Aldeanueva de la Vera - Caceres

Pepe Caillo fué una persona maravillosa, sensata, divertida y muy amigo de sus amigos. En mi casa sólo se guardan buenos recuerdos de él y de su mujer Carmen. Supo vivir sus años de jubilado alegremente, en El Coso , con sus amigos, todos muy buena gente. Acogieron a mi marido como uno más de ellos.

El hablar de Pepe es iluminarse la expresión, aflorar la sonrisa a la cara, sentirse uno en paz cuando lo recuerdas. Su mujer y sus hijos se tienen que sentir orgullosos de haber tenido a un marido y padre tan estupendo, de igual manera me siento yo por haberle conocido.

TERE TRANCON