Fernán Caballero - Ciudad Real

La Presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha expresado cuáles serían las medidas de ahorro que considera más necesarias, entre las que ha incluido la petición de recorte de subvenciones para los partidos políticos o los sindicatos, así como un recorte en el sistema público de Seguridad Social de las personas mayores de 65 años.

Aguirre dirige ahora sus tijeras hacia las personas mayores Para Esperanza Aguirre hay muchos mayores con ingresos suficientes como para poder pagarse sus tratamientos médicos, por lo que se debería impedir que obtuvieran recetas en función de ese listón de renta.

Esta propuesta, que no deja de ser una modalidad de copago puesto que los pensionistas ya han cotizado a lo largo de toda su vida -por igual- para obtener estas prestaciones, significaría una desigualdad evidente entre los mayores de 65 años.

Tomás Gómez, portavoz del Grupo Socialista ya ha alertado en ateriores ocasiones de estos recortes que “hacen pagar más a los más enfermos, provocando grandes desigualdades sociales”.

La presidenta no ha especificado entre tipos de tratamientos médicos, por lo que podríamos encontrar a pensionistas teniendo que hacer frente a los enormes costes de algunos tratamientos, como son , por ejemplo, los referidos a las terapias contra el cáncer.

Tampoco ha señalado el nivel de renta al que se refería, por lo que nuevamente nos encontramos ante un titular del que se desprende más una intención que una propuesta concreta aunque en cambio sí se ha referido al momento de aplicar estos recortes, asegurando que habría que ponerlos en práctica “rápidamente”, tanto estas propuestas como “muchísimas otras”.

Esta posición de Esperanza Aguirre concuerda con las palabras del candidato al Senado por parte de UPyD, Álvaro Pombo, quien aseguraba en una entrevista para la televisión pública que los mayores son “muy pildoreros” y que por ello veía con buenos ojos la posibilidad de establecer el copago. Posteriormente la cuenta de Twitter de dicho partido matizó las palabras de Pombo, aunque seguían refiriéndose a la hiperprescripción en la entrega de medicamentos por parte de la
Seguridad Social a las peronas mayores.