Crespos - Avila

Diario de Ávila 23/10/2011 La campana de mi pueblo
Desde el corazón
Abencio Nieto
Desde el momento que me enteré de la persona que leería el pregón de las fiestas del Pilar de este año, llevo pensando cómo empezar esta columna y, sobre todo, como terminarla para decir lo que se siente al hablar de una persona querida por todos y sin caer en la pedantería.
Para empezar, decir que Teresa Martín Jiménez, nuestra practicanta, lleva con nosotros más de veinte años. Aunque siempre es un honor ser el pregonero de unas fiestas, en su caso, este homenaje es demasiado poco por todo lo que se merece. Han pasado las fiestas y sigo pensando que no es nada fácil olvidarse del corazón para expresar el cariño que la tenemos en Crespos.
Cariño, respeto y admiración son sentimientos que la gente de Crespos la pudo demostrar con su presencia, su apoyo y su calor, con las muchas muestras de amistad que la dieron en ese momento tan entrañables del pregón. Teresa, desde el lado humano, atesora muchos valores que son fácil de percibir con tan solo estar unos minutos a tu lado, y como profesional, ha logrado hacer de la constancia y la perseverancia su forma de trabajar, pero con una especial sensibilidad con las personas más olvidadas. Teresa siempre está ahí, haciendo gala de una infinita paciencia, que la permite cargar con todos los problemas de todos nosotros, a la vez que nos recuerda la necesidad de tomarnos la tensión, ponernos la vacuna, o acudir a la consulta del médico para que nos reconozca o nos mande hacer unos análisis. Así es Teresa, como ella misma se definió en su pregón: confesora, psicóloga, cirujana, pediatra y, en ocasiones, médico. Así la conocimos en Crespos y así la queremos, como la practicanta a la que podemos confiar nuestra salud
Diversas son las historias y las muestras de cariño que estos últimos días me han comentado numerosos vecinos que admiran la gran labor de esta profesional. Después de veinte años hay para escribir un gran libro, y es que desde el principio y, día a día, se fue ganando, uno a uno, a todos los vecinos de Crespos por estar siempre dispuesta a servir a los demás, demostrando ser una autentica profesional de la medicina rural.
Teresa: hay mucha la gente a la que le gustaría trasmitirte su admiración y respeto, y decenas las personas que me han pedido que sea yo quien te transmita esos sentimientos, que me consta que son recíprocos, a través de este diario para que quede constancia que tú estás siendo una parte de la historia reciente de Crespos.
Un día me contaban una bonita historia que contaba alguien que ya no está con nosotros y que decía algo así como que a Teresa nos la mandaron envuelta en papel de regalo. Eso es para nosotros, un tesoro envuelto en forma de regalo.

un pregon que nos puso a todos los pelos de punta,aparte de las lagrigas.todos estos años los pregones an estado bien pero como este nunca,te mereces la placa??no te mereces mucho mas,

simplemente,GRACIAS.MI ADMIRACION Y RESPETO PARA UNA BUENA PERSONA.

Mi reconocimiento a Teresa como una excelente profesional, y una gran persona.