Sabadell - Barcelona

Hacienda vincula a un ex alto cargo de Pujol con la financiación ilegal de CDC a través del Palacio de la Música

Un informe de la Agencia Tributaria considera que una empresa de Marc Puig, actual director de Comunicación y Atención Ciudadana del Ayuntamiento de Barcelona, y ex secretario general de Comunicación de la Generalidad, intermedió para hacer llegar a CDC comisiones ilegales a cambio de la adjudicación de obras públicas a la constructora Ferrovial.

Jueves, 20 de septiembre de 2012 | 09:10

Marc Puig Guàrdia, secretario general de Comunicación de la Generalidad durante la última etapa de Jordi Pujol al frente del Gobierno autonómico (2003-2004) y actual director de Comunicación y Atención Ciudadana del Ayuntamiento de Barcelona, enmascaró parte del desvío de fondos del Palacio de la Música a Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) a través de una empresa de publicidad, según concluye un informe de la Agencia Tributaria.

La investigación ha detectado dos nuevas empresas vinculadas a la trama de financiación ilegal de CDC, a través de la institución musical, a cambio de adjudicaciones a la constructora Ferrovial. Una de ellas es Emocional Base S.L., creada y administrada por Puig entre 2004 y 2008; la otra, Marc Martí Publiciutat.

En concreto, el Palacio de la Música ingresó en 2006 un total de 59.975 euros en una cuenta corriente de Emocional Base que, según los técnicos de la Agencia Tributaria, constituyó una forma de pago a un tal ‘Daniel’, identificado como Daniel Osàcar, ex tesorero de CDC e imputado en el proceso. Mientras que el desvío a través de Marc Martí Publiciutat fue de 87.681 euros en 2006 y 115.563 euros en 2007.

Cambalache de cargos y favores

Puig, que sustituyó a David Madí en 2003 como responsable de Comunicación de la Generalidad por encargo del entonces consejero Jefe, Artur Mas, ha negado las acusaciones y ha asegurado que la cantidad facturada corresponde a un trabajo llevado a cabo para el Palacio de la Música “con absoluta profesionalidad” sobre posicionamiento estratégico y posición de marcas.

Por otra parte, en Emocional Base, que tuvo entre sus clientes a CDC, trabajó entre 2006 y 2008 como responsable de cuentas la hija de Daniel Osàcar, Mònica, quien poco después de conocerse la imputación de su padre en la presunta financiación ilegal de CDC -y a la vez que la cúpula de la formación nacionalista cerraba filas en torno a él- fue nombrada responsable de Publicidad Institucional de la Generalidad.

Mònica Osàcar también había trabajado con Puig cuando este estuvo al frente de la dirección general de Difusión de la Generalidad (2001-2003). Puig, además, ha sido consejero de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA) entre 2006 y 2011 a designación de CiU.

Fianza de 3,3 millones de euros a CDC

El juez encargado del caso Palacio de la Música, Josep Maria Pijuan, impuso el pasado mes de julio una fianza de 3,3 millones de euros a CDC por considerarla ‘responsable civil, como partícipe a título lucrativo’ del desfalco de la entidad musical. Una cantidad que la formación nacionalista tuvo que abonar para evitar el embargo de sus bienes, pese a que atribuyó la orden del juez a un ataque del ‘españolismo intransigente’.

Pijuan detectó indicios de que, entre 2002 y 2008, CDC recibió fondos del Orfeón Catalá por valor de 2,3 millones de euros a través de los entonces tesoreros del partido, Carles Torrent -ya fallecido- y el citado Daniel Osàcar, y otro millón de euros a través de las empresas de buzoneo New Letter, Letter Graphic y Mail Rent. Una lista de empresas sospechosas de colaborar en la financiación ilegal de CDC a la que ahora se sumarían Emocional Base y Marc Martí Publiciutat.

Diez millones sin encontrar por la falta de colaboración de los bancos

El informe de la Agencia Tributaria cifra en 23,4 millones de euros el balance definitivo del expolio al Palacio de la Música perpetrado por los que fueron sus máximos dirigentes, Fèlix Millet y Jordi Montull. De ellos, 4,4 millones se desviaron mediante pagos a los ex tesoreros de CDC, y otros nueve millones se los repartieron Millet y Montull, incluyendo el pago de múltiples viajes por todo el mundo.

El juez todavía no ha conseguido averiguar el destino de los diez millones restantes debido a que, pese a que la investigación policial ha seguido el rastro de los cheques pagados en efectivo por ventanilla, diversas entidades bancarias (especialmente la antigua Caixa Catalunya) se han negado a identificar a las personas que los cobraron.

https://ww.vozbcn.com/2012/09/20/126694/cargo-pujol-financiacion-cdc/