Reencuentro. Buenas tardes, zahiner@s: Hoy ha sido un día muy especial para mí. Me he encontrado con una vieja amiga (que no una amiga vieja) a la que no veía desde hace más de año y medio. Nos hemos citado en la estación del tren -siempre me han gustado las estaciones de tren y autobús- y, como cada vez que nos vemos, ha fluido entre nosotros el cariño que sentimos porque es mutuo y la franqueza y sinceridad que me sale del alma cuando miro a los ojos a alguien que no es como yo, que nunca lo fue, que ha llevado una vida muy distinta a la mía y con la que, sin embargo, puedo hablar sin tapujos, libremente, en un lenguaje llano porque nuestra relación no admite otro. En el pasado me ayudó a salir de un bache importante y fue sorprendente para mí porque jamás lo hubiese esperado de una persona como ella. En efecto: no la conocía. En ocasiones, sobretodo cuando estas son malas, encontramos en nuestro camino a muchos seres humanos indiferentes a nuestro sufrimiento; golpecitos sinceros y consoladores de amigos que te quieren pero que no pueden hacer absolutamente nada. Y entonces topas con una extraña con la que no tienes nada en común y te ofrece su ayuda sin pedirte nada a cambio. Es curioso pero es a la única mujer a la que he oído decir esto: "la voluntad es la que nos saca y nos mete en todos los fregaos de la vida y es muy importante el honor". Felices Fiestas para tod@s y un año nuevo cargado de todas las cosas buenas que os merecéis. |