San Martín de Trevejo - Caceres

Tia Justita,regordeta,
de negro siempre vestida,
con su carita de asceta,
pura y casta,anacoreta,
religiosa convencida,
en su importante papel
en el correr de la Misa
en lucha contra Luzbel,
con cánticos de aguamiel
y ejerciendo de poetisa,
a la parroquia alegraba
en la Misa y la Novena
y todos juntos cantaban
y algunos hasta lloraban,
con su alegría o su pena.
Un día,que llegó el Prelado,
cantó con gran devoción
algo que tenía ensayado
y el Obispo oyó,asustado
que el Obispo es un ladrón.
El Prelado dió un respingo
y se quedó de una pieza
era misa de Domingo,
o sábado,no distingo..
y siguió reza que reza.
El Obispo es un ladrón
cantó Justita al Prelado,
pues nos robó el corazón......
(la oportuna aclaración
dejó al Obispo encantado)....

Fué real como la vida misma.Saludos.YA falta poco para despedirme.