Santiago del Campo - Caceres

Muchas deben ser las versiones del origen la “tapa” en los bares, yo os dejo dos: Se cuenta que yendo el rey Alfonso XIII en viaje oficial a Cádiz, hace una parada con su séquito en un chiringuito de una playa, denominado “el Chato” (nombre originado y chungo en contraposición con la larga nariz que tenía su dueño), para descansar y reponer fuerzas del viaje. Pide una copa de vino para todos y cuando se la sirve, sopla un fuerte viento levantándose una nube de arena. El camarero acude rápidamente y tapa la copa del vino con unas lonchas de jamón. El rey se extraña por esta acción y el camarero le dice “que es para que no le entre la arena en la copa”. La idea le pareció tan buena al rey que mandó que les pusieran otras copas pero con “tapas”, aunque no haya viento.

También se cuenta que enfermo el rey Alfonso X “el Sabio” y desconociendo el médico su enfermedad, le recomienda que tome pequeñas cantidades de vino durante las comidas. El rey se recuperó y a partir de ese momento promulgó una ley que obligaba a las tabernas que en cada copa de vino dieran una porción de comida. “La tapa”.

Calurosos saludos.

Son leyendas que vienen al pelo.Por algo somos el país que
inventó el susodicho 'jamón'
Pero donde esté la sardina (pescado azul) que se quite el jamón
Al menos es lo que dicen los que de eso entienden.
No renuncies a unas buenas sardinas asadas, Cerro de las Vacas,
desde la distancia, un abrazo.

Sean de jamón o de sardinas o de cualquier otra cosa siempre viene bien un pinchino para acompañar una chatito de vino
SALUD Y SALUDOS