Urbiés - Asturias

Ahogada en un océano de pesar y de silencio
la montaña se apagaba en verde ansiedad;
y con ella se extinguía La Hueria de Urbiés, mi pueblo;
antes fue vida repleta de sueños y, ahora,
es fantasma que arrastra necesidad.
Sus temerosos caminos se sobresaltan
en la necesidad de sentir nuestros pasos, pasos nuevos.
Recuerdos de personas que compartían miserias.
Allá en las entrañas de sus entrañas
donde la temeridad de las personas cubría necesidades;
la soledad en la negrura del carbón hallaba amistad con el hombre.
Cuando la luz intentaba invadir los dominios del hayedo,
la fantasía corría nerviosa en la imaginación de un niño;
en sus viejos y cansados castaños permanecen manos
atadas a sus frutos que con dolor y necesidad alimentaban cuerpos.
Todo permanece en la memoria apagada
que resurge agobiada al encuentro del paseante.
Montaña triste, montaña apagada,
compañera de trabajo , andaduras y juegos,
te recuerdo con dulzura, con deseo y añoranza.
Allí donde nací, donde quedó niñez y ensueño,
donde crecí como persona y ahora eres remembranza.
Dulce montaña mansa de cristalinos regueros
diste vida a mi pueblo pagando con tus esencias
deseos ajenos.
Vida, noche, día, sueño y en el alma,
como madre preocupada, estamos todos tus hijos
y la aldea que moría en tu apenada desdicha,
renace con otros vientos, con otros brazos, con otros besos
y orgullosa por sentirte de nuevo, te ofrece amor eterno.

muy guapa mieres ,me gusto,un saludo a tod@s

Mieres yes un artista
Prestome per munchu, ta mui guapu
Espero que sigas escribiendo, yo per lo menos agradeceríatelu
Un fuerte abrazu

Muy bonita Mieres
A mi tambien me gustaria que siguieras escribiendo estas monadas

Besitos para todos