Noharre - Avila

La cooperativa Mesenor ha presentado una querella criminal contra la viceconsejera de Desarrollo Rural y directora del Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (Itacyl), María Jesús Pascual, al considerar que la resolución que revoca la autorización de uso de la marca Tierra de Sabor en sus envases de leche es constitutiva de prevaricación.

La pérdida del sello se hizo efectiva el pasado 12 de febrero después de que la Consejería de Agricultura y Ganadería advirtieran de incumplimientos de uso de la enseña. En sus envases, Mesenor utilizaba el Acueducto como imagen de marca y aseguraba a través de una leyenda en un lateral que la leche procedía de explotaciones segovianas y era fruto del esfuerzo de ganaderos de la tierra comprometidos con la calidad.

Tras las auditorías realizadas en las instalaciones de Cañada Real, planta ubicada en Soria donde se envasa la leche, se comprobó que el producto de algunos de los lotes no procedía de ganaderos de Segovia y se concluyó que la imagen del Acueducto y la leyenda de los envases inducían a error al consumidor.

En la querella, presentada por el presidente de Mesenor, Rafael de Frutos, la cooperativa indica que la viceconsejera ignoró absolutamente sus alegaciones y que, de existir motivos para perder el sello, hubieran sido perfectamente subsanables. No obstante, señala que no se le permitió solventar los presuntos defectos puesto que no se advirtió de esa posibilidad antes de dictarse la expulsión.

"La desviación y el uso arbitrario del poder no puede ser más elocuente", recoge el texto, en el que se recuerda que en caso de incumplimientos éstos hubieran podido solucionarse tan sólo suprimiendo expresiones como 'valor nutritivo', 'mejor sabor' o 'producto natural' o eliminando el Acueducto del brick.

"Tan elemental resulta que dichos extremos son subsanables que sólo una resolución arbitraria e injusta puede olvidar advertirlo", agrega la cooperativa, que recuerda que si bien no toda su leche tiene origen en Segovia, sí vende íntegramente producto de la Comunidad, ámbito en el que se circunscribe Tierra de Sabor.

Mesenor incide por otra parte en que no se produjo alteración alguna de los requisitos fijados por el Itacyl para conceder el uso del distintivo, por lo que, si admitió las condiciones en un primer momento, éstas deberían aceptarse también después. Además, niega, según alega la Consejería, que la leyenda objeto de supuesto incumplimiento no se incluyera en el Pliego de Condiciones aprobado, un documento que ha sido remitido al Juzgado.
Auditorías favorables

La cooperativa también ha enviado un informe de una auditoría de Aenor desarrollada en verano de 2012, en el que se controlaba entre otros aspectos la trazabilidad, el origen castellano y leonés de la leche, la presentación y etiquetado de productos y el uso de Tierra de Sabor. En él, según Mesenor, no se evidencia utilización incorrecta de la marca. Tampoco se evidencia tras las inspecciones realizadas por el Itacyl, la última en noviembre, un día antes de iniciarse expediente por defectos de uso.

Los responsables de Mesenor se quejan asimismo de que la baja de Tierra de Sabor se filtrara a organizaciones agrarias antes que a los afectados y se informara de ella con gran premura a los medios, lo que a su juicio responde a la intención "maliciosa" de dañar a UCCL, a la que está vinculada esta cooperativa, en pleno proceso electoral de las cámaras agrarias.

La agrupación considera que la decisión de la expulsión estaba tomada y que se trató de "vestir" la resolución con hechos que la justificaran "a cualquier precio". A su juicio, los argumentos esgrimidos para la baja son "peregrinos".
No reconoce infracción

La cooperativa, que ha vuelto a pedir la dimisión de la viceconsejera, así como de la consejera de Agricultura y Ganadería, Silvia Clemente, ha solicitado el abono por parte de la querellada de una fianza de 50.000 euros para cubrir las responsabilidades económicas y de toda índole que se puedan derivar.

Mesenor ha informado por otra parte de que al conocer la noticia de la baja por los medios hizo un primer encargo de envases sin el corazón amarillo en sus envases, "adelantándose así a una repentina e improbable prohibición de su uso". Ha insistido, no obstante, en que tal hecho no supone el reconocimiento de la infracción ni "sana de ninguna manera" la actuación de la viceconsejera, cuyo comportamiento "prevaricador" deber ser, en su opinión, enjuiciado.

Hoy Silvia Clemente ha dicho que el 2% de intereses que subvencionaba la Junta de Castilla y León a aquellos agricultores que participaron en infraestructuras de regadío para regar de embalses, como por ejemplo el de las Cogotas, y que hacía varios años que no pagaba, no va a volver a pagarse hasta 2016 por la crisis, que traducido es que no tiene ninguna intención de volverlo a pagar.
Además de la crisis, la consejera ha esgrimido otra razón, que es la buena situación económica de los agricultores. Esta afirmación viniendo de un contertulio de un bar puede tener un pase por desconocimiento, pero de esta señora, que conoce los imputs y outputs de la agricultura de Castilla y león(gastos-ingresos), que conoce la situación de los distribuidores de maquinaria, de las cooperativas, de los almacenistas, de las cajas que dan préstamos a los agricultores, solo se pude deducir la falta de vergüenza, incluso la mala fe que derrocha esta señora.
Este tipo de declaraciones también se enmarca dentro de una estrategia de la Junta para hacer ver a la mayoría de los ciudadanos (los que viven en las ciudades) que no todo está tan mal como se piensan, que hay gente que vive bien, y esa es la que está lejos y no se puede comprobar, y esa es: la gente del campo. Con programas de la televisión regional como: "Nos volvemos al pueblo" quieren dar esta impresión.
Pues bien, es todo una gran mentira, los pueblos de la región siguen perdiendo habitantes a un ritmo igual o superior al de los últimos años, y eso que prácticamente no hay jóvenes porque se han ido casi todos ya, y los mayores no suelen emigrar. Y la razón no es otra que en el medio rural NO HAY DINERO, y como ha sucedido siempre, la población va donde lo hay.
Aparte de ser una de las regiones donde más crece el paro y el déficit ahora también somos campeones de la mentira.

Mientras tanto ellos siguen cobrando.

Según la UCCL la Junta de Castilla y León tiene 100 millones de euros de los agricultores que no ha transferido. Quizá los comentarios sobre la buena situación de la agricultura los haya hecho para justificar esta y otras retenciones de dinero que utilizan para financiar su chiringuito, sus empleados públicos colocados a dedo y sus corruptelas que para ellos son lo más importante.
lo principal no es que su gestión sea desastrosa sino que la gente no se entere, y si es posible que piensen que lo están haciendo bien, si es necesario mentir, mienten.

Cuando hay un desastre natural, la administración corre presurosa a ayudar a los afectados, claro, siempre que no sean agricultores. Porque a los agricultores de Piña de Esgueva, ¿les va a ayudar la Junta o el gobierno central? Claro que no, como siempre les dirán que: haber asegurado, es decir pagar en cómodos, (o no tan cómodos) plazos lo que te vaya a pasar de vez en cuando, además de una prima para los currantes y jefes de agroseguro que también tienen que comer.
Porque como todos sabeis la Junta, entre tantas cosas, ha dejado de pagar su ayuda a los seguros, como ha dejado de pagar la ayuda a la remolacha, que ya solo siembran algunos nostálgicos esperando que algún día valga lo que valía y ellos sean los preferidos por la fábrica por haber sido fieles y perder dinero durante años para que la fábrica se hinche a ganarlo con los precios del azucar por las nubes.
También la Junta ha dejado de convocar ayudas para la modernización de explotaciones, y así todo, solo paga parte de la Pac, dinero que le llega de la Unión Europea para repartir entre los agricultores y que ni siquiera entrega en su totalidad, ya que se queda con parte para sus "gastillos". Tampoco ha pagado la IC y otras ayudas que vienen de Europa, y que al llegar a manos de la Junta desaparecen como arte de birlibirloque. Y este que, tanto paniaguado tira mucho de las arcas públicas.
Es decir, que la Junta de Castilla y León no solo no apoya a los agricultores en estos tiempos, sino que tiene un negocio con ellos.

Tenemos que dar las gracias a la consejera Silvia Clemente que tanto trabaja por nosotros, los agricultores. Gracias a la eliminación de las ayudas para el seguro de pedrisco no se han asegurado 70.000 hectáreas de cultivos hortícolas.
Ahora con el pedrisco ya no hace falta, solo unos pocos miles de agricultores arruinados.
Silvia Clemente y sus directores generales y adláteres andarán un poco mejor.

Ahora dice Silvia que la cosecha va a ser de tropecientos millones de toneladas y dos más y que bien que están los agricultores, será por eso por lo que no paga.
Que manera de faltar a la verdad, en eso es experta.