Puerto Serrano - Cadiz

El fraude fiscal en España triplica el gasto público, el subsidio por desempleo y es más de 10 veces el presupuesto en I+D+i civil. El fraude fiscal en España es comparable en orden de magnitud a las provisiones que necesita la banca (que no conocemos exactamente). No comparemos con la educación, la protección al medio ambiente o la ayuda al desarrollo.

Entretanto nuestros gobernantes justifican que “sobran investigadores”, afirman que tendremos el Estado de bienestar “que nos podamos pagar”, ponen trabas a la inspección fiscal y afirman que “se puede hacer más con menos”.

Amnistían a los que defraudan, a los que construyen ilegalmente y destruyen el litoral y la montaña, y por omisión ayudan al corrupto, al que contamina, al malversador, al que se enriquece ilícitamente. Castigan por inacción a los honrados, a los que trabajan, a los que dan la cara, a los que respetan las normas. Y de cortina de humo, autoestima por vía de retransmisión deportiva, venga pan y circo futbolístico u olímpico.

Nuestros gobernantes no quieren que se sepa nada porque daría mala imagen, claro. Propongo que cierren los periódicos para que no nos enteremos, y las escuelas y los institutos de investigación para que no pensemos, así tendremos finalmente un país “a medida”.

¿Es que nos hemos vuelto todos locos? ¿O cómplices? ¿Es que nadie va a hacer nada?— Eduardo Ros Ibarra.

Artículo de Opinión de el diario El País,
sección Cartas al Director.