Cheles - Badajoz

No sé lo que es, ni tampoco el motivo de darlas.

Es una tradicion, con un poco de mal gusto, creo que es un tema privado asi como una decision personal que hay que respetarla.

La campillada se da cuando un hombre se reconcilia con su esposa, despues que esta le ha sido infiel. Creo que esta es su definicion.
Si no es asi que alguien me corrija.

Le estoy muy agradecido por la información. Pero creo que es una tradición cruel y de mofa pública a los implicados, en la cual jamás participaría.

DE PEQUEÑO PARTICIPE EN UNA Y ME ARREPENTIRE TODA MI VIDA ES UNA TRADICION SALVAJE Y HUMILLANTE PARA EL QUE LA SUFRE HOY AFORTUNADAMENTE SOMOS MAS CIVILIZADOS Y YA NO SE LLEVA ACABO.AFORTUNADAMENTE PARA LA PAREJA RECONCILIADA.UN SALUDO.

No hay nada tan infiel como la memoria. Hoy nos creemos todos muy modernos y hemos olvidado por completo la reciente España de la que venimos; pero resulta que hasta ayer mismo fuimos un país tan anticuado y retrógrado que algunas historias de aquel próximo pasado nos pueden parecer ahora tan remotas como la luna de Titán.

Y así, acaba de llegar a mis manos un libr

No hay nada tan infiel como la memoria. Hoy nos creemos todos muy modernos y hemos olvidado por completo la reciente España de la que venimos; pero resulta que hasta ayer mismo fuimos un país tan anticuado y retrógrado que algunas historias de aquel próximo pasado nos pueden parecer ahora tan remotas como la luna de Titán.

Y así, acaba de llegar a mis manos un libro sorprendente, “El precio de ser distinta”, de Amparo Paramio (Kokoro Libros, kokorolibros@yahoo.es), que cuenta una historia real sucedida en un pueblo de Cáceres en 1983. Pero para narrar bien el asunto tenemos que retroceder en el tiempo un poco más. Amparo se casó a los 21 años con un chico de su localidad que por desgracia se mató en un accidente automovilístico a los seis meses. Esto ocurrió en 1972. Por entonces, y en un pueblito de la Extremadura profunda como aquel, la viudez obligaba todavía a un ritual de duelo inhumano y casi talibán, por lo intransigente, machista y extremado. La viuda tenía que vestir de negro riguroso e incluso llevar velo. Y eso es lo que hizo Amparo durante tres largos años: enterrarse en el luto e ir todos los días a misa y todos los domingos al cementerio. Estas eran las únicas salidas que le estaban permitidas: cualquier otra cosa hubiera sido un escándalo: “Yo me sentía tan ahogada en casa que a veces me subía al tejado para respirar un poco”.

Una vez acabado este duelo feroz, Amparo empezó a estudiar enfermería, profesión en la que ahora trabaja. Conoció a un chico de Toledo y se enrolló con él. Llevaban seis años juntos cuando Amparo quedó embarazada. Y ahí empezó lo peor.

La campanillada o cencerrada es una antigua y brutal costumbre pueblerina que ha sido prohibida en España por los distintos gobiernos desde el siglo XVIII. Consistía (y utilizo el tiempo pasado porque espero que ya esté erradicada) en que una horda de energúmenos asaltaba a aquellas personas cuya vida se consideraba poco ortodoxa. Sus víctimas eran las mujeres embarazadas fuera del matrimonio, por supuesto, pero también los novios de edad más o menos avanzada (por lo visto, los viejos no podían tener sexo) o el matrimonio entre viudos. Y, sobre todo, viudas; porque se dice que las cencerradas se aplicaban por igual a hombres y mujeres, pero lo cierto es que eran ellas siempre las más afrentadas, las más insultadas, las más agredidas. La cosa consistía en organizar un estruendo bárbaro, en gritar a las víctimas cosas soeces y degradantes, en perseguirlas por las calles del pueblo y en manosear a la mujer de tal manera que la culminación de la gracia se cifraba en conseguir arrancarle las bragas.

Por esas paradojas de la vida, resulta que, durante el franquismo, las cencerradas estuvieron prohibidas. Pero en 1979 apareció en el pueblo de Amparo el primer alcalde democrático, un tipo del PSOE que era un ex tratante de ganado al que le encantaba esta burla abusiva. Y en 1980 comenzó de nuevo el pitorreo. Varias muchachas del pueblo de Amparo fueron humilladas y toqueteadas por los alegres brutos, mientras las autoridades municipales miraban para otra parte. Hasta que, en 1983, corrió entre los vecinos la noticia de que Amparo, la viuda, estaba embarazada de su novio. Inmediatamente los pitecantropus del lugar le dieron la consabida cencerrada, aunque por lo menos la mujer logró meterse dentro del coche y bajar los seguros, librándose así de un manoseo cierto. Aunque no de los insultos, de la burla y la afrenta.

Y ahora viene lo importante, lo radicalmente diferente: en vez de aguantarse y sorberse las lágrimas, como todas las víctimas antes que ella, Amparo decidió denunciar a siete de los campanillos ante el juzgado. El caso salió en todos los periódicos, se organizó un escándalo a escala nacional, hubo un ardoroso debate en pro y en contra, cosa que indica el precario nivel de la España de entonces. En 1987, tras cuatro años de dura pelea en solitario, Amparo logró que los mozos fueran condenados a una multa y a la reprensión pública. Y se acabaron las cencerradas. El hilo de la Historia se va tejiendo así, con pequeños actos heroicos de personas modestas que van agrandando, poco a poco, la libertad de todos. Esta España mucho más respirable en la que ahora vivimos es el producto de las lágrimas, el coraje y la lucha de gentes tan comunes y a la vez tan extraordinarias como Amparo. Desde este pequeño rincón os doy las gracias. Y a los que se les ocurra pensar hacer una de estas barbaras torturas, que sepan que está prohibido, y si lo ponen en practica, que caiga todo el peso de la ley sobre ellos.

Hola a todos.Escribo hoy por primera vez en este foro para contar lo que yo sé acerca de esta extinta tradición( gracias a dios y más aún a los hombres).
Actualmente vivo en Portugal y aunque ahora vivo en Reguengos, hasta hace muy poco he vivido en una aldea donde las tradiciones aún se guardan. Alli por primera vez y hace no menos de 8 anhos(perdón pero en este ordenador no hay enhe) tube la oportunidad de participar en una "campanillada".
Aqui el motivo era bien más alegre: una pareja de novios se habia decido "juntar" y comenzar a vivir maritalmente sin passar por la iglesia ni por el juzgado. Me contaron que lo hacen con cualquier pareja que decida juntar los trapitos sea de la edad que sean y aqui, por lo menos en las que he tenido oportunidad de asistir y presenciar, el motivo es para dar a conocer a la comunidad que aquellas personas ya forman un "matrimonio"( viven juntos maritalmente) y que deben ser respetados como tal. Aqui existen parejas que estan en los ochenta y tal anhos y que todavia no son casados legalmente pero que ante la comunidad de la aldea son respetados como tal. Así también puedo asegurar que conozco una pareja que con 85 anhos decidieron hablar con el cura para que los casara antes de morir. El cura los fué a casar a su casa porque la anciana no se podia levantar de la cama con sus achaques. Y todo comenzó con una campanillada...

HOLA SALVAJE ARREPENTIDO. VUEVO A SER KOKO8888. ME ALEGRO MUCHO DE QUE HAYAS EVOLUCIONADO Y DE QUE AHORA SEAS TAN DULCE Y AMOROSO. OJALÁ LO LEAS AUNQUE ANDES (NUNCA MEJOR DICHO) POR AHÍ ARRIBA. TE QUIERO.

pues vete preparando por que la invasion de energumenos en nuestra campanillada va directamente proporcional a la categoria de los
protagonistas y tu eres muy especial ya sabes? la nuestra sera la leche.ah creo que para quedar bien con los tiranosaurius hay que invitarles a copas de aguardiente.(ya esta previsto).estoy pensando en irnos a reguengos de monsaraz que son mas civilizados.bsosss

Pues sí, lo de Reguengos de Monsaraz es buena idea (espero ir con guía experimentado, porque como tenga que ir yo sola...). Cariño, y si pasamos de invitar y directamente buscamos la parte oscura de cada uno que se acerque a nosotros, entonces no va a haber una campanillada sino muchas, muchas. Ojalá viera todo el mundo la viga en su ojo en vez de la paja en el ajeno. Que se vayan preparando que ya estoy investigando la vida de todos y cada uno de los posibles australopitecus y nos vamos a reir un rato. ¡Cuánto daño ha hecho "El Tomate" en este país! Bueno, como esto es anterior, a lo mejor fueron los precursores de estos programillas que linchan a unos pocos mientras los demás se aburren y sólo se ponen viendo la vida de esos pocos, que por cierto y todo sea dicho, es divertidísima. Porque una cosa te digo, churri de mi alma, desde que te conozco y te quiero, soy feliz y me lo paso como una enana. Todo el mundo debería hacer lo mismo, pasárselo muy bien en su vida y no dejarla pasar viendo y criticando lo que hace el vecino. Así que, hala, a ponerse todos a ser felices. Y si al final, después de todo, aparece algún erectus (que no significa lo que parece, aunque lo parezca), pues se le invita a aguardiente y a lo que haga falta.
Qué ganas tengo ya de tenerte conmigo, mi vida.
Besossssssssssssss

jo cari eres una crak el dia que te presentes en cheles con todo ese halo de luz y simpatia que pareces un meteoro luminoso mi gente va pensar que ha bajado el sol a su sitio original (EL PARAISO TERREENAL) que en su dia fue mi pueblo de cheles y su isla da cinsa hoy bajo las aguas de alqueva un millon de bsosssssssss

Mivi, nunca he dudado, ni un segundo, de que Cheles sea el paraiso, no puede ser de otra manera, sólo de un sitio así podrías haber salido tú. Ojalá me acojan bien tus paisanos, yo ya les quiero por todas las cosas que me has contado y quiero conocer todos esos sitios preciosos en donde pasaste tu infancia y tu juventud. Y aviso, soy del Real Madrid, para que se vayan preparando, y forofa.
Besos y +