Santibáñez el Bajo - Caceres

Vengo observando en las intervenciones de los foreros las críticas que se le dedican al “bueno” del alcalde acerca de lo que no hace o de lo que hace relativamente mal. Yo aconsejaría que los activos críticos, entre los que me incluso, volviéramos las tornas, cambiáramos nuestra actuación y nos convirtiéramos en asesores municipales.

¿No os dais cuenta que a lo mejor le cuesta trabajo pensar en proyectos de todos añorados? No seamos tan críticos y demos propuestas, que seguro que el alcalde está deseoso y encantado de recibirlas y llevarlas a cabo.

Yo rompo una lanza a favor del señor corregidor, porque me interesa que pase a la posteridad, y a la posteridad pasará cuando su nombre aparezca escrito en letras de molde. Vamos a procurar que eso sea así, y en breve todos podamos leer, al lado de otras autoridades provinciales o regionales, estas palabras: “Don Teófilo Marcial Hernández del Río”.

Eso será posible cuando alguna bella moza santibañeja recorra la cortina que oculta la placa erigida en recuerdo al arreglo de la carretera que va de Santibáñez a Ahigal. Eso, seguro que sí, ocurrirá de manera inmediata. Si el alcalde hasta ahora no ha empleado el esfuerzo en conseguir esta inversión en tal vía de comunicación es porque no se había dado cuenta de su mal estado. Pero a partir de ahora no habrá dudas de que pondrá todo su empeño en que esto sea factible aunque estemos en plena crisis. Preparaos para los aplausos y los vivas al alcalde, que a partir de ahora sabremos lo que es bueno.

¡Veis que poco cuesta dar ideas!

Por mi cuenta corren los clavos que sujeten las placas al pedestal. No olviden pasarme la factura.

Yo asé la manteca.

querido asador de la manteca, qué poquito te debes de pasar por nuestro pueblo, por todo lo que estás diciendo.
bastante tiene ya el sr. alcalde con el programa que prometió como para darle más ideas, cuando todavía no ha sido capaz de comenzar con lo suyo.
además le puedo asegurar que de las pocas veces que se le ve alternando con los paisanos del lugar, hay muchos que le sugieren muchas ideas y lo bueno que tiene es que te da MUY BUENA PALABRITA, y a todo dice que SÍ, pero luego hace lo que le da la gana.
porque eso sí, se le da muy bien decir " YO SOY EL ALCALDE Y SE HACE LO QUE YO DIGA".
Le puedo asegurar vecino ahigaleño que no admite crítica alguna y ojito con decirle algo que no le guste porque las represalias que después tiene son algo fuera de lo normal.

El verdadero problema de aquellos políticos que se creen tocados por la mano de Dios, a mayor o menor nivel, es que se consideran infalibles, autosuficientes y con un intelecto capacitado para no aceptar como válidas las opiniones que no salgan de su propio magín. Y esto me da que es lo que le ocurre al alcalde de Santibáñez el Bajo y de otros muchos “santibáñez” que hay repartidos por la geografía patria.

No me extraña, por consiguiente, que no llegue a ejecutar o les importen un bledo los proyectos que los socialistas de Santibáñez insertaron en su programa preelectoral de buenas intenciones. ¿Alguien me dice cuáles fueron de su propia cosecha? Incluso, aunque no fueran suyos, los dio por válidos por la sencilla razón de que aún la diestra del Todopoderoso no se había posado sobre su cocorota. Desde aquel momento solo sus ideas, puesto que participan de la infabilidad y de la inspiración divina, son aptas para llevarse a cabo. Consecuentemente, ahorraros el asesoramiento y el consejo de nuevos planes ejecutables, porque vuestras opiniones salen de mentes humanas y, por lo tanto, deben ser rechazadas. Es la lógica de aquellos políticos que se consideran nacidos con el destino de ser salvadores incomprendidos de la humanidad. Aquí la humanidad se traduce por Santibáñez el Bajo.

Ya en tiempos de mi abuelo, el mejor asador de manteca que hubo por estos territorios, existían estas cuestiones. Pero mi abuelo, que era listo donde los hubiera, encontró una solución para hacer valer sus opiniones. ¿Cómo se las arreglaba? Pues sencillamente aconsejando al político que no ejecutara determinada cuestión que mi abuelo deseaba. Como podéis imaginar, el político de marras por darle en las narices hacía todo lo contrario. De esa forma mi abuelo siempre se salía con las suyas. No está demás que siguierais el ejemplo de mi abuelo el asador de mantecas.

Es que los políticos tocados por la divinidad siempre fueron igual. Yo, antes del tractor, tuve un burro al que llamaba “Diputao” (nombre de político), y tenía la manía de hacer lo contrario de lo que le dijera. Si en un momento le saltaba con el “¡sooo!”, el animal arrancaba como un caballo andaluz, pero si le profería un “¡arre!” el burro se detenía como un rucio manchego. La cosa era llevar la contraria.

Pues eso, lo dicho: salud y buenos alimentos. Y recordarle al alcalde que no hay mal que cien años dure.

Yo asé la manteca.

Gracias, mantequero, por esa observación. Porque es verdad que en este mundo todos tienden a hacer lo contrario de lo que se le diga y los políticos no son menos. Voy a probar esta estrategia con don Marcial y a lo mejor me da resultado. Te contaré se he salido con el empleo.
Lo malo es que se dé cuenta el alcalde, y entonces comience a preguntarse cuando alguien la haga la sugerencia si lo que se le dice es para que lo haga o para que no lo haga. ¡Vaya un problema!
Saludo de este santibañejo, al que en la dehesa le robaron la merienda y le cagaron en las alforjas. Es que desde que quitaron el guarda en la dehesa ya no hay respeto por las cosas ajenas.

¿NOS PUEDES DECIR A ESTAS SANTIBAÑEJAS QUE ESTAMOS INTERESADAS POR TU PERSONA COMO TE LAS APAÑAS PARA ASAR TAN BIEN LA MANTECA? CON LO GRACIOSO QUE ERES SEGURO QUE TE LAS TRAES DE CALLE A MAS DE CUATRO. ¿PODIAMOS TOMARNOS CONTIGO UNAS CAÑAS ALGUN DOMINGO EN AHIGAL O CUANDO TU QUIERAS?

Amigas santibañejas, en lo de asar la manteca me considero un simple aprendiz de mi abuelo. ¡Si lo hubierais conocido! El era un auténtico doctor honoris causa, del que poco a poco fui recogiendo algunos truquillos. Yo no pasaba de un simple ignorante cuando me introduje en el oficio, hasta el punto de que la primera vez no se me ocurrió otra cosa que chupar un tizón engrasado por las gotas de manteca que escurrían de la parrilla. Aún conservo la cicatriz que la quemadura me produjo en la lengua, lo que a cada instante me hace recordar la sentencia de mi abuelo: “Para asar bien hay que aburarse”.

Hogaño he tenido poco vino, por decir algo. Pero seguro que en la próxima cosecha sí que sacaré algún que otro cántaro. Entonces os invitaré a mi casa, que me gusta más que en el bar, a que escanciéis el morapio. Y, lógicamente, tendré manteca para acompañamiento.

Un saludo para estas buenas amigas.

Yo asé la manteca.

GRACIAS POR LA INVITACIÓN PERO SE NOS HACE MUY TARDE ESPERAR PARA LA PROXIMA COSECHA, ¿NO PODRÍA SER ANTES AUNQUE SEA CON EL VINO DE LA FAMILIA DE LOS FEOS QUE DICEN QUE ES DE PRIMERA CALIDAD? A NOSOTRAS NOS GUSTA PAGAR A ESCOTE, EL CASO ES CONOCERNOS PORQUE DE VERDAD DE VERDAD DE VERDAD QUE ERES MUY GRACIOSO Y TENEMOS MUCHAS GANAS DE CONOCERTE Y ENTRE MAS PRONTO MEJOR Y AUNQUE SEA LA MANTECA LA PONEMOS NOSOTRAS, TANTO DE LA BLANCA COMO DE LA COLORÁ. DANOS ALGUNAS PISTAS DE "PA" QUE PARTE VIVES.

no teneis que buscar muy lejos es vuestro vecino,pensar en el pueblo quien tiene tanta licantina

NOSOTRAS NO ES QUE SEAMOS MUY LISTAS PERO ALGO ENTENDEMOS DE GRAFOLOGIA Y SABEMOS DE MUY BUENA TINTA QUE EL QUE ASA LA MANTECA ES DE AHIGAL, PALETO (DICHO SEA CON CARIÑO) DE BUENA CEPA PORQUE TAMBIÉN VEMOS QUE ESCRIBE EN EL FORO DE AHIGAL Y ESTA PERO QUE MUY PUESTO EN LAS COSAS DE AHIGAL Y ESO NO ES PROPIO DE NINGÚN VECINO NUESTRO. ¡¡ADELANTE ASADOR DE LA MANTECA, NOSOTRAS TE APOYAMOS Y TE APLAUDIMOS Y TENEMOS MUCHAS GANAS DE CONOCERTE PARA REIRNOS UN BUEN RATO CONTIGO¡¡ LO QUE SI HEMOS AVERIGUADO ES QUE EL QUE ENVIA LOS MENSAJES ANTERIORES, QUE SIEMPRE LOS COMIENZA CON LETRA MINUSCULA Y NO HACE SEPARACIÓN DESPUES DE LAS COMAS, ES ALGUIEN QUE SIN HABER NACIDO EN SANTIBAÑEZ VIVE EN SANTIBAÑEZ Y QUE ESTÁ RECIBIENDO "PALOS" EN ESTE FORO A DIESTRO Y A SINIESTRO; A LO MEJOR AHORA PARA DISIMULAR COMIENZA A DEJAR ESPACIOS DESPUES DE LAS COMAS Y A INICIAR LOS MENSAJES CON LETRA M MAYUSCULA. ¡¡A QUE TE HAS QUEDADO PASMADO !!?? AMIGO ASADOR DE LA MANTECA, TE QUEREMOS SEGUIR ESCUCHANDO Y QUE NOS TOMEMOS ESAS CAÑAS O VINOS EN AHIGAL, ¿PARA CUANDO LO DEJAMOS?

Amigo adivinador:

Mi abuelo poseía unas cuantas ovejas, por aquello de presumir de alguna ocupación y de entretenerse cuando no tenía entre manos asar manteca. No era pastor ni rabadán pero, ya digo, tenía varias ovejas que se mantenían a sus anchas en un prado por los caminos del Vicario, en término de Ahigal.

Como puedes imaginar, puesto que mi abuelo siempre estaba ocupado, yo era el encargado de conducirlas por la mañana hasta el pastizal y de ir a recogerlas cuando la tarde pardeaba. ¡Qué sorpresa me llevé una tarde de invierno cuando acudí para carearlas hasta el pueblo! Un perro cimarrón la había tomado con el minúsculo rebaño y había desorejado a dos de las mejores hembras.

Al regresar al pueblo mi abuelo estaba sentado plácidamente a la lumbre desempeñando su buen oficio de asador. Tras darme un trozo caliente de manteca y un vaso de morapio (que entonces los muchachos también catábamos el vino), me espetó:

-¿Qué tal veini hoy el ganáu?

Inmediatamente le referí lo que le había pasado a dos ovejas. Pero mi abuelo apenas se inmutó. Se levantó pausadamente del tajo de corchó y se acercó a los dos animales mutilados por la acción del perro asilvestrado. Y tan pausadamente como se levantara, tras mirarle las heridas, le dijo a las dos ovejas, cual si fueran seres de amplias entendederas:

-Ovejitas, que lo uniquitu que quieru es que Santa Lucía sos conservi la vista.

Ante estas palabras no pude por menos que preguntar:

-Agüelu, ¿cómo dici esu de Santa Lucía, si las ovejas están bien del visual? Lo que tienin de malu es que no tienin orejas.

Y mi abuelo:

-Por esu mismo. Tú imagínate que se l’estropean los ojus y no tienin orejas. ¿Antonces andi quieris que l’enganchi las gafas?

Esta relación sobre mi abuelo viene a cuento de tus dotes de pitoniso o pitonisa. Supongo que tendrás orejas para engancharte las gafa, porque las vas a necesitar, ya que Santa Lucía no te ha conservado la vista como debiera. Y es que no es tu fuerte el arte adivinatorio.

Un saludo.

Yo asé la manteca.