Abertura - Caceres

EL CABRERO DE VILLAMESIAS:

"Pues señor, que en Villamesías (Cáceres) había una mujer que tenía un hijo cabrero que estaba medio tonto.
Cuando ya se hizo mozo, quiso la madre que su hijo fuese al pueblo de Abertura (Cáceres) en busca de novia. Por fin la buscó; llegó un domingo y la madre le mandó que fuese a ver a la novia y, como regalo, la llevase un jamón. Fué el mozo con él, y cuando llegó colgó el jamón en el aldabón de la puerta de la novia y se entró a ver a ésta, a la que dijo que la había traído un jamón, que había colgado en el aldabón de la puerta. Fueron a verle, y había desaparecido. La novia le dijo que parecía tonto, por haber colgado allí un jamón y que se lo llevase cualquiera que pasase por la calle.
Al día siguiente se marchó el novio para Villamesías y contó a su madre lo que le había pasado con el jamón. La madre le dijo que al otro día le daría dos quesos para que se los llevase, pero que tuviese cuidado no los fuese a perder.
Se los dió la madre, y al pasar por un río se juntó con dos hombres que iban también para Abertura los que le preguntaron que dónde iba y qué llevaba en las alforjas. Contestó él que iba a ver a su novia y que la llevaba dos quesos de oveja. Los hombres, al oírlo, se los quitaron.
Cuando llegó a casa de su novia la dijo que la traía dos quesos, pero que al pasar el río dos hombres se los habían quitado.
- ¡Pero cómo eres así, hombre; cómo te los has dejao quitar! -le dijo la novia.
- ¡Pues velay! -la contestó el cabrero.
Se marchó de nuevo a su pueblo; su madre, al enterarse, le riñó por haberse dejado quitar los quesos, y le dió una gallina con pollos, diciéndole:
- Mira, hijo: no te las dejes quitar. Si alguno se acerca y quiere quitártelos, le dices: ¡Jox, que pican!, y le das una guantá.
Llegó an cá la novia, puso la cesta allí, fué la …………."

Se trata de un cuento escrito en 1.944 por Marciano Curiel Merchan, en la entonces afamada revista "Cuentos Extremeños", del cual no encuentro digitalizado el final. Sé que incluso la Junta de Extremadura, lo ha incluido en algún libro de Texto. Pudiera ser que alguno de vosotros lo haya escuchado, leído, o tenga un hijo o hija, que lo haya tenido en algún libro de texto.
Besos.

Me pilla en un día más o menos desahogado y creo que el final era este.

Fue la vecina de la novia, tía Sebastiana, la que en aquel momento estaba sacando a las callejas las gallinas para que picotearan en los estercoleros, aquel día con un escobón las iba espantando con el gallo incluido. La que llevaba el cabrero la dejó dentro de la cesta en el suelo, mientras él se acercó a llamar a la puerta de la novia, la gallina salió al oir el alboroto y los pollinos detrás, la tía Sebastiana muy astuta no dijo ni "mu" con lo cual otra vez desapareció el regalo. La novia cabreada dijo que a la tercera va la vencida y lo mandó hacer puñetas, creo que al final se casó con una pironda poco más o menos que el.

¡Muy Buenos Sr. Acex, y muy agradecío!. Dichosos los ojos que le leen. Pero, dónde lo ha encontrado Vd. ¡O es que se lo sabía?.
Saludos.

Muchas gracias Sr. Acex por ocupar unos minutos de sus vacaciones y deleitarnos con el final de este maravilloso cuento y como no, muchas gracias al Sr. Coguta q esqu no paras guapo, igual te montas una sociedad,te escribes unos cuentos, como te vas por ahí a poner maulas; y si encima te pagas unas fantas....

Amarruky....Unnnnnnnnnnn, ya me ha dao una idea de lo que le voy a poner éste verano a las maulas, unas fantas (de naranja, de limón..)a ver si en una cae Vd. de una puñetera vez.

Aunque ahora que pienso, no sé si este final es de este cuento o de otro que se llamaba.....¡¡no me acuerdo¡¡

Buenas tardes sr Coguta.
Por supuesto que en su día lo leería, de encontrar nada, todo es memoria almacenada de ahí que a veces me haga dudar.

Un saludo.

Digna de admiración su memoria Sr. Acex. Ya me contará Vd. más sobre ese cuento, que tengo interés.
Saludos.