Pizarro - Caceres

Un cura aficionado a la ornitología tenía doce pájaros.

Todos los días los soltaba para que volaran y éstos siempre regresaban a sus jaulas. Pero un día sólo regresaron once, así que el sacerdote, decidido, en la misa de 12 del domingo preguntó:
¿Quién tiene un pájaro?
Todos los hombres se levantaron.
No, no me expliqué bien. ¿Quién ha visto un pájaro?
Todas las mujeres se levantaron.
¡No, no! Lo que quiero decir es: ¿quién ha visto mi pájaro?

Todas las monjas se levantaron.

Moraleja: “APRENDA A PREGUNTAR CORRECTAMENTE”

Al Padre Pascual le estaban haciendo su cena de despedida por 25 años de trabajo en una Parroquia. Un político miembro de la comunidad fue invitado para dar un breve discurso. Como el político tardaba en llegar, el sacerdote decidió decir unas palabras él mismo para llenar el tiempo:

Mi primera impresión de la Parroquia la tuve con la primera confesión que me tocó escuchar. Pensé que me había enviado el Obispo a un lugar terrible, ya que la primera persona que se confesó me dijo que había robado un televisor, que les había robado dinero a sus padres, había robado también en la empresa donde trabajaba, además de tener aventuras sexuales con la esposa de su jefe. También en ocasiones se dedicaba al tráfico y a la venta de drogas. Y para finalizar, confesó que le había trasmitido una enfermedad venérea a su propia hermana. Me quedé asombrado, escandalizado y asustadísimo... Pero cuando transcurrió un tiempo, fui conociendo más a la gente y vi que no eran todos así, vi una parroquia llena de gente responsable, con valores, comprometida con su fe. Y así he vivido los 25 años más maravillosos de mi sacerdocio.

Justamente en este momento llegó el político, por lo que se le dio la palabra. Por supuesto, pidió disculpas por llegar tarde y empezó a hablar diciendo:

Nunca voy a olvidar el primer día que llegó el Padre a nuestra Parroquia... de hecho, tuve el honor de ser el primero que se confesó con él...

MORALEJA: no llegues tarde

Esta es otra anécdota de mi pueblo, pasaria en los años 50 ó 60, y esto fué lo que le ocurrió por no explicarse debidamente, el cual solo queria que su hijo entrase en el Cuerpo de la Guardia Civil:

Contaba el tio Pepe "el tranquilo" que estaba en el campo, ve a una pareja de la guardia civil cabalgando y se sube a un cerro para llamarles, haciéndoles señales y aspavientos para que le vieran, llega la pareja y les dice:

Verán ustedes, mi hijo es muy leido y "escribido", y quiere entrar en el Cuerpo de ustedes, y ha "echao" una "sustancia" para ver si le cogen, pero como no tiene quién se la menee... pues no le viene, a ver si ustedes que tienen buenas manos se la podian menear.

Sin duda al tio Pepe le salió una frase que quedó en la historia del pueblo, sin ir con intención alguna.


Saludos manchegos

Buenaaaaaaaaaas.

¿Y qué pasó, lo metieron o no?.

Buenas Perolo, el padre de este hombre les cayó en gracia a los guardias y lo rieron como una anécdota más, le ayudaron a dar los pasos necesarios para mandar la instancia al lugar adecuado, por lo tanto entró en la Guardia Civil sin problemas.

MORALEJA: Hay que tener amigos hasta en el Infierno, y si es cuestión de instancias, mejor que te la menee gente con buena mano, al final se salió con la suya y se la menearon los guardias (madre mia...lo que acabo de decir).

Saludos manchegos

Este tipo de amistades, siempre hay que "cuidarlas" mucho. Nunca se sabe si alguna vez hay que recurrir a ellos.

un saludo

No te quepa duda amigo Avicena, las amistades hay que tratar de conservarlas, nunca sabe uno quien te puede ayudar en un momento dado, posiblemente el que menos piensa uno. Mi lema siempre ha sido: "Haz bien y no mires a quien". De momento me ha ido bien en la vida aunque algún que otro revés me he llevado. Hay veces que alguien te pide algo que no está en tu mano el poderlo hacer y creen que no has querido hacerlo. Esos no son amigos, esos solo buscan tu amistad por interés.

Saludos cordiales.