La Codosera - Badajoz

Que don Genaro Lázaro Gumiel fue en vida un escultor imaginero de primera fila no lo discute nadie. Buen escultor y persona muy religiosa que se involucró con todo el proceso de construcción de las instalaciones de Chandavila. Sin su ayuda desinteresada, Chandavila hoy, no sería lo que es, seguramente. Los últimos años de su vida, el pueblo tuvo la suerte que este personaje tan importante en el mundo del arte, se trasladase a vivir temporalmente a La Codosera donde instaló su taller de trabajo. Creador incasable, los pedidos no le faltaban y cuanto dinero recaudaba lo destinaba a realizar los proyectos que hoy todos conocemos y que materializó en Chandavila. De sus manos salieron, para beneficio de los fondos artísticos de la Parroquia, un Cristo de la Clemencia y una Corazón de María, ambos con una majestuosidad admirable. En esta fotografía la autora ha retrado otra de sus obras como donación póstuma por este señor a los fondos de la Iglesia parroquial. Se trata de un Cristo Crucificado que los fieles portan en este Vía Crucis en la última Semana Santa.