Premià de Mar - Barcelona

Veinte interventores de Montilla se van a un hotel de lujo después del recorte

Clases Medias. 15 de junio de 2010.

Sólo 24 horas después de aprobarse el «tijeretazo» catalán, sus diseñadores, es decir, el cuerpo de interventores de la Generalitat, se fueron a un hotel de lujo en el corazón de Cataluña donde pasaron dos días y comieron en el restaurante de una fundación de Ferran Adrià. Según ha podido saber ABC, la comitiva pernoctó los días 2 y 3 de junio en Món Sant Benet, un complejo cultural y de ocio situado a pocos kilómetros de Sant Fruitós de Bages (Barcelona) y cuyo principal reclamo es un monasterio medieval. Este recinto dispone de un hotel de cuatro estrellas con 78 habitaciones cuyo precio medio asciende a cien euros la noche.


Fuentes de la Consejería de Economía de la Generalitat, de la que depende el cuerpo de interventores, confirmaron a este diario esa estancia en Món Sant Benet y precisaron que el grupo estaba formado por una veintena de interventores. Explicaron que este tipo de salidas tienen lugar anualmente desde hace 17 años y se trata de jornadas de trabajo en la que los asistentes actualizan sus conocimientos, intensifican su coordinación —cada consejería del Gobierno catalán dispone de un interventor— y abordan cuestiones de actualidad. Los técnicos, añaden estas fuentes, suelen invitar a expertos en su materia y, en esta ocasión, uno de los asistentes fue un responsable de la Oficina Nacional de Auditoría. La situación de crisis económica y los recortes aplicados por las administraciones protagonizaron los debates. Las sesiones se celebraron de nueve de la mañana a ocho de la tarde.

Al parecer, los interventores solían acudir a un hotel del municipio costero de Sitges (Barcelona) con el que la Generalitat tenía suscrito un convenio, pero desde hace unos años, han optado por este remodelado complejo, cuyo hotel imita a los claustros antiguos y dispone de un jardín interior de 4000 metros cuadrados. Món Sant Benet cuenta con dos restaurantes, uno de ellos de autor con una estrella Michelin. Sin embargo, parece ser que los interventores visitaron la Fundación Alicia, centro de investigación gastronómico situado a 40 kilómetros del monasterio, y que cuenta con el asesoramiento del cocinero Ferran Adrià.
Todo esto se producía un día después de que el Gobierno catalán aprobara la segunda fase de su plan de recortes, que incluía la congelación de inversiones, la supresión o fusión de 63 empresas públicas y un ajuste de plantillas, consistente en la eliminación del 5% de los altos cargos. Asimismo, el Ejecutivo de José Montilla puso las bases del aumento del IRPF para las rentas de más de 120.000 euros. Entre los funciones de los interventores de la Generalitat figura precisamente la fiscalización de todos los actos del Ejecutivo catalán de carácter económico, es decir, que este cuerpo de auditores fue el encargado «de facto» de diseñar ese «tijeretazo» que tanto ha indignado al funcionariado público.
Castells, en entredicho
Se da la circunstancia, además, que los interventores dependen de un departamento actualmente en el punto de mira, el de Economía, dirigido por Antoni Castells, que se ha visto salpicado por el caso del expolio del Palau de la Música. Anteayer, la Fiscalía de Barcelona presentó una querella en la que considera irregular la actuación de la Generalitat y del Ayuntamiento de Barcelona en una recalificación de terrenos destinados a la construcción de un hotel junto al Palau. El Ministerio Público ya ha anunciado que pedirá al juez que cite a declarar a Castells, quien ayer defendió su actuación en esta operación, supuestamente pactada con Félix Millet, principal implicado. El próximo lunes se producirán las primeras comparecencias en la comisión de investigación parlamentaria sobre el «caso Palau». Está previsto que acuda el Interventor general de la Generalitat, Josep Maria Portabella.

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