Fuente de Cantos - Badajoz

A la izquierda y la derecha, como todo el mundo sabe, ya no las representa ningún partido, ni en España, ni en Europa ni en ninguna otra parte. Lo que representan los partidos políticos actualmente es algo tan simple como la posibilidad de enriquecerse al máximo robando en todas las modalidades conocidas y por conocer, y desde ahí, conseguir y mantener el poder sobre otros durante todo el tiempo que sea posible. Por eso la gente que es realmente de izquierdas no tiene ningún partido al que votar, y dice como los acampados "que no, que no, que no nos representan", y ha salido a la calle, que como todo el mundo también sabe siempre ha sido de la izquierda. Por eso un partido como el PP, sabiendo que la corrupción de dominio público -cuanta será la que no es de dominio público- en sus filas no sólo no le va a restar votos, sino que puede darle más, no retira de las listas electorales a sus imputados ni a sus miembros inmersos en procesos judiciales. Y se los da, como en Valencia. Por eso la ley electoral permite aberraciones como esta en un estado “democrático”, ley que en la que el PSOE nunca se ha molestado en poner orden. En este país, efectivamente, no hay pan para tanto chorizo, y quien más, quien menos, casi todos hemos atado a los perros con longaniza durante demasiado tiempo y queremos seguir haciéndolo. Y ¿quién quiere escuchar esto?. Un diez por ciento, acampado o sin acampar. Ante evidencias tan irrefutables de delincuencia legalizada (las “democracias” sirven para todo....) del orden de la que sufrimos desde hace años en España, aquí sólo se indigna hasta la rabadilla un diez por ciento de la población, tanto como para salir a la calle, protestar y exigir que se recicle una mierda que ya nos llega a la garganta. Pero no todo el mundo tiene el mismo sentido del olfato, por lo que se ve, y no es por casualidad que en este país nos perfumamos hasta destrozarnos la pituitaria. Porque del resto, y esto es aún más indignante, si cabe, alrededor de un sesenta por ciento vota al PPSOE azul con la esperanza de poder medrar y para que todo siga igual. De los que han castigado al PPSOE rojo, ¿cuántos lo han hecho por razones verdaderamente éticas y cuántos por cuestiones de pura supervivencia?. Sin regeneración ni toma de conciencia personales vamos a donde vamos, que es al cambio de modelo protagonizado por el derrumbamiento de uno de sus pilares fundamentales: el sistema financiero. Y con ellas, también, solo que más rápido y sufriendo menos. Es cuestión de meses, y las islas Caimán a punto de hundirse bajo el peso del becerro de oro más grande que la humanidad ha construido nunca. Absurdo, engordar para acabar explotando. ¿Por qué nos resistimos tanto al cambio?. Pues porque la tierra tira mucho y todavía matamos por poseerla y habitarla después de muertos.