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manda guevos con esto:


El empleado solicita a la dirección de la empresa que reconsidere la decisión de despedirlo, en el acto de conciliación que se celebra hoy

La dirección de Hunosa y el trabajador despedido por insultar en público a la presidenta de la empresa, María Teresa Mallada, asistirán hoy a un acto de conciliación en Oviedo. La hullera planteó en la reunión del comité intercentros del pasado 30 de septiembre la salida de la empresa del empleado, que desarrollaba su trabajo en el pozo María Luisa, en Langreo.

El trabajador, Alejandro Rodríguez Tejado, remitió ayer a la sección de Cartas de este diario un escrito en el que alude al "lamentable incidente" que ocurrió el pasado 21 de septiembre, en La Felguera. Aseguró que su forma de actuar en aquel momento "fue equivocada e impropia de mí", para a continuación lamentar el daño que ha podido ocasionar. "Pido disculpas por ello", subraya. Además, el minero achaca el incidente a "un momento de ofuscación y pide que se tenga en cuenta su "conducta de trabajador intachable" para reconsiderar su despido.

Los hechos tuvieron lugar el pasado sábado 21 de septiembre, en la terraza de una sidrería del centro de La Felguera. Allí se encontraron el trabajador y la presidenta de la hullera, que estaba en aquel momento acompañada por familiares. El minero, supuestamente, comenzó a proferir insultos contra Mallada e incluso se produjo un fuerte enfrentamiento verbal entre el trabajador y los familiares de la presidenta de Hunosa.

Posteriormente, la dirección de la hullera abrió un expediente disciplinario al empleado del pozo María Luisa y calificó los hechos como muy graves. Le entregó la carta de despido al trabajador y abrió un plazo de veinte días para que tanto el afectado como los sindicatos pudiesen presentar alegaciones contra la decisión de la dirección de la compañía. La resolución fue comunicada en la reunión del comité intercentros a los representantes del SOMA-FITAG-UGT, la Federación de Industria de CC OO y la Federación de Cuadros de la Minería. Antes de que la hullera tomase la decisión se especulaba con una sanción que podía oscilar entre los 45 días de suspensión de empleo y sueldo hasta llegar al despido como pena máxima. Hunosa optó finalmente por la última opción al calificar los hechos como muy graves. La dirección de la empresa y el trabajador acudirán hoy al acto de conciliación.