Zahínos - Badajoz

Tengo edad suficiente para no consentir que me zarandeen como una marioneta los instintos egoistas. Por eso no me enfado con mi suerte presente o futura. No quiero desaparecer gruñendo sino agradecido por mi larga edad y por todo lo que la vida me ha dado.

Adrian, ¿por qué destacas siempre tu edad?
¿Los instintos egoistas no forman parte de la supervivencia?
El que gruñe, si es su caracter y su forma de ser ¿no es feliz a su modo?
¿Estar agradecido por la edad es suficiente? o ¿estar agradecido por haber vivido como uno quiere vivir aunque tenga 10 años no es mejor?

Me molan tus reflexiones y pienso en ello. En ocasiones he descansado leyendo tus frases, pero amigo Adrián, la vida de todos no siempre es igual y tus experiencias puede que no sean las de otros, ya me gustaria tener tu visión y ya me gustaria que tu tivieses mis experiencias

Se coge de aqui y de alla y si....quedarse con lo mejor para uno es lo mas inteligente,,aunque lo que es bueno para uno puede que perjudique a otro...

Mirla

Buenas madrugadas, Mirla.
No es que destaque siempre mi edad, es que no puedo olvidarla a causa de los medicamentos que tomo cada día y de que a veces, mis nietos tienen que colgarme los mensajes porque me lloran los ojos.
Gruñir no forma parte, en mi opinión, de ningún rasgo característico del ser humano: gruñen los animales, y algunas personas que hacen de ello una amenaza para sus semejantes. A nadie le gusta escuchar gruñidos, ni tan siquiera a los que gruñen.
Los instintos egoistas no forman parte de la supervivencia, pueden ayudar a sobrevivir en momentos críticos, pero son puro egoismo; son un yo superlativo que acaba por pudrir nuestra parte más humana.
Estoy agradecido a los años que cumplo porque me han dado la oportunidad de seguir aprendiendo y creciendo como individuo.
Te agradezco tus palabras y si con ellas descansas a veces, me alegro de ello.
Te aseguro que no te gustaría pasar por las experiencias por las que yo he pasado; y estoy de acuerdo contigo en que la vida de cada cual es muy diferente y que se pilla de aquí y de allá. SIn embargo, Mirla, lo bueno para mí, no tiene un valor positivo si te perjudica a ti. Quizá con estas palabras volvamos al egoismo.
Si lo bueno para mí te perjudica, y aun así, lo llevo a cabo, es que estoy pasando por encima de ti, y eso ni es bueno para ti ni para mí ni para nadie.
Supongo que tu edad es menor que la mía, pero eso no me da sobre ti ninguna ventaja. He conocido a adolescentes con mucho más alcance del que yo todavía no tengo.
No siempre vivimos de la manera que queremos vivir, pero hay que arriesgarse a vivir como queremos, y no resignarse a vivir de la manera que quieren los demás que vivamos.
Particularmente, he arriesgado mucho para vivir como quiero vivir, porque así lo quise. No podemos esperar a que las cosas importantes nos sucedan por arte de magia o con la ayuda de otros/as. En ocasiones estamos solos ante las circunstancias y siempre solos ante nuestras decisiones. En eso radica todo.
Adrián.

Cuando comenzo la peregrinación al camino de santiago, habia un objetivo en común, es probable que cada uno tuviese una información distinta, pero el objetivo era el mismo, llegar, porque si se llegaba se habia conseguido llegar al fin, es decir, alli terminaba la incetidumbra del sin fin.
cada dia, en cada uno de nosotros hay un plan, o para aqui o para alla, vamos en linea recta o en circulo, la linea recta puede ser infinita y el circulo igual, podemos decidir parar y descansar para poder seguir o parar y dejar de vivir sin morir.
mañana igual me levanto y decido matar a 25 o dar toda mi fortuna a quien quiera, se puede jugar con unos mismo y manipular el cerebro solo con leer a tao y converncerse que es lo apropiado, o puedes dejar tu trabajo tu casa e irte a recorrer el mundo.
tenemos la libertad de hacer con nuestra mente lo que nos plazca, pero sabemos que no siempre conviene hacerlo, hay que ser prudentes para no caer en la desgracia o podemos ser valientes y arriesgar a pesar de que pueda haber consecuencias.
en realidad no somos nada en especial, solo estamos interpretando un papel en el que unas veces se siente y otras no.
Mirla

Adrian, siento una curiosidad. No sé si te gustará satisfacerla, pero todos los curas secularizados que he conocido, ninguno deja de sentirse cura. El mito y el rito les imprime caracter, se creen si no por encima al margen de la sociedad, si no superiores si distintos. Pero cuando se les pregunta por qué un dia aceptaron entrar en la iglesia, no saben contestar y si se les pregunta por qué la abandonaron su explicaciones siempre son vanales y vagas. Aquí desde el anonimato, uno registrado y otros sin registrar, creo que es una oportunidad para que nos lo expliques.
Yo nunca me vi con fuerzas para llegar a teología, renunciar a mis pasiones de hombre, nunca el amor a ningún Dios me pareció obstáculo para amar a las personas y entregarme a ellas.
En cambio muchos curas de los que se ordenaban a principio y mediados de los setenta han abandonado los hábitos. Reconozco que entonces era muy goloso lo de ordenarse sacerdote, era mucha la influencia social y muchos los privilegios que gozaban los sacerdotes y sus familias. La iglesia era la depositaria del bien y del mal, el fiel de la balanza. Los capellanes, sanitarios y militares, ejercían más de avalistas de conciencia y de recomendaciones que cualquier otra función evangelica que pregonaran. Cualquiera que haya hecho la mili sabe las ventajas que tenía hacerse monaguillo. El sacerdote era mucho más que cualquier autoridad.
A veces noto en tus escritos esa nostalgia.
Un saludo y por favor no dejes de escribir. Espero que ninguna de mis observaciones te moleste, nada más lejos de mi intención, y si acaso alguna te incomoda, te pido anticipadas disculpas.

Buenos días, 754.
Es cierto, al menos en mi caso: cuando se es cura una vez, aunque hayas dejado el alzacuellos, siempre eres cura. Para la Iglesia misma no dejas de serlo.
Lo que no se cumple en mi caso es el sentirme diferente y al margen de la sociedad o por encima de ella. Cuando ejercía mi ministerio, además de estudiar teología, fui siempre un amante del conocimiento que me llevó a los clásicos de la filosofía, de la psicología y de la antropología.
Todo me parecía poco para ayudar a quienes acudían a mí en demanda de consuelo, de consejo o simplemente de alguien que pudiese escucharles sin que sintieran el temor de ser juzgados o despreciados. Al fin y al cabo entre nosotros había algo muy importante: el secreto de confesión. No sé qué motivos tuvieron otros sacerdotes para abandonar la Iglesia aunque, como te decía arriba, la Iglesia nunca nos abandone.
Estoy firmemente convencido de que ninguno que lo haya hecho tuviese motivos banales, frívolos o sexuales. Detrás de cada hombre hay una historia buena o mala, justa o injusta y es ella la que dicta gran parte de sus pasos.
A menudo me asaltaban las dudas sobre mí mismo y el papel que desempeñaba en el Ejército. Hace 30 años abundaban las "deserciones", pero yo me adelanté en algo más de una década con un doble carácter: religioso y castrense. Mi razón personal fue enamorarme y en ese preciso instante ya no quise seguir siendo cura ni militar.
Para mi familia no supuso ningún disgusto, pues siempre quisieron mi felicidad y, al encontrarla y traerla a casa, me vi no sólo aceptado, sino rodeado del amor y del cariño que siempre hubo entre nosotros. Atrás quedaron los años de zozobra, de campaña y de todo aquello que probablemente tú sólo escucharías en la mili.
Mis tiempos de cura y más tarde de capellán, fueron duros. Es verdad que se me presuponía autoridad moral, pero eso también se hacía con el soldado: se le presuponía el valor hasta que lo demostraba en combate.
Quizá sean los años y- no la nostalgia de los ritos o de la autoridad que tenía- los que me hacen hablar como un "cura".
No sólo no me molestan tus observaciones, sino que te doy las gracias
por hacerme reflexionar hoy. No te preocupes, seguiré escribiendo en el foro. Si a veces no respondo no es porque me sienta molesto o enojado con alguno/a de los foreros/as: sencillamente o no puedo y ¿por qué no decirlo? o no quiero (no estoy para foros en ese momento).
En ocasiones me hacen preguntas a las que no puedo responder porque quien me pregunta a mí, antes debería preguntarse a sí mismo/a, razonar y tratar de quererse, de aceptarse un poco.
No pidas disculpas. Un saludo afectuoso.

Estaba un sacerdote conduciendo hacia su parroquia,cuando se encuentra con una monja en la carretera, para el coche y dice:
.- Hermana, si quiere puedo acercarla al convento.
Ella sube al coche y se sienta en el lado del copiloto. Cruza las piernas, y el habito se le abre un poquito, dejando a la vista parte de
sus piernas.
El sacerdote mira de reojo y sigue conduciendo, pero tras un par de kilómetros no puede contenerse y acaricia la pierna de la monja.
.- Padre, acuérdese del Salmo 129 (dice la monja).
.- Disculpe Hermana (contesta el sacerdote avergonzado).
Unos minutos mas tarde el cura vuelve a echar mano a las piernas de la monja y ella vuelve a decir:
.- Padre, por favor, acuérdese del Salmo 129.
.- Lo siento de nuevo (vuelve a contestar), pero la carne es débil, discúlpeme.
Minutos después el cura deja a la monja en su convento y cuando llega a su parroquia corre rápidamente hacia su Biblia, nervioso busca el Salmo 129 y lee:
.- Seguid buscando y allí arriba encontrareis la Gloria.

Muy bueno el chiste.

Dónde has andado? Se te ha echado de menos, amigo!!!!

Buenas tardes. He estado una semana de vacaciones con mis nietos. En ningún momento temí bajarme a hacer mis necesidades en una gasolinera y que me dejasen allí pinchado. Son de fiar. A finales de agosto iré a Vigo para ver al pequeño.

Ellos bien saben la joya que tienen por abuelo, no creo que quieran desprenderse de tí ni a punta de pistola. Un abrazo.

Hola, crmatos67:
Te agradezco tus palabras. Y son casi un aval de que no me ocurrirá nada semejante.
Cuando tenía veinte años y faltaba menos de un año para que finalizase la Segunda Guerra Mundial, en Agosto, Alemania rompía relaciones diplomáticas con Turquía; Eslovaquia se rebelaba contra las autoridades pro-alemanas ante el avance de las tropas soviéticas.
Estos hechos sucedían en mis años de seminario, pero claro, no se podía hablar de ello y ni tan siquiera pensarlo. Más tarde, en Africa, viví la desaparición de uno de los protagonistas más relevantes del Alzamiento: Juan Yagüe, que fue durante años nombrado en los sábados legionarios.
Esto de la memoria es la hostia.

Un saludo afectuoso. Que pases un buen domingo.

muy interesante lo suyo, viejo, pareces una enciclopedia del siglo pasado.

Adrián no será nunca viejo, porque tiene un espíritu que muchos de tu quita lo quisieran, incluido tú!!!!

Buenas tardes.
Creo que te cundió poco el ratito que dejé libre el ordenador, Adriancito...
¡cuánto le gusta gamberrear a esta juventud!

Buenas tardes, crmatos67:
Estoy convencido de que el mensaje anterior es de mi nieto que, precisamente es el que más disfruta con las batallitas del abuelo. No hay que tomarlo en serio.
Gracias por la opinión que tienes de mí.
Esta mañana me he dado una vuelta por el polígono que hay a unos 200 metros de nuestra casa y he visto muchas empresas cerradas, vendiéndose las naves o alquilándose las oficinas... Sin embargo había otras abiertas, a pleno rendimiento. Es una esperanza. En todas partes cuecen habas. Este siglo XXI estará lleno de sorpresas, y esperemos que sean buenas. A veces, miro al mundo y me aterra ver 35 guerras hoy: unas mediáticas, informativas, vendibles... y otras olvidadas en mundos no muy lejanos del nuestro para quien nadie tiene el valor de una mirada.
¿Qué me gustaría? Que cada ser humano pueda comer, vestir, habitar una morada digna y no tenga que trabajar porque el avance de la técnica y de la ciencia haya llevado a la Humanidad a erradicar el hambre, la falta de lo más básico sin que por ello la Tierra se contamine.

Disculpa, crmatos, me la jugó el ratón.

Hay un libro de un escritor llamado Kurt Vonnegut: "La pianola". Si te gusta la lectura, leerás algo diferente. No es lo que yo te expreso arriba, pues se parte de una base ideal y se llega a muy distintos puntos de vista. En mi idea de este futuro el hombre no es más ni menos que un hombre libre que respeta la libertad de los demás y vive, sobre todo, vive gracias al ingenio, al talento, a la mano de obra de sus iguales, o sea: todos.

Te reitero mi agradecimiento por tu buena opinión. Un saludo.

Mi opinión no podía ser otra. Tu libro será buscado y por supuesto leido. Un abrazo

Madre noche, del mismo autor, es muy bueno.