Puerto Serrano - Cadiz

El plumaje que los petirrojos (Erithacus rubecula) exhiben en su pecho aporta información sobre su edad y su sexo, según revela una investigación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). El trabajo, publicado en el último número de IBIS, revela que los machos de más edad presentan una mayor área de plumas rojizas en el pecho.

La investigación ha tenido lugar en una pineda al norte de Barcelona. Los petirrojos juveniles que acaban de dejar el nido exhiben un plumaje marrón, el distintivo tono rojizo de la especie aparece meses más tarde, durante el primer cambio de plumaje veraniego.

Una investigación del CSIC en la Estación Biológica de Doñana explica:
"Después de más de seis décadas, aún tienen una comprensión muy limitada acerca de la información que los petirrojos pueden comunicar con sus pechos rojos".

El cambio de plumaje experimentado el segundo verano reveló que el área de su pecho cubierta de plumas rojas se incrementó en ambos sexos. Sin embargo, el de los machos se estabiliza con el tiempo mientra que el de las hembras disminuye.

Midiendo la coloración de las distintas partes del cuerpo de los petirrojos y utilizando modelos informáticos que simulan cómo las aves perciben los colores, los investigadores demostraron que la línea gris, que también crece con la edad, realza el perímetro del pecho rojo.

Estudios posteriores podrían revelar más sorpresas acerca de la importancia de la mancha roja de los petirrojos a la hora de resolver enfrentamientos territoriales o ayudar a tomar decisiones de emparejamiento.

FUENTE:

https://ww.elimparcial.es/contenido/96466.html