Alcollarín - Caceres

EL AROMA DE LA SANTIDAD

Los aromas se mezclan. La penetrante y añeja madera de los bancos, el incienso y la cálida cera de las velas y cirios que iluminan la penumbra de la iglesia, crea una atmósfera espesa en un silencio, tan solo roto por el murmullo de las oraciones de los fieles. Este instante me trae recuerdos, me lleva a mi infancia, rememoro pasos, Via Crucis y procesiones ya perdidas. Me veo sentado junto al párroco, de frente a la feligresía, observo a mi madre, de rodillas. Reza devota y fervientemente por la salud delicada de mi hermano mediano. Guillermo está hinchado por la medicación, retiene líquidos y en breve, cuando su cuerpo haya realizado el cambio que necesita para aguantar una intervención quirúrgica de 12 horas, le abrirán el pecho de par en par y en el corazón doblado en tamaño, le implantarán dos válvulas que arreglará el problema que le causó la “fiebre reumática” cuando era tan solo un niño. Guillermo es tenaz, voluntarioso, responsable, estudioso y . . . qué otra cosa puede ser un joven que durante toda su infancia no ha podido jugar a nada en lo que se tenga que emplear físicamente. No podía correr. Un niño que no puede correr, que no puede saltar con sus amigos para disputar un juego con balón . . .
. . . Su perspectiva de la vida, tan particular, tan inducida a la resignación, le muestra un día el camino de la espiritualidad, concepción distinta de la vida, bien entendida desde el punto de vista cristiano.
Tras la operación, su nueva vida le lleva a los grupos juveniles de la parroquia del barrio donde recrean durante unos años la PASION al estilo de “FARÁNDULA”, pero con las tecnologías de hace 30 años. Pasó el tiempo y todo aquello se perdió, la representación, las procesiones, los pasos, no hubo continuidad. Hace 18 años que mi hermano mediano nos dejó. Tenía 33 años, mujer y una hija de 3. Aún resuena en mi cabeza el click, clack metálico de las válvulas, ese mismo sonido que de madrugada me despertaba como una pesadilla y que por contra, me decía que mi hermano todavía vivía.

SJV

Buenoa dias a todos y en especial para SJV.He leído esto que narras dos veces y no sabes la emoción que siento en estos momentos,es ¡impresionante! pero de una calidad humana arrolladora.La vida es así,llena de sufrisimientos,alegrías y de personas como tu hermano o mi padre que nos enseñan unas lecciones de coraje que son dignas de aprenderlas.

Estas cosas son en las que nos deberíamos fijar más,para entender las cosas de la vida,implicarnos un poco más con todo y no pasar de ellas simplemente por el echo de que no nos interesen,en todas las familias en todas las casas algún día nos toca algo de desgracia,entonces te das cuenta de muchas cosas.

SJV,la vida en una constante lucha y los que tenemos a nuestro alrededor que sufren enfermedades,son los que nos enseñan el verdadero sentido de la vida.Un abrazo muy fuerte y sigue así.

SJV,yo les digo a mis peques,que los abuelos son dos estrellas que están en el cielo y son las que más brillan,ten por seguro que tu hermano es otra estrella.

Hola SJV. Poco se puede decir. Poco se puede hablar después de leer esta historia. Más triste si cabe por ese niño de 3 años que se queda huérfano. ¡Cuántas cosas se habrá perdido de su padre! ¡Cuántos momentos os habréis, también, perdido vosotros...!
Cuando miras a tu alrededor y ves esta vida que nos han pintado de color carmesí y repletas de dulces y ambrosías; uno no repara en ese otro mundo que cruje en los hospitales, en muchas familias. Esos anhelos y esa esperanza hacia la VIDA.
He leído unas cuantas veces este relato, querido amigo, y no dejo de pensar en él cuando oigo las risas de mis hijas en medio de sus juegos.
Un abrazo

querido amigo SJV, creo saber perfectamente cual es el sonido que todavía recuerdas, de las válvulas, es como el tic-tac de un reloj.
Y me sumo, a JMJI y Peter, poco más se puede decir, después de leer ésto. Uno se queda sin palabras.
Pero, lo que hay detrás de tanto sufrimiento, és una persona que luchó , luchó muchísimo, y os dió a todos una enorme lección de lucha hasta el final.
Ese legado nos dejan todas aquellas personas que con tal dignidad dejan éste mundo, para sumarse a un mundo desconocido.Una lección que nunca se olvida, y que cuando las cosas supercificiales nos preocupan, o queremos buscar, donde no hay, nos hacen reflexionar.
Grácias amigo, por compartir tus sentimientos con todos , demuestra una vez más la clase de persona que tenemos ante nuestros ojos casi cada día.
UN ABRAZO FUERTE!!!!.

Querido Salva, no se si desgraciadamente o por fortuna, yo si que he escuchado ese sonido que describes. Al igual que tu, lo he tenido cerca en la persona de mi hermano. Tres cambios de vàlvulas y un infarto, pero por encima de todo eso muchas ganas de vivir y de amar a sus hijos y asu mujer.

Seguro que tu hermano tambien tenia ganas de vivir de estar cerca de su hijo, de seguir queriendo a su mujer... pero quien lo diria una fiebres reumaticas de pequeño terminaron llevandoselo, ami hermano tambien le viene de esas fiebres.

Cuanto debemos a nuestros hermanos y cuanto tenemos que darles, nos hacemos mayores y nos alejamos, cada una tiene su familia y sus hijos, pero ambos llevamos la misma sangre...

¿Como puedes decir que amas a tu projimo sino amas a tu hermano?

Salva te deso una Feliz Pascua de Resurrecciòn alli donde quiera que estes. Nosotros desde Alcollarin la viviremos juntos, verdad Puwill, JMJI, Peter.... y demas??

Buenas noches amigos. Gracias a todos por vuestro apoyo y comprensión, así pues entendereis que vivo la Semana Santa de una forma muy personal. Pienso mucho en lo que debieron pasar mis padres y cuanto sufrimiento y lágrimas debieron derramar. Sólo he contado brevemente el particular "Via Crucis" que vivió mi querido hermano. He querido mostrar nada más mi pesar sin profundizar, por la espiritualidad de estas fechas. No es depresión ni nada parecido. Solo reflexión, sentimiento y una conexión constante con los seres queridos, que como dije en otros comentarios, un día nos dejaron sin pedir permiso. Como dice JMJI son estrellas que siempre están ahí, acompañandonos en este camino y aguardando el momento de salir a nuestro encuentro. Su brillo nos da protección y cuando los miras siempre te hacen un guiño. Un abrazo a todos y Feliz Semana Santa.