Valencia de Alcántara - Cáceres

(Suspiro)



Me encanta...


pero es más bonita cuando está contenta, ahora está triste y se le nota

Rakel, cuando la he visto esta mañana, me acordaba de ti, de lo que contaste, y de la muñeca en la cama. Yo creo que tenia palmeras, ¿no?. Parece que esos árboles blancos son cerezos en flor, verdad ¿flor de cerezo?

Qué pena de residencia, Rakel, a mí también me trae tantos y tantos recuerdos de esa familia. Cómo da vueltas la vida. No sé a quien pertenece ahora, pero deberían restaurarla como hotel pequeño, residencia... etc, el lugar es precioso. En cambio no me gustó el bodrio que se construyó después al inicio del camino, fue una burda imitación de la primera y la verdad, con todo el respeto para quienes fue, a los que tengo gran aprecio también, no me gustó nada.

Sí, regatito, había unas palmeras preciosas y aún suenan en mis oidos el son de la tuna de Cáceres y portuguesa; la amabilidad y el señorío de los dueños. Ahora mismo visualizo la nariz aguileña del señor Carvajal, la cara sonriente y guapísima de su esposa, a Mary Tere y todos sus hermanos. Hace tantos años que no sé que ha sido de esa familia, bueno sé que Cuqui murió hace tres o cuatro, maravilloso ser humano.

Valencia, siempre Valencia, por ello me parece maravilloso que quien la haya seguido de cerca por vivir en ella, próximo, o con vivistas frecuentes, pueda ir dándonos noticias del pueblino y sobre todo de su historia a los que por un motivo u otro nos marchamos. En lo que a mí respecta desde el año 66. Dios, cómo caen los tacos.....´

NIVEA, esas palmeras eran muy grandes, yo al menos asi las recuerdo, claro que tambien era muy pequeña, bueno, tampoco he crecido demasiado, pero si cierro los ojos, siguen creciendo. Es uno de mis árboles favoritos, y en casa de mi tia Mari había una palmerita que se puso casi a la par de cuando llegué a esa casa. Esa palmera ahora le he pasado al tejado, es muy grande.
La casa roja, desde el puente, era preciosa, con las escalinatas y sus dos palmeras, tan limpio todo ello. Es verdad que como Hotelito con Encanto, seria precioso, relajante y tan cerca o tan lejos del centro como se desee. El ruido del rio, sería el fondo musical. Yo no estuve nunca ahí, pero ahora recuerdo que tuvimos en el hilo de "nuestros palacios" el recuerdo de la muñeca encima de la cama, y tu amistad con los dueños.
El poco tiempo que viví en el Valuengo, para ir a la escuela, mi primo me llevaba "atada" a su mano para que no me escapara, era lo mio, pero al pasar por esa casa roja...mi maginacion volaba. Yo deje el pueblo en el 56 o 57. En los recuerdos, se me hace que jamás me fuí.

Un saludo.

Solo falta Scarlett O’Hara bajando por las escalinatas.

Con aquel vestido blanco de flores verdes, el lazo verde obscuro el gran lazada, y su cara de descarada seductora, mimosa, envolviendo a sus admiradores allí sentados, con los ojitosssssss verdes..... ¡Ay!

Cilandro, ha sido un comentario acertado, tiene una cierta similitud con la cada de Lo que el viento se llevó y..... de alguna forma, el viento se llevó muchas cosas de nuestro pueblo, una de ellas personajes que eran muy carismáticos, aunque yo no comulgara mucho con sus actitudes y forma de vida, pero mis padres me enseñaron siempre a respetar el escalón de cada cual, la única forma para que respeten el de uno.

Regatito, siempre he pensado que las palmeras son majestuosas, cuando se hacen grandes y se elevan tan rectas, como si retaran la ley de la gravedad, con ese tronco tan firme, tan poderoso, como debemos ser las personas, firmes y majestuosas en nuestra actitud en la vida

Por otra parte, comentaros que he presumido de pueblo allá donde he ido y me he encontrado a muchas personas de Cataluña que, camino de Portugal, y eligiendo NUESTRA RUTA CORTA, me han comentado el encanto de Valencia de Alcántara y sus gentes. Hace años se movía mucho dinero, mucho, mucho, digo "se movía", por supuesto no que todos disfrutaran de la forma de vida digna que merecían. No era corriente en aquellos años (juventud de mis padres y parte de la mía), que hubiera un cine y teatro precioso, cuatro o cinco bailes, pensiones estupendas como La Paloma, y cómo no, nuestra ACERA DEL AMOR para ligar. Tantas y tantas cosas que pondría, pero no quiero hacerme pesada y por otra parte se denuncia demasiado la edad que ya tengo (64)

..... y los que caigan, por mí, a por todas.

¡¡¡¡¡Mariaaaaaaaa!!!!!! vaya pitarras, mondongas, bacalaos..... etc que nos vamos a marcar este verano a la salud de los galenos,que para eso nos cuidan. Un besote, compañera, qué ganas tengo de verte . Qué ameneceres más lindos debes disfrutar desde ese puente encantado y qué envidia me das compañera. Tú sí que has debido vivir en primera línea la decrepitud de Villa Fátima. Besotes. Nívea.

...pues si NIVEA,si que he vivido esa decrepitud muy de cerca;solo que con una vision muy distinta a la tuya.Mis recuerdos ,vistos con los ojos de una niña,son tristes,pues en esa casa habia todo de lo que careciamos en la mia.Alli todo se celebraba a lo grande,grandes fiestas,caballos,pistas de tenis,piscinas,coches,etc...
Aun recuerdo que le preguntaba a mi padre que si los de villa fatima eran los mas ricos del pueblo,y mi padre,muy paciente,me decia que si,y en mi cabezade niña pensaba que porque no habia nacido yo en esa familia,si hubiera sido asi,tendria muchas muñecas,invitaria a mis amigas a bañarse en la piscina,tendria bicicleta,y sobre todo me podria motar en los columpios....siempre he visto esa casa atraves de una cancilla enorme,que jamas traspase,como me hubiera gustado verla por dentro,sentir que formaba parte de ella.Creo que ese sentimiento lo tubimos muchos niños que viviamos por aqui.
Hoy,con la cabeza de una mujer de 47 años,lo veo diferente,pues tambien se puede ser feliz sin tantas cosas,pues al fin todo aquello eran cosas materiales;y en mi casa nunca me falto lo mas importante,unos padres que se mataban por llevar la familia adelante,y mucho,pero que mucho cariño....
De villa fatima,lo mejor era cuki,una persona entrañable,sencilla y que todos los que la conocimos tenemos un grato recuerdo de ella.

Hola, María, entiendo lo que dices, por ello hago alusión a cierta forma de vida que no compartía, mis padres, sobre todo mi padre me enseño a ser una persona sencilla, respetuosa.... etc y no tenía motivos para otra cosa,porque mis antepasados no eran de la burquesía valenciana, aunque a Dios gracias no pasé necesidades.
Yo, con sinceridad, traté a Mary Tere, durante el bachiller éramos compañeras y por ello de mi cierta relación con los Carvajal, independientemente de ser o no pudientes, eran personas afables y educadas y ya lo ves, María, en esta vida hay que trabajar para ganarse el sustento, muchas familias de Valencia con grandes casonas,vivieron del cuento de sus antepasados y si no fuera ahora por la Seg. Social..... pues eso.

Te envio un privado con el téxto de un correo que he recibido hoy, es pos simple curiosidad y tú puedes creer o no lo que dicen en él.

Besotes compañera. Nívea.

Pues, siento contradeciros, pero a mi esas casas de Villa Fatima siempre me han parecido pelin horteras. Bueno, la segunda muy hortera.

Las que siempre me han gustado, del estilo de gran mansion en el cine de los años 40, son una que esta en la carretera, mas o menos enfrente de la Cruz de los Caidos y su vecina de arriba. Tampoco estaba mal la que esta por encima del Colegio de las Monjas. Esas si que eran (y supongo que lo seguiran siendo) casas...(como veis, la cabra siempre tira al monte, pues todas ellas estan por el Parque, zona donde pase mi infancia).

Fmanegas, estoy contigo, esas dos casas blancas tan señoriales, son las más bonitas. Yo tengo un gusto un tanto especial para las casas. De VILLA FATIMA, a mi me fascinaban sus palmeras, pero es porque ese árbol me "habla", pero tan oscura, y tan lejos de la carretera, siempre se me hacia "casa de miedo" Si hubiera sido color marfil y albero claro, la hubiera dulcificado.
Pero la casa mas bonita es "mi palacio", en esa casa, vista incluso desde fuera, no es señorial, es magestuosa, su estética, belleza, equilibrio entre portal y ventanas, rejas artísticas, balcón largo y con forma...
algo tiene, que siendo niña, me atraía tantísimo, que me sentaba en las escaleras de la Encarnacion, solo por vigilarlo, era "mi casa" me la pedí de niña, como se pide lo inalcazable, algo de lo que queremos siempre es nuestro.

Villa Fátima, como tantas y tantas vanidades, terminan por caer.

Fmanega, la que está por encima del colegio de las monjas tiene el balcón más alucinante del pueblo, y no por lo bonito (que también) aunque esté cascao, es por la luz que recoge. Me parece un rincón delicioso y además tiene mucho jardín. Siempre he fantaseado con esa casa.
Las de frente a la cruz son las dos maravillosas, yo conocí el interior de la que está rodeada de árboles (Regatito, en esta fue lo de la muñeca).

Otra casona magnífica es la de la curva del paseo ¡¡qué terreno!! ¡¡qué posibilidades tiene ese jardín!! ¡¡¡y qué preciosidad de casa!!! siempre la he tenido cerca y siempre me ha gustado.


Pero Villafátima me gusta más porque siempre ha estado ahí, como dice P.V.P., yo también he crecido viéndola desde la terraza de mi abuela, ya se encontraba en horas bajas por entonces pero siempre ha tenido ese aspecto de "Tara" de lo que el viento se llevó, y los que hemos tenido la suerte de ver los atardeceres recortados por su silueta lo podemos confirmar. Kuki era amiga de mi madre, y ¡que mujer! no sé si tendría algo de mala pero desde luego nunca se lo ví, fue de las personas más dulces y más simpáticas de mi infancia.

Lo que menos me gustaba de la casa eran esos dos perruchos negros zumbados cuasi salvajes - asesinos, me daban malísima espina, hasta el día en que mi tía se los encontró al volver del trabajo y uno casi le arranca un brazo, la pobre, ahora cualquier perro le hace apretar el culillo.

Y el pegote colorao que le hicieron a la villa al lado, estará hecho con las mejores intenciones, pero al dueño lo asesoraron faatal,lo único que tienen en común es el color, porque la verdad es que desmerece mucho la una a la otra. Por decirlo finamente...

Y "de mientras", yo sigo de alquiler...

Ahora he caido en la casa de al lado de las monjas.

Yo no la recordaba, se ve que no pasaba por esa acera, mas que nada, porque en esa acera estaba el Palacio de Justicia, siendo entonces la "SEDE" carcelaria, por la parte de atrás, y ya sabes el por qué le tenía yo tanto miedo a todo lo que era "injusticia".

En el año 08, en noviembre, me quedé mirándola, pues me recordaba esas quintas de Galicia, con las galerias encristalados y aún conservaba las flores que para mi son las acompañantes de las grandes mansiones, LA GLICICIA, (cada vez que veo una glicinia, no sé por qué, me acuerdo de Goyi). Pero lo que me "sacaba el ser ladronzuelo" eran los cakis, que caian en su abandono, con lo que me gustan a mi, además eran cakis de los buenos, no esos engendros de nueva generación que hay que comerlos con cuchillo, no eran los que te llenaban la boca de gelatina naranja, que había que "sorberlos" entonces se te llenaba la boca de "pecaossssssss" de lo rico que eran. Yo pregunté a no sé quien de quién era esa casa, y como suele contestar la gente de a pié: de unos ricos, es la contestación general.

Anoche me dieron las tantísimas leyendo el libro del Sr. Galavís, que me llevó a la historia de los que vivieron en la casa de Barrantes, "mi palacio..." y debo decir, que lo cuenta de un modo tan cercano, que era entrar en la Historia de un tiempo real...

Descubrí también la casa donde viví hasta los 4 años en Brecha, era tal cual se ve, justo la casa que nombra en la que desapareció el arco de la entrada, y las ventanas y todo, hay una farola encima.
Si esa casa hablara... ahí viviamos tres familias, en el bajo, en el zaguán, mi padre arreglaba zapatos, tocaba el acordeón, y en una habitación de ese mismo zaguán, estaba la habitación aquella que nombro en mis volandos, donde "se me apareciö un demonio". Era donde dormíamos todos los de mi familia, osea, matrimonio, yo y mi hermano recién nacido mas tarde. En la puerta de al lado vivia otra familia, creo que se les llamaba "los rompesquinas", eso lo indagué luego, solo recordaba de ellos una familia de mayores que comian tomate en ensalada con latas de sardinas, y yo me sentaba a su mesa como si fuera mi familia, arriba habia una habitacion que tambien la ocupaban ellos, pero tenian que pasar por una cocina que usaba mi madre, vamos, que es como si los vecinos mios de al lado tuvieran que pasar por mi salón para entrar en su casa !qué familiar¡.

Tenian un hobby o una profesion, hacian cigüeñas con los cuernos de toros o vacas, (no se si las vacas tienen cuernos) pero eran cuernos blancos y negros, y siempre estaban con cuernos en las manos... alguien los recordará, yo eso recuerdo de ellos. En una habitacion individual, vivia una señora mayor, que vestia de negro, y su puerta tenia una llave de esas grandotas, y yo jugaba a encerrarla...¡la pobre! encima no tenía ventana y en esa habitación hacía toda su vida.

Me ha hecho ilusión ver la fotografía de esa casa. Eran las TRASERAS del Baile Chimenea a mi ladito, y paradógicamente, de ahí a vivir enfrente del Balile Portugués. Es que mi vida ha sido un auténtico "BAILE" por los saltos que la vida me ha hecho dar...

Ya ves, de un palacio lleno de gente, de riqueza, de poderío, de belleza, de esmerada educación o formación,de tantas cosas...
la vida me lleva a la humilde casa llena de vida de vecinos, de compartir, de bien hacer,de artistas manuales, de la música del acordeón de mi padre donde bailábamos los que alli viviamos en el zaguán, de la pobreza y la incultura, creo que el único que sabia leer y escribir era mi padre, y por supuesto del escribiente de cartas amorosas de la vecindad...

Dos casas, dos vidas, y nunca olvidadas al menos por mí, y lo que dejo en el tintero de este aparato.

Ya ves, PVP, el pueblo, de punta a punta, y tu Rio Avid, bordeándonos a todos.

Un abrazo.

Parece que fué ayer cuando escribíamos estas cosas.

Pues a lo tontini, nos han pasao 3 años, una apisonadora, litros de agua y kilos de sol.
Y Villa Fátima sigue abandonada