Larna - Asturias

Finales de los noventa, unos cuantos desocupados jóvenes del lugar están sentados en la piedra preciosa de la entrada al parreiro de la casa vieja de García. Todos esperan que algo pase y matan el tiempo de la siesta hablando de esto y de aquello.
CdeV da detalles, con una mezcla de resignación, admiración y envidia, sobre el tamaño del miembro viril de un tipo de color negro que “actuaba” en una película, de algo más que contenido erótico, que había devorado con avidez hacía un tiempo.
El monólogo se va transformando en conversación y en comparación, con mucha guasa, de alguno de los casi hombres que se juntaban al magnífico fresco de la humedad del Píngano.
MdeG guarda un silencio casi sospechoso, hasta que un determinado momento, cuando el tema estaba ya casi concluido, empieza a esbozar una sonrisa de sorna e inclinando la cabeza para acodarse la gorra suelta un estruendoso:

“¡Bah! Yo el rabo... tener nun lo tengo muy largo. Ahora eso sí, tengo una cojonada como la de un paisano, me cagondios...”

¡¡¡Pero que pasa aquí?!!! Nadie es capaz de ponerte algún comentario, aunque sean los que participaron, en su dia, del "evento", bien sea para corroborarlo o para corregirte en el caso de algún "despiste".
Esta visto que esto ya no es lo que era.
Por cierto, pero vosotros que clase de películas veíais? Donde las ponían? En el salón del Roxu? (no creo, eh). Aparte de esto, aún no sabías que "el tamaño no importa", que dicen algun@s.
Un abrazo,
JoséLuis

eso me pasa por no corregir los textos antes de ponerlos, me está bien empleado.
en cuanto a lo del tamaño no sé qué decirte, jotaele, fue mi primera experiencia (por suerte SÓLO visual...) en miembros de tronío.
caramba como se las gastan algunos.
un abrazo