Badajoz - Badajoz

Yo tenía un amigote algo tontucio,
que un día se metió a guardia civil,
cuerpo donde conoció a gente muy vil
que a veces decían del que era un rucio
por no aceptar sobres de extranjis
o decomisar en el puerto el radio caset
sabiendo como sabia que algunos manguis
ejercían el mismo oficio que tenía él.


Y algunos hasta tenía muy altos cargos
y otros en la escala encaramados
y otros políticos de esos de relumbrón
o jueces muy arriba en el escalafón,
pero él no tragaba y no tragó
y un día desarticuló una operación
con la mercancía ya dispuesta en el camión
y a todos los mandaos enchiqueró.

Yo tenía un amigote algo tontucio,
que un día se metió a guardia civil,
cuerpo donde conoció a gente muy vil
que a veces decían del que era un rucio
por no aceptar sobres de extranjis
o decomisar en el puerto el radio caset
sabiendo como sabia que algunos manguis
ejercían el mismo oficio que tenía él.


Y algunos hasta tenía muy altos cargos
y otros en la escala encaramados
y otros políticos de esos de relumbrón
o jueces muy arriba en el escalafón,
pero él no tragaba y no tragó
y un día desarticuló una operación
con la mercancía ya dispuesta en el camión
y a todos los mandaos enchiqueró.



En las espaldas le dieron palmaditas
e incluso oral felicitación
y un adusto juez lo interrogó
para saber el estado real de la cuestión
y a ser posible, si aún quedaba guita
escondida en algún negro rincón

Yo tenía un amigote algo tontucio,
que un día se metió a guardia civil,
cuerpo donde conoció a gente muy vil
que a veces decían del que era un rucio
por no aceptar sobres de extranjis
o decomisar en el puerto el radio caset
sabiendo como sabia que algunos manguis
ejercían el mismo oficio que tenía él.


Y algunos hasta tenía muy altos cargos
y otros en la escala encaramados
y otros políticos de esos de relumbrón
o jueces muy arriba en el escalafón,
pero él no tragaba y no tragó
y un día desarticuló una operación
con la mercancía ya dispuesta en el camión
y a todos los mandaos enchiqueró.



En las espaldas le dieron palmaditas
e incluso oral felicitación
y un adusto juez lo interrogó
para saber el estado real de la cuestión
y a ser posible, si aún quedaba guita
escondida en algún negro rincón





Y hablaron largo y tendido
y muchas cosas confesó,
y el juez que tiro del hilo
y la rehostia se armó,
y así empezaron sus penas
y sentía tanto temor,
que el zumbido de una mosca
le disparaba las adrenalina
y sus odios y sus inquinas
tornaron su mente fosca.

Yo tenía un amigote algo tontucio,
que un día se metió a guardia civil,
cuerpo donde conoció a gente muy vil
que a veces decían del que era un rucio
por no aceptar sobres de extranjis
o decomisar en el puerto el radio caset
sabiendo como sabia que algunos manguis
ejercían el mismo oficio que tenía él.


Y algunos hasta tenía muy altos cargos
y otros en la escala encaramados
y otros políticos de esos de relumbrón
o jueces muy arriba en el escalafón,
pero él no tragaba y no tragó
y un día desarticuló una operación
con la mercancía ya dispuesta en el camión
y a todos los mandaos enchiqueró.



En las espaldas le dieron palmaditas
e incluso oral felicitación
y un adusto juez lo interrogó
para saber el estado real de la cuestión
y a ser posible, si aún quedaba guita
escondida en algún negro rincón





Y hablaron largo y tendido
y muchas cosas confesó,
y el juez que tiro del hilo
y la rehostia se armó,
y así empezaron sus penas
y sentía tanto temor,
que el zumbido de una mosca
le disparaba las adrenalina
y sus odios y sus inquinas
tornaron su mente fosca.




Como es de suponer
se lo quitaron del medio
no fuera que en un traspíes
se fijara en un coronel
y con razón o sin ella
sus andanzas él siguiera
y hiciera alguna mella
donde quiera que estuviera.

A este amigo suyo al final le pasará como a Garzón, o lo meteran en la cárcel de por vida.

Yo tenía un amigote algo tontucio,
que un día se metió a guardia civil,
cuerpo donde conoció a gente muy vil
que a veces decían del que era un rucio
por no aceptar sobres de extranjis
o decomisar en el puerto el radio caset
sabiendo como sabia que algunos manguis
ejercían el mismo oficio que tenía él.


Y algunos hasta tenía muy altos cargos
y otros en la escala encaramados
y otros políticos de esos de relumbrón
o jueces muy arriba en el escalafón,
pero él no tragaba y no tragó
y un día desarticuló una operación
con la mercancía ya dispuesta en el camión
y a todos los mandaos enchiqueró.



En las espaldas le dieron palmaditas
e incluso oral felicitación
y un adusto juez lo interrogó
para saber el estado real de la cuestión
y a ser posible, si aún quedaba guita
escondida en algún negro rincón





Y hablaron largo y tendido
y muchas cosas confesó,
y el juez que tiro del hilo
y la rehostia se armó,
y así empezaron sus penas
y sentía tanto temor,
que el zumbido de una mosca
le disparaba las adrenalina
y sus odios y sus inquinas
tornaron su mente fosca.




Como es de suponer
se lo quitaron del medio
no fuera que en un traspíes
se fijara en un coronel
y con razón o sin ella
sus andanzas él siguiera
y hiciera alguna mella
donde quiera que estuviera.



Pero aún así continuó
siendo fiel a su profesión
y junto al adusto juez
que sentía igual que él,
una puntada tras otra
bordaron todo el esquema
que retrataba a la trama,
y sus chanchullos de ególatras.

Como era de suponer
viendo al PPodrido en aprietos
que echaría mano de un juez
para darle aire al resto.

Y si quieres ser bien recompensado y que ningún juez te diga nada, apúntate al PPodrido

¿Cuantos nick tiene esparragueando?.
El tio no para.
Pero por mucho que escribas de nuevo son los socialistas los que están imputados por chorizos y prevaricadores.

El dí que yo vea a uno de esos chorizos del PPOdrido, sean de la marca Gürtel o de cualquier otra, Feijóo por ejemplo, metido en la trena como Dios manda por sus chorizadas, ese día me rapo la cabeza al cero pàtatero