Urbiés - Asturias

El señor Wilson visitó a su amigo Jon, quien, magnánimo, invitolo a su club londinense.

Hallábanse ambos en la piscina y en otra mesa, un poco mas allá, la sra. de Jon, la secretaria de este, una amiga de la familia y una socia del club con fama de aficionada a... las piscinas ¿?

Echose el Sr. Wilson un chapuzón; la adversa fortuna hizo que el bañador saliera despedido, con tan mal tino que desapareció engullido por el desagüe que depuraba la piscina. Advertido su amigo del adverso percance alargole "The Times", que hojeaba abstraido, para que pudiera al menos cubrir sus vergüenzas en tanto ganaba el vestuario.

Dio en pensar el perjudicado que de taparse por delante exhibiría sin remisión la trasera, o viceversa si se cubría las posaderas, con lo que decidió ponerlo en la cabeza y de tal guisa ocultar la cara con el diario al tiempo que huía en busca de su ropa, lo cual hizo a la carrera. Las damas de la mesa, al ver correr aquel caballero (tan suficientemente dotado) con el sobrado badajo repicando en el vacío, opinaron de semejante guisa:

La Sra. del Sr. Jon, lánguidamente desencantada: .-Ese no es mi marido

La secretaria del Sr. Jon (en la inopia): .-Ese no es tu marido

La amiga de los Jon, tajante: .-No es nadie de nuestras amistades

La socia aficionada a... ¿ .-Ese no es ningún socio del club