Gallinal - Asturias

No, no, quien ríe mejor es el que ríe el día de San Pedro. Veréis: Detrás de mi casa está la iglesia, nos separa una finca de mi propiedad con un quemador en medio, donde ahora hago rebosar de "morgazo" y restos de poda.
Durante las municipales pegué todo el muro que da a la iglesia con la cartelería propia de campaña, para que quienes pasaban vieran nuestra opción.
Cada domingo, después de las misas de rigor, tenía que reponer la cartelería, pues, ciertos desaprensivos, rencorosos con mi opción, los arrancaban con saña...

Por fin llegó San Pedro, con la procesión del santo, el repique de las campanas, cohetes, tracas y una muy concurrida misa mayor (con puertas y ventanas abiertas, debido al calor veraniego)
Sentí los cánticos clericales como una señal del cielo, momento en que prendí fuego a mi quemador que exhalo una bocanada de humo espeso: igual que una compacta nube celestial que la brisa mañanera empujó, dócil a mis plegarias, dentro de la iglesia donde se congregaban los enemigos de mis carteles.
El humo fue in crescendo hasta que, concluida la misa, salieron los fieles, con los ojos irritados, tosiendo muchos de ellos.
El añoso Marcelo, viejo y conocido carca, a quien su escasa salud lo condena a la silla de ruedas y a respirar de una mochila con oxígeno, hacía visibles esfuerzos para arrancar a la bolsa unas bocanadas que apenas le sirvieron para murmurarme sus reproches rencorosos:
,-¡Me vas a matar!
,-Es igual, Marcelo. Te hago un favor, si mueres en Gracia de Dios vas derechito al cielo, -contesté entre carcajadas propias, y la mirada indignada del resto de feligreses. Mientras con la espátula despegaba el resto de carteles de mi fachada, que el aire aventaba hacia la peana con la imagen de San Pedro portada en andas-.

Por eso os digo, amigas y amigos míos, que yo, de momento, y por muchos años, prefiero reír el día de San Pedro.

Y un saludito a todas y a todos.

Un saludito para ti tambien cariño

Borrado por un Moderador.

El análisis de la sangre de Ortega Cano indica que el diestro tenía 1,26 gramos de alcohol en sangre cuando sufrió el 29 de mayo un accidente.
Los abogados del conductor fallecido en el siniestro solicitarán una declaración judicial de Ortega Cano cuando éste se recupere.

`pa pensar la insensatez en el caso de que sea cierto