Calamonte - Badajoz

A pesar de que uno no sienta emoción especial, ante el paso de una imagen procesional, sea religiosa o pagana sí que se apreciar el arte de la imaginería, los tronos, la orfebrería, bordados, y boato que los acompaña.

He visto esta Semana Santa en Málaga, al menos 10 pasos, que discurrían entre una mezcla de olor a churros e incienso, al cual más bonito.

Los laicos no entendemos eso de venerar un instrumento de tortura como es la cruz, y nos parece tenebrista tantas velas, capiruchos, cristos sangrantes y vírgenes dolorosas. Pero algo tendrá el agua cuando la bendicen.

Tampoco entendemos que hacen tanto cargo político, militares, miembros de la judicatura, y demás figurantes de carácter público, en el cortejo procesional. Algunos como nuestro alcalde “Salvador” (es como le llaman sus concejalas en Facebook), incluso de porteador.
No hay duda del tirón popular que tienen las procesiones y por eso nuestros políticos están como locos por asomarse a ese escaparate, por muy frívolo y vacío que nos parezca. Devoción y propaganda política, es lo que hay.

Lo que he presenciado en Málaga es lo menos parecido, a lo que debe ser una penitencia silenciosa, sentida y sincera, pero es en lo que ha derivado la Semana Santa en algunos lugares.

La que más me impactó de todos fue el paso del Cristo de la Buena Muerte, (no sé, si morir en la cruz se le puede llamar así).

Es la famosa procesión acompañada por legionarios, (cabra incluida), escuadra de gastadores y banda de música (bueno cornetas y tambores).

Esos chicos de pantalón paquetero, pelo en pecho, llenos de tatuajes, que dan una estampa feroz que recuerdan pasados incómodos.
Ese arte en el desfile y ese manoseo de armas al aire que vuelve locas a las mozas y no tan mozas. Esos soldados ultracatólicos que portan a un judío.

Esa mezcla de banderas, santos, himnos, turismo y boato, me parece impropia para un Cristo que murió por los pobres y desamparados y nos hace dudar de la aconfesionalidad del Estado y sus instituciones.

Pero la “Anécdota” en Malaga, ha sido la foto que ha captado un avispado, en el brazo de un legionario que portaba el Cristo, (una esvástica tatuada).

Símbolo nazi por excelencia, por muchas raíces indias o japonesas que quieran atribuirle. Me pregunto, ¿qué hace un nazi procesinando a un judío?, igual es que se la pone dura.

Más que por los muebles que pueda tener en la cabeza este elemento, me preocupa la implicación y connivencia de autoridades civiles y militares, permitiendo a este “tocao” portar armas para defender los principios democráticos de nuestro país.
Una última apreciación para nuestras sufridas mujeres, espero que algún día Instituciones Penitenciarias y la cofradía del Rico liberen a una Presa. Un saludo para todos y todas.

Dale un pez y comerá un día, enseñale a pescar y comerá todos los días, dale una religión y morirá rezando para que le den un pez.

LA CRUZ QUE TODOS LLEVAMOS COMO INFIERNO Y PESADILLA Y UN INCAR DE RODILLAS HASTA EL DIA EN QUE MURAMOS , POR ESO SI MUERO UN DIA QUE ROMPAN LA MIA CONTRA EL VATICANO. ( final del pasodoble de la comparsa los inmortales , por favor escuchenlo entero en yotubbe ( comparsa los inmortales pasodoble si una cruz no aguanto yo )

Muy bonito el pasodoble si seňor, muchas gracias. Refleja el sentimiento de mucha gente.

El Vaticano destituyó en la última década a 884 sacerdotes por abusos a menores