Tineo - Asturias

Borrado por su Autor.

no te cansas??

Borrado por su Autor.

pues la verdad es que yo no tengo ni idea pero mi abuelo es amigo de un señor del pico la villa que le llaman el valenciano y me parece que tiene 92 o 93 aunque no los parenta por que esta superbien

Borrado por su Autor.

Hola: Yo creo que éste señor se murió al año pasado, (en caso de no ser así disculpas).Yo lo conocía, creo que es, o era, de La Piñera de S. Felix

Borrado por su Autor.

En la revista del instituto en uno de los apartados le hicieron una entrevista a una señora que tiene 101 años

ye miu buelo con 104...aber gayus kien lo supera

María Mercedes Sánchez Fuentes cumplió 100 años el martes pasado, una cifra redonda que mereció una gran celebración. Vive en la Residencia de Ancianos El Mirador, de Tineo, y, aunque ha cumplido un siglo, mantiene un espíritu alegre que le hace escuchar con atención todo lo que sucede alrededor. Se notó en la celebración, pues estaba atenta a cuanto sucedía, tratando de no perderse nada.

Todo este tiempo vivido le ha dado para mucho. Nació en Nueva de Llanes, allá por 1910, y tuvo otros cuatro hermanos, aunque uno falleció siendo niño. Fue una de esas niñas que no pudo ir a la escuela, pero eso no le impidió aprender a leer y a escribir. Eso sí, lo tuvo que hacer sola, pasados los 30 años.

Ya desde niña no lo tuvo fácil. Su padre falleció a los 42 años, de silicosis, y con sólo 8 años se vio obligada a encargarse de la familia mientras su madre se iba a trabajar. Ella misma tuvo que ponerse a servir en casas desde muy joven. Habla con emoción de su primer sueldo: una paga de 20 céntimos.

En 1932 tuvo que irse a Madrid, destino de tantos asturianos que buscaban oportunidades. Allí la encontró la Guerra Civil, que la hizo emigrar en un convoy de la Cruz Roja con destino a Marbella. Como tantos en aquella época, pasó mucha hambre.

Pero no todo fueron desgracias.Al finalizar la guerra regresó a Madri, donde consiguió trabajo como parte del servicio de la casa del hijo del Marqués de Romanones, donde pasaría 14 años y en la que conocería al que sería su marido, José Conde, asturiano de Cangas del Narcea.

Su futuro marido tuvo que esperar seis meses por ella, mientras estuvo en Londres en calidad de doncella con la hija de la casa en que servía. Al igual que muchos otros cangueses, su marido consiguió plaza de sereno en la capital y ella se colocó como encargada de una portería en Delicias, calle de gran importancia en Madrid. Enviudó en 1995. El personal de la residencia elaboró una presentación fotográfica con instantáneas suyas, que permitió María Mercedes Sánchez Fuentes cumplió 100 años el martes pasado, una cifra redonda que mereció una gran celebración. Vive en la Residencia de Ancianos El Mirador, de Tineo, y, aunque ha cumplido un siglo, mantiene un espíritu alegre que le hace escuchar con atención todo lo que sucede alrededor. Se notó en la celebración, pues estaba atenta a cuanto sucedía, tratando de no perderse nada.

Todo este tiempo vivido le ha dado para mucho. Nació en Nueva de Llanes, allá por 1910, y tuvo otros cuatro hermanos, aunque uno falleció siendo niño. Fue una de esas niñas que no pudo ir a la escuela, pero eso no le impidió aprender a leer y a escribir. Eso sí, lo tuvo que hacer sola, pasados los 30 años.

Ya desde niña no lo tuvo fácil. Su padre falleció a los 42 años, de silicosis, y con sólo 8 años se vio obligada a encargarse de la familia mientras su madre se iba a trabajar. Ella misma tuvo que ponerse a servir en casas desde muy joven. Habla con emoción de su primer sueldo: una paga de 20 céntimos.

En 1932 tuvo que irse a Madrid, destino de tantos asturianos que buscaban oportunidades. Allí la encontró la Guerra Civil, que la hizo emigrar en un convoy de la Cruz Roja con destino a Marbella. Como tantos en aquella época, pasó mucha hambre.

Pero no todo fueron desgracias.Al finalizar la guerra regresó a Madri, donde consiguió trabajo como parte del servicio de la casa del hijo del Marqués de Romanones, donde pasaría 14 años y en la que conocería al que sería su marido, José Conde, asturiano de Cangas del Narcea.

Su futuro marido tuvo que esperar seis meses por ella, mientras estuvo en Londres en calidad de doncella con la hija de la casa en que servía. Al igual que muchos otros cangueses, su marido consiguió plaza de sereno en la capital y ella se colocó como encargada de una portería en Delicias, calle de gran importancia en Madrid. Enviudó en 1995. El personal de la residencia elaboró una presentación fotográfica con instantáneas suyas, que permitió a Mercedes revivir momentos y personas de toda su vida.