Navàs - Barcelona

Denuncian ante la Delegación del Gobierno en Cataluña adoctrinamiento nacionalista en los colegios públicos

Un centro público de Navás (Barcelona) exhibe dos pancartas con ‘esteladas’ para protestar contra el bilingüismo escolar. El denunciante considera que esta acción ‘vulnera el derecho a la libertad ideológica’ de los alumnos.

Jueves, 13 de junio de 2013 | 18:14

Módulos prefabricados de la Escuela Instituto San Jordi de Navás (Barcelona), luciendo una pancarta con ‘esteladas’ (foto: institutescolasantjordi.blogspot.com.es).

La exhibición impune de símbolos independentistas en los espacios públicos es una constante en Cataluña, y forma parte de la estrategia del nacionalismo contra la que pocos se atreven a protestar por miedo a ser señalados. La escuela es uno de los lugares donde esa estrategia se ha aplicado con más intensidad en los últimos años.

Como muestra, basta con acudir a la Escuela Instituto San Jordi, un centro dependiente de la Generalidad situado en Navás (Barcelona), donde desde febrero pasado dos grandes pancartas cuelgan de las fachadas de dos edificios del complejo con el mensaje ‘¡La escuela en catalán ahora y siempre!’ flanqueado por dos esteladas.

La página web del centro escolar señala que la decisión de colocar las ‘pancartas reivindicativas’ se tomó en el consejo escolar del centro por unanimidad, ‘como protesta a los ataques al modelo de inmersión lingüística que tan buenos resultados ha dado en los últimos años’, y su texto ‘lo ha decidido el equipo de maestros y profesores’. La web también recoge diversas fotografías de alumnos de Primaria y de Secundaria posando ante los murales.

Denuncia ante la Delegación del Gobierno en Cataluña
Fachada del edificio principal de la Escuela Instituto San Jordi de Navás (Barcelona), luciendo una pancarta con ‘esteladas’ (foto: institutescolasantjordi.blogspot.com.es).

Fachada del edificio principal de la Escuela Instituto San Jordi de Navás (Barcelona), luciendo una pancarta con ‘esteladas’ (foto: institutescolasantjordi.blogspot.com.es).

Sin embargo, no todo el mundo se queda de brazos cruzados ante el adoctrinamiento de los escolares catalanes. Este miércoles, el sindicalista Manuel Aguilella, conocido por sus actuaciones en defensa del bilingüismo en el sistema educativo catalán, ha presentado una denuncia ante la Delegación del Gobierno en Cataluña trasladándole estos hechos e instándole a actuar para que se retiren las banderas secesionistas de la fachada de la Escuela Instituto San Jordi.

En su escrito, al que ha tenido acceso LA VOZ DE BARCELONA, Aguilella advierte de que la exhibición de banderas partidistas en un edificio público ‘vulnera el derecho a la libertad ideológica’, algo que todavía es más grave en un colegio, puesto que los niños se encuentran en un momento de ‘formación y generación de sistemas de valores’.

‘Es una clara manipulación dirigida a hacer proselitismo entre los más pequeños, extendiendo así y garantizando en generaciones futuras el mantenimiento de estos principios políticos’, añade la denuncia, que compara la exposición de las esteladas con la ostentación de crucifijos u otros símbolos religiosos o políticos, con el objetivo de conseguir la ‘alienación mental’ de los niños.

Por último, recuerda que según la Ley Orgánica del Derecho a la Educación, los alumnos tienen derecho ‘a que se respete su libertad de conciencia, sus convicciones religiosas y sus convicciones morales, de acuerdo con la Constitución’.

Utilización y adoctrinamiento de los escolares

La exhibición de símbolos independentistas en los centros escolares públicos de Cataluña es frecuente. También es habitual el adoctrinamiento de los alumnos en la ideología nacionalista. Basta con recordar la promoción de los referendos secesionistas organizados por entidades privadas entre 2009 y 2011 que se realizó en institutos públicos (incluyendo tertulias, charlas informativas y presentaciones en horario lectivo). En algunos casos, incluso se llegaron a celebrar referendos independentistas en los propios centros escolares, con la participación de menores de edad durante su horario escolar.

El famoso programa de una televisión local de la zona del Ebro en el que, hace unos meses, preguntaban a los niños sobre una hipotética secesión de Cataluña es otro ejemplo de lo que las formaciones políticas no nacionalistas denuncian como pedagogía del odio en las escuelas públicas catalanas.

También es usual la realización de actos contra el uso del español por parte de Plataforma per la Llengua en diversos colegios públicos con el apoyo de la dirección de dichos centros y con el aval de la Consejería de Enseñanza. Así como la negativa de algunos colegios e institutos a mantener el Doce de Octubre como día festivo ‘por coherencia con el momento de construcción nacional’.

Y es que, la propia Consejera de Enseñanza, Irene Rigau, ha reconocido que el objetivo de la escuela pública es “catalanizar” y “generar la historia”. Así lo hizo durante el acto de clausura del curso escolar celebrado en julio de 2011:

“Solo mediante la escolarización podremos realmente catalanizar, hacer miembros de pleno derecho, tener sentido de pertenencia a nuestro país, a los hijos de los que han venido de fuera. [...] La escuela pública funde diferentes grupos étnicos en un solo pueblo; cuando lo podamos mirar a cierta distancia, quedaremos admirados y orgullosos del trabajo hecho. [El ejemplo más evidente es] cómo catalanizamos el sistema educativo. [...] Si Cataluña es como es, siendo una nación sin Estado, y mantiene su lengua, cultura e idiosincrasia, es gracias al hecho de que siempre ha creído en la escuela, y de generación en generación nos hemos traspasado lo que está implícito en la educación, que es traspasar la tradición y generar la historia”.

https://ww.vozbcn.com/2013/06/13/141118/adoctrinamiento-nacionalista-colegios-publicos/