Talavera la Real - Badajoz

Cuando mejor va la cosa, al igual que en las buenas películas hollywoodienses, todo se acaba. Cuando se disfruta con tantísimo énfasis de una celebración, más bajo cae el ánimo al saber que poquito le queda a la noche. Hablo desde mi propia perspectiva y de la pena que da que nuestro amigo Don Carnal se vaya del calendario para dejarle el terreno llano a Doña Cuaresma, y eso que en nuestro pueblo (bendita ventaja) le despedimos con retraso. Convivencia amena, alegre, como siempre, pasada por torrentes de alcohol, es verdad, pero los abusos en una fiesta tan marcada en nuestro calendario local me atrevería a decir que no son dañinos. Tal y como los antiguos romanos honraban a Baco en sus famosas y suntuosas bacanales, nosotros honramos a Don Carnal, en su última noche. Partimos con la ventaja de que, en esa noche, somos los únicos que le respaldamos, porque cuando en otros lugares ya hasta se ha escapado el aroma de las sardinas, por aquí aún, y aunque pasados de fecha y sin organización previa, ni les hemos quitado las espinas.
La noche como digo, fue amena y transcurrió sin problemas de calado; ni hubo tánganas clásicas ni vuelos sin sentido de vasos y botellas que buscaran impactar contra la cabeza del desgraciado de turno.
Del sabor de los bocatas pasamos al que nos dejó el grupo carioca de samba, que aparte de subir y aumentar la expectación, subieron otras cosas…
Pero sin duda, todos teníamos ganas por ver como iba a desarrollarse la nueva oferta que la concejalía de festejos había preparado para tan ilustre ocasión: el concurso de Drag Queens, esa oportunidad que se le da al sector más “alegre” de la sociedad local de mostrar sus encantos pasados por color, y extravagancia, no me lo nieguen…
En fin, noche para recordar en unos casos, y para olvidar en otros, depende de cómo cada uno se haya pintado el cartel. De lo que no cabe duda, es que este año, Don Carnal ha sido muy generoso, aunque desde hace tiempo, y con ánimo de unidad, le mantengamos despierto, aunque solo sea una noche más.

Por Lázaro Caldera Gómez, siendo las 17.15 del Lunes 11 de Febrero de 2008