El Gobierno «entierra» 22 millones en la calzada anulada entre Salas y La Espina El Ministerio de Fomento había pagado ya dos tercios de la obra antes de rescindir el contrato de una carretera valorada en 38 millones El tramo entre Grado y La Espina generó un sobrecoste de 25,8 millones . Asturias Oviedo / Salas, El Gobierno central ha gastado al menos 22 millones de euros en una carretera que no se abrirá al tráfico: la segunda calzada del tramo Salas-La Espina de la autovía del interior, A-63, cuyo contrato acaba de rescindir el Ministerio de Fomento en el marco de su plan de ajuste económico. El presupuesto de adjudicación de esta calzada entre Salas y La Espina ascendía a 41 millones de euros, pero recibió un modificado a la baja de 2,9 millones de euros, por lo que el precio final de la obra se quedó en 38 millones. Del montante total de la obra de la segunda calzada, a 31 de diciembre de 2009 se habían certificado 22,1 millones, según las respuestas del Ministerio de Fomento a preguntas parlamentarias. Para este año, la obra contaba con un presupuesto de 13,2 millones de euros, aunque el Ministerio no ha detallado qué porcentaje de esa cuantía se pagó hasta la anulación del contrato. El anuncio de la rescisión del contrato de la segunda calzada en el tramo Salas-La Espina es sólo el último episodio del «culebrón» que viene protagonizando la azarosa historia de la autovía del interior, lastrada por la necesidad de introducir modificaciones técnicas, las supuestas adversidades originadas por la caprichosa orografía y ahora la actual crisis económica, que ha obligado a reducir el déficit público a costa de recortar salarios y obra pública. «Desilusión, tristeza y esperanzas truncadas». Así se refiere el alcalde salense, el socialista José Manuel Menéndez, al malestar que ha generado el «tijeretazo» de Fomento en su concejo. «Desde hace muchos años la sociedad civil, los ayuntamientos y los alcaldes de la zona venimos trabajando para que esta vía fuese una realidad, y en ella estaban puestas y siguen estando muchas esperanzas», enfatiza el regidor salense, el cual prosigue añadiendo que «las posibilidades de progreso del Suroccidente se verán frenadas, pero no truncadas». «Haremos lo que estimemos preciso ante quien proceda para tratar de minimizar en la medida de lo posible lo que esto supone». |