Torrecilla de los Ángeles - Caceres

Ésta España que tenemos
agonizante y con llanto,
nadie espera la levante
por mucho que lo queramos.

Mucho tiempo lleva yá
aguantando su agonia,
y cada dia que pasa
en ell nadie confia.

Fueron tantos disparates
que contigo cometieron,
que no hay remedio ningunoç
de que levantes el vuelo.

De ti yá nada se espera
con la gente que Gobierna,
mientras no se marchen todos
y nos venga gente nueva.

Si Franco resucitara
y viera tanto destrozo,
nos diria con razón
de qué nos sirven los ojos.

Nos lo dijo muy bién dicho
a la hora de morir,
que España sin los Franquistas
poco tendria que decir.

Eso no lo digo yó,
que lo dicen muchos otros,
y lo dirán muchos más
que sepan abrir lo ojos.


jacintoP.

¡¡¡FRANCO, FRANCO, FRANCO!!!

Muy bien dicho, Don Jacinto, ni Democracia, ni Euro, ni zarandajas, Franco y punto. Con Franco estábamos mucho mejor, tenía que haber durado otros cuarenta años, o más. Seguiríamos siendo la Reserva Espiritual de Occidente, aislados del mundo, pero orgullosos de ello. Y no tendríamos tantos inmigrantes de todos los colores, tanta gente desagradable. Al revés, seríamos nosotros los que seguiríamos saliendo fuera de España con el traje raído y la maleta de cartón, a aceptar cualquier trabajo con el que mandar divisas a nuestro país, como buenos españoles. Y nuestras mujeres seguirían en su casa, cuidando de ella y de los hijos, como debe ser y manda nuestra tradición, nada de andar por ahí zascandileando y provocando a los hombres, como bien nos suele recordar usted en sus poesías. Y seguirían acudiendo a la Universidad sólo los elegidos, los hijos de las clases pudientes, como está mandao, que al populacho le das la mano y se cogen el brazo, y creen tener derechos, los muy egoístas. Y nada de televisiones privadas, con tanta guarrería, cotilleos, mujeres semidesnudas y noticias nacionales y del exterior que no deben ser conocidas por la gente de a pie, y hasta la nieta del gran hombre bailando, enseñando pierna y culo en un programa, contando sus intimidades más inconfesables en otros, y cobrando siempre un pastón por ello. Una sola televisión, y punto, y convenientemente controlada, que no es necesario que todo el personal se entere de lo que ocurre. Y la policía nacional de gris, que es un color precioso y acorde con el ideario del régimen, y la guardia civil con tricornio, bigotazo y la mano presta a sacudir a todo el que no se cuadre y salude a su paso, como ha de ser, y nada de policías autonómicas, que digo policías, ni siquiera autonomías, que c0ñ0, y a meter en cintura a esos indeseables de catalanes y vascongados. Y aquí a hablar español, para que nos entendamos todos, nada de dialectos. Y misa diaria, y mantilla y peineta en los actos públicos, y toros en todas las partes del país, y el NO-DO dando fe de nuestra idiosincrasia y nuestro amor al Caudillo, y a pagar en pesetas, tan bonitas, tan pequeñas, tan rubias, con la cara del Generalísimo grabada en ellas, y…….…….etc, etc, etc……….….tantas y tantas cosas agradables que ocurrían en aquellos buenos tiempos y que usted y yo tanto añoramos, como españoles de bien que somos. Él creyó dejar todo atado y bien atado, pero gente despreciable ha deshecho los sólidos nudos

Las imitaciones nunca llegan a alcanzar al original, y este gobierno que ahora tenemos, por más que se empeñe en retrotraernos a aquellos tiempos, no son más que una burda copia, sin el brío y la mano fuerte de nuestro querido Caudillo. Diga que sí, Don Jacinto, que tiene usted razón, lo que España necesita es que resucite Franco, y que volvamos al buen camino, a la moral, las buenas costumbres, a las cosas como Dios manda.

Y, si es posible, a ver si de paso me quitan de encima estos treinta y siete años que han pasado desde que el Altísimo nos privó de ese gran hombre. Con Franco éramos más jóvenes. Con Franco llovía más. Con Franco comíamos mejor……..pues entonces teníamos la dentadura completa.

¡¡¡¡ARRIBA ESPAÑA!!! ¡¡¡¡UNA, GRANDE Y LIBRE!!!! ¡¡¡¡¡VIVA FRANCO!!!!!

Gladiolo P


P.D. : Es una alegría comprobar que aún quedan españoles de bien como usted, Don Jacinto, que me hacen concebir la esperanza de que este país, antes llamado España, tiene futuro y aún puede salvarse de la ruina, económica y moral, a la que nos ha conducido tanta democracia, tanto rojerío y tanta desvergüenza. Siga usted así, no cambie.