los racimos de la próxima vendimia en su finca y lo llevó al centro de Salud correspondiente. Cuando le preguntaron que quien le había hecho eso, dijo que lo sorprendieron unos ladrones, no quería dar muchas explicaciones por si había represalias. La sorpresa de los médicos es cuando le hicieron las radiografías, se entreveían las trébedes y el botijo en ellas y lo atribuyeron a que el aparato de radiografías era antiguo y no funcionaba bien. Sisefredo no sabía a que atenerse, ya no entendía muy bien nada y trató de hacerse de nuevo el loco, para que lo ingresaran con cuenta a la Seguridad Social y no tener que trabajar ni meterse en líos. Pero el lío que venía no era nada con todos los que había suscitado era “la madre de todos los líos”… | |
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03-08-10 15:09 | #5840053 -> 5635679 |
Por:Al-Hakam ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Bien, doy fin a la Historia del Botijo Visigodo, mi tercer libro, bueno llevo dos libros y medio, porque esté me lo pusieron a güevo, con el argumento personajes y demás. Espero que mi modesta aportación haya servido para alegrar estos días de caloruzo bestial. A ver si saco unos ratejos y hago otro libro o como este un librejo, que sea del agrado de vuesas mercedes. CAPÍTULO XIII EL FINAL SERÁ DESASTROSO (cita del Apocalipsis) Sisefredo no era nadie, ni lo había sido nunca. Quiso ser médico, pero solo era un curandero. Le dio por inaugurar cosas, y jamás había estrenado nada. Acabo en el cruce de caminos entre Alhambra, La Solana y el Cristo. En medio de la nada, sin saber que rumbo tomar. En un día que se adivinaba tormentoso, allí decidió acabar con su existencia. Pero no se ahorcaría, ni se envenenaría, ni se pegaría un tiro. Quería morirse de aburrimiento. Y se quedó allí hasta que la pálida dama se lo llevara por cansao. Pasaron varios días y no había manera, hasta había engordado de no moverse. Entonces otro de esos días en que la negrura de las nubes evoca los más tristes presagios, sucedió. Estaba andrajoso, con barba, y con una medio locura, esta vez de verdad que asustaba a quien se lo encontraba. El cielo empezó a protestar, y a lanzar rayos y centellas. Con la mala o buena suerte para Sisefredo, de que un rayo lo partió por la mitad, bueno por las tres partes. Fulminó a Luís Alfredo, expulsó al botijo a quince metros con la correspondiente escabechina que lo convirtió en cascotes y las trébedes se quedaron fundidas en lingotes y los diamantes esparcidos por el cruce de caminos. Sisebuto se fue al limbo, muy a su pesar. Cuando pasó un Nissan de la Guardia Civil, hicieron inventario. Dos lingotes y medio, cinco diamantes, bueno cuatro, que el quinto era un cristal roto. Unos cascotes que no determinamos su valor. Y un churrasco de persona hundido en tierra que total lo rellenamos con una poca grava y nos ahorramos el entierro. Así terminó la historia del botijo Visigodo. EPILOGO Los lingotes acabaron en un prestamista de Manzanares, pues alguien los distrajo con o sin la complicidad de algún benemérito, y los vendió a un sitio de esos donde la marca es COMPRO ORO. Los diamantes también se vendieron pero esta vez fue por una buena causa, el mangante que se los agenció deseaba visitar Cuba y estos le sirvieron para el viaje y algunos caprichitos más. Los cascotes fueron estudiados por Don Candelo y los dató en el siglo de las Luces, pero no precisó mucho más por andar ya el hombre entrado en años. Sisebuto se equivocó (hay quien piensa que lo hizo adrede) y en vez de irse al Limbo se fue al paraíso de los musulmanes, donde le esperaban cual mártir de la Yihad, las once mil huríes (vírgenes celestiales) para complacer sus más bajos instintos. Luís Alfredo no dejó, bueno si dejo descendencia pero quedó entre la moza y él. Pero él no contaba pues ya no era. Se reabrió la comisión municipal sobre el botijo visigodo, pero no le quisieron dar voz a Don Candelo, porque ya estaba jubilado y se resolvió con un cordero de los máximos dirigentes del partido en el poder y muchos, muchos gorrones afines y gorrones comunes. Esto se acaba en el capítulo XIII, número cabalístico y Sisefredo tuvo suerte, porque cualquier día choca con la Tierra un asteroide y eso que se quita de penar. Al-Hakam que esta pensando en el puñetero de Sisebuto que está en el Paraíso rodeado de churris | |
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03-08-10 16:10 | #5840351 -> 5635679 |
Por:Al-Hakam ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo He hecho un PDF con la historia completa del Botijo si consigo ver como se suben archivos a este invento lo mismo lo subo. Saludos a tod@s | |
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03-08-10 16:15 | #5840371 -> 5635679 |
Por:Al-Hakam ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo A ver si así se puede pegar. | |
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05-08-10 00:13 | #5850022 -> 5635679 |
Por:el coyote1941 ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo he leido todo lo del botijo yme ha gustado mucho ,como veo que teneis muy buena imaginacion, me gustaria que me ayudaseis a contar la historia de la pobre matildita y el cantaro que nunca llego´ a la fuente de la plaza dedon diego. | |
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06-08-10 13:45 | #5858733 -> 5635679 |
Por:Al-Hakam ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Habría que estudiar lo de matildita, para empezar habría que inventarse la fuente de la plaza de don Diego, que, posiblemente, existió en su día. Luego si matildita vive en la calle Sagrario, Doña Angela o en La Veguilla o en la Moheda o en la Plaza de Toros. Esto último lo digo porque según el trayecto puede tener más o menos historia. De todos modos para una historia parece una idea un tanto flojilla, sin embargo de ideas más flojas he hecho yo relatos. Un Saludo Al-Hakam | |
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13-08-10 16:42 | #5907318 -> 5635679 |
Por:mesopotamia ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Pues si en la Plaza de D. Diego había una fuente municipal, a la que se iba a coger agua con un cántaro, o cantarilla (para las niñas) a cambio de "un chabito"... claro estoy pensando que de esto hace por lo menos 50 años, estaba en el rincón que había (ahora no existe dicho rincón) pegado a la Academia, que también dejo de existir hace muchos años, es la zona del Centro de Salud en la actualidad. Hacía mucho que no entraba en el foro, hace meses me lo dijo un paisano y lo visité en varias ocasiones, pense que asi estaba más al día de lo que sucede en el pueblo, pero la verdad es que quede un poquito desilusionada... demasidas críticas, demasiado cotilleo..., ayer entre casi por aburrimiento y me llamo la atención primero Al-Hakam (cual de ellos?), persona ligada a un periodo histórico que me fascina y después el título de "el botijo visigodo", me enredé a leer y leer y hasta que no me lo bebí no deje el foro. Me uno a todas las felicitaciones que has recibido. Una de las cosas que me ha encantado es tu forma tan solanera de expresarte, esas palabras tan nuestras y esa forma de cortar las palabras que tanto nos caracterizan..., la descripción que haces de los lugares que el botijo en cuestión iba visitando... cada sitio al que te refieres es una imágen en mi retina. Bueno repito mi felicitación, sigue deleitandonos con tus "historias". | |
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13-08-10 18:34 | #5908031 -> 5635679 |
Por:Al-Hakam ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo Me siento más identificado con Al-Hakam II, por su interés por la cultura y el arte (respondo así a tu pregunta mesopotamia) Al-Hakam I fue más violento, aunque un buen estratega. Pero la mano dura no me mola. La época medieval y la medieval española en particular ocupan muchas horas de estudio en mi universo particular de conocimiento.Por otra parte, lo de la fuente suponía que debió haberla en la Plaza Don Diego, pues es un lugar de mucho paso y debió serlo en el pasado. Pero la historia propuesta de momento no me tienta, estoy dándole vueltas a otras cosas que, si mi trabajo y mis aficiones me lo permiten (una afición es escribir así que creo que me lo permitirá) ya iréis teniendo más noticias mías. Escribir para mí no es trabajoso es más lo hago cuando tengo un rato y la inspiración no la busco la exijo en esos momentos raros que no tengo nada que hacer. Saludos | |
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13-08-10 19:38 | #5908471 -> 5635679 |
Por:mesopotamia ![]() ![]() | ![]() ![]() |
RE: El botijo visigodo O.k. Al-Hakan pregunta contestada. Coincido contigo en lo mucho que hizo por el arte y la literatura, aunque "metio la patita" (es mi pen samiento) al dejar como heredero al hijo de la navarra... La historia medieval me entusiasma, sobre todo la época del califato, nos aportaron muchas cosas,... Los nuegados por ejemplo, podríamos decir que es el primo hermano de la "chupaquia", aunque nosotros les hemos añadido un puntito de anís... bueno que me salgo del tema... | |
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Tema (Autor) | Ultimo Mensaje | Resp | |
La policia de éste país compra un camion botijo Por: poison0000 | 23-12-13 04:24 poison0000 | 0 |
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