Santibáñez el Bajo - Caceres

Borrado por un Moderador.

¡Cuánta razón tienes, amigo Javier! Pero cada vez que se ha criticado a diferentes selecciones deportivas por la corrupción que anida en sus sedes, han salido no cientos sino miles de fanáticos gritando escandalosamente. Parece ser que en este país se admite todo, menos que se metan con su equipo favorito, por muy corrupto que sea y por muchos millones que se lleven sus jugadores mientras otra gente rebusca comida en los contenedores. Esto dice mucho sobre el país que tenemos y su paisanaje. Al igual que en la antigua Roma, gran parte de la gente aborregada se conforma con aquello de "panem et circenses": pan y circo (fútbol). Esos borregos son los que, en vez de ir a las manifestaciones a defender sus derechos, se quedan en su casa o en el bar viendo dar patadas a un balón. Después querrán que su papeleta se la resuelvan otros. Muchas veces son gente que no tiene dónde caerse muerta y encima hacen ostentación de banderas rojigualdas, que ellos llaman "la bandera española", en sus casas, en las pulseras de sus relojes o en sus camisetas y gorras. Y si llega el caso, votan al PP, traicionando a su clase social y lamiéndole el trasero a los poderosos.
Una ve todos los días esta mala película, muy común en muchos barrios obreros de esta ciudad donde resido, que no se diferencia gran cosa de lo que ocurre en otros pueblos, como el nuestro. Besitos.

Javata, te as equivocado en llamar gente aborregada a la gente que es aficionada a un deporte, y por eso te doy un punto negativo,y no comparto tu opinión.

Perdone usted, señor "Soy de pueblo" (yo también lo soy). No he llamado gente aborregada a la que tiene afición por un deporte. ¡Faltaría más! A una servidora, personalmente, le encanta la natación y el montañismo y no me considero una borrega. He dejado muy claro que borregos son los que no son capaces de defender sus derechos acudiendo a las correspondientes manifestaciones, pero en cambio se sientan tan a gusto en casa o en los bares a ver pegar patadas a un balón mientras los demás se desgañitan en las protestas, y, además, son incapaces de hacer la más mínima crítica a sus selecciones deportivas favoritas aunque estén corruptas y los jugadores se levanten cientos de millones al año, lo que es afrentoso cuando hay gente pasando hambre. Esos son los borregos, no las personas serias y responsables que tienen afición a un deporte. Más claro, agua. Besitos.