Un día en un pueblo apareció muerto un burro frente a la iglesia pero nadie lo recogía. A los días el cura muy molesto llama al alcalde y le dice: - Usted como alcalde por qué no manda que recojan ese burro. El alcalde le responde: - Y usted como buen cristiano debería darle una cristiana sepultura. A eso el cura responde: - Sí, pero como buen cristiano es también mi deber es avisar antes a sus familiares.