Saludos, Te llamare M.r.a
A veces la vida nos hace pasar por unos momentos duros, que sin avisar se te presentan y no sabes cómo reaccionar. Espero que estas líneas que te escribo te reconforten.
No puedo darte soluciones a ese problemas que me comentas, ni tengo respuestas para tus dudas o temores, pero puedo escucharlas y buscarlas junto a ti.
No puedo evitar que sufras, solamente puedo darte mi mano para que te sujetes y no caigas.
No juzgo las decisiones que tomas en la vida, me limito a apoyarte, estimularte, y ayudarte si me lo pides.
No puedo evitar tus sufrimientos cuando una pena te parta el corazón, pero puedo llorar contigo y recoger los pedazos para reconstruirlo de nuevo.
Animo amiga, que ahora las lágrimas no te dejan ver nada, pero cuando se sequen veras que el sol sale cada mañana para todos.
Ten paciencia con todas las cosas, pero sobre todo contigo misma
Un abrazo para ti mi niña,
