Boquerizu - Asturias

La sociedad nos basamos en la hipocresía. La hipocresía necesaria de callar
lo que pensamos o al menos atenuarlo. De niños nos educan en la defensa de la verdad , que es un precepto común a todas las religiones. Pero es una enseñanza ritual , vacía de contenido , de la que pronto nos descabalgan por métodos más sutiles. La VERDAD NOS CONDUCE AL CAOS Y AL DOLOR. ¿Qué oficina funcionaría si sus empleados y jefes se espetasen sus verdades a la cara?. ¿Qué convivencia aguantaría su embate?.¿Qué matrimonios resistiríamos a la constante exposición de lo que realmente deseamos?. La verdad no nos hace libres, sino desgraciados, y acarrea mayor sangre sobre sí que la mentira.

Yo prefiero la verdad siempre, pero hay veces...que una mentira piadosa no hace mal a nadie, muchas veces la verdad es muy cruel.
Saludos.

En esto,creo que siempre nos equivocamos,cuando decimos la verdad,en
ocasiones la decimos con crueldad y cuando decimos la mentira piadosa,
generalmente decimos la peor de las mentiras.¿donde está el equilibrio? Yo creo que depende en muchas ocasiones,según nuestro estado de ánimo.
Saludos